Educaci¨®n p¨²blica versus educaci¨®n privada

El Ayuntamiento de Balmaseda podr¨ªa llegar a subvencionar con 288 euros (48.000 pesetas de antes) por alumno y a?o a un centro privado concertado. Total de subvenci¨®n anual: alrededor de 12 millones de pesetas. ?Deben las instituciones p¨²blicas subvencionar a la ense?anza privada? No tiene sentido subvencionar a la escuela privada cuando la p¨²blica tiene capacidad suficiente para escolarizar a todos los posibles alumnos, cuando se cuenta con profesores capacitados que imparten un n¨²mero de horas de clase con el que se asegura una calidad equivalente o superior a la de la ense?anza privada.

?Tiene alg¨²n sentido que se subvencione con dinero p¨²blico a una escuela privada para que pueda mejorar sus instalaciones? ?Hay alguna raz¨®n para que paguemos entre todos a una escuela privada con el ¨²nico objetivo de que ofrezca un servicio que ya tenemos y por el que ya hemos pagado?

La Administraci¨®n P¨²blica es nuestra gran empresa. Estamos exigiendo que sea eficaz, que nos d¨¦ el m¨¢ximo servicio con el coste m¨ªnimo. Los responsables p¨²blicos de Balmaseda deber¨ªan reflexionar sobre los servicios que se ofrecen a sus ciudadanos y cuidar de su mantenimiento futuro como medio para asegurar el que toda la poblaci¨®n pueda acceder, en id¨¦nticas condiciones, a un futuro digno en el que la educaci¨®n es un valor fundamental. Balmaseda cuenta con un instituto p¨²blico que da servicio a toda la comarca de las Encartaciones.

La ubicaci¨®n del instituto en Balmaseda obedece m¨¢s a razones hist¨®ricas de capitalidad de la villa que a la realidad actual de la situaci¨®n de Balmaseda dentro de la comarca encartada.

Los servicios comarcales que actualmente se ofrecen desde Balmaseda se pueden cuestionar en el futuro. No se entiende que sea el propio Ayuntamiento el que fomente la competencia a su instituto p¨²blico en el propio pueblo ayudando a una instituci¨®n privada de ense?anza cuyo funcionamiento no asegura la calidad que actualmente se ofrece en la ense?anza p¨²blica y que va a ser selectiva en la acogida de los alumnos y no va a asegurar la formaci¨®n de los m¨¢s desfavorecidos, lo que es una de las bases irrenunciables de nuestro sistema de libertades.