Iglesia de Base recuerda que el Gobierno agravi¨® al Papa durante la guerra de Irak

La precampa?a electoral amenaza con enrarecer la visita de Juan Pablo II, que ya se enfrent¨® en octubre de 1982 a una situaci¨®n semejante. Entonces, el Vaticano acept¨® retrasar el viaje al ¨²ltimo d¨ªa del mes, tres jornadas despu¨¦s de la victoria del PSOE por abultada mayor¨ªa absoluta, pero ahora son los cristianos de base de la Iglesia de Madrid los que alzan la voz contra la posible utilizaci¨®n partidista del viaje pontifical.

"Como cristianos nos disponemos a recibir con gozo la visita del Papa, pastor universal de la Iglesia cat¨®lica", afirman, "y pedimos que cuantos acompa?an m¨¢s de cerca al Papa aseguren bien su prop¨®sito y finalidad pastorales y no programen ning¨²n acto oficial con el Gobierno, que significar¨ªa un protagonismo politizado del mismo, interesado y electoralista".

"Sonar¨ªa a hipocres¨ªa que quienes no le hicieron ning¨²n caso [en la guerra de Irak] pretendieran ahora rendirle pleites¨ªa", se?ala el comunicado emitido ayer por la comisi¨®n gestora de Iglesia de Base de Madrid, integrada por Nevenka Franic, Ricardo Gayol, Jos¨¦ Mar¨ªa Navarro y Benjam¨ªn Forcano. "?No en nuestro nombre!", exclaman contra "quienes de una u otra manera intentar¨¢n, a pesar de lo ocurrido, manipular la visita".

El manifiesto de Iglesia de Base de Madrid recuerda que "no han pasado todav¨ªa dos meses desde que se inici¨® la guerra contra Irak con el consiguiente quebranto de la legalidad internacional y la masacre ejercida sobre el pueblo de Irak", y que el Papa "conden¨® reiteradamente esta guerra con palabras como 'la guerra es siempre una derrota de la humanidad. El derecho internacional, el di¨¢logo leal, la solidaridad entre los Estados, el ejercicio tan noble de la diplomacia, son los medios dignos del hombre y las naciones para solucionar sus contiendas'".

El respeto negado

Iglesia de Base afirma que "millones y millones de ciudadanos y de cat¨®licos de todo el mundo, en feliz acuerdo con esta palabras del Papa, clamaron contra la guerra y exigieron ardientemente evitarla por innecesaria, ilegal, injusta e inmoral". "Pues bien, no por obvio resulta in¨²til recordar que el Gobierno espa?ol fue, en este caso, uno de los coautores de la guerra, prepar¨¢ndola, apoy¨¢ndola y decidi¨¦ndola deliberada y p¨²blicamente, en contra de la mayor¨ªa absoluta de los espa?oles y en contra de la autoridad moral del Papa, por m¨¢s que hayan pretendido camuflarla como simple ayuda humanitaria. Los j¨®venes, sobre todo, vibraron al un¨ªsono con las palabras del Papa condenando la guerra y pidiendo la paz", a?ade este colectivo de cristianos.

"Los cat¨®licos no debemos olvidar la grave responsabilidad contra¨ªda por el Gobierno y el agravio que infiri¨® a la autoridad moral del Papa. La sociedad fue testigo y debe aprovechar la visita para agradecerle, aplaudirle y demostrarle la adhesi¨®n y respeto que el Gobierno le neg¨®", concluye.