La sociedad de seda
Del Bosque ha encontrado en la pareja Zidane-Guti el ¨²ltimo argumento demoledor del Madrid
Manchester, pasado 23 de abril. Partido de vuelta de cuartos de final en Old Trafford. Del Bosque hurga en la chistera y resuelve la baja de Ra¨²l, el car¨¢cter del Real Madrid, con una inesperada maniobra t¨¢ctica. Situ¨® a Zidane de Ra¨²l, como segundo delantero; con Guti por detr¨¢s, a mitad de camino entre la antigua posici¨®n del franc¨¦s y la de doble pivote, y McManaman de acompa?ante para apoyar en el f¨²tbol de toque y ayudar en los asuntos defensivos por la izquierda. Esa medida imprevista ha lavado la cara del Madrid de tal forma que ahora parece el mejor argumento para cerrar con aire triunfal la temporada. "Era una soluci¨®n que ven¨ªa manejando hace tiempo, antes incluso de la baja de Ra¨²l", sostiene Del Bosque sin darse excesiva importancia.
"Alrededor de Zidane, todos los futbolistas de toque salen beneficiados", dice Del Bosque. "Y con esta f¨®rmula ganamos en control del juego, un aspecto que necesitaba el equipo". El t¨¦cnico liber¨® a Zidane de obligaciones defensivas, le dio plena libertad de movimientos y le puso al borde de su mejor versi¨®n. "Zidane proviene de un f¨²tbol muy t¨¢ctico como el italiano. Y librarle de obligaciones defensivas ha potenciado su juego. Ahora juega m¨¢s suelto".
La respuesta del franc¨¦s en las dos oportunidades que ha disfrutado en su nueva posici¨®n, ante el Manchester y en el segundo tiempo en Sevilla, como segundo delantero, por detr¨¢s de Ronaldo pero por delante de Figo, Makelele, Guti y McManaman, no se ha hecho esperar. Destac¨® en Old Trafford, y en el estadio de La Cartuja, donde marc¨® un gol, le sirvi¨® en bandeja a Helguera otro y lider¨® en todo momento el juego de su equipo. "Se trata de colocar a varios jugadores por detr¨¢s del bal¨®n", matiza el entrenador de los blancos, que no obstante, prefiere escapar de cualquier m¨¦rito: "Era una opci¨®n; pero creo que se trata de la mejor soluci¨®n"
Otra de las novedades del nuevo dibujo de Del Bosque es la presencia de Guti cerca de Makelele, como organizador, como principal surtidor de balones de Zidane. "Estoy en un buen momento porque juego donde me gusta". A Guti le falta el dominio de los asuntos defensivos b¨¢sicos en esa zona del campo. Pero lo suple, con su superioridad en el manejo de la pelota. "Guti garantiza la posesi¨®n del bal¨®n y da mucha profundidad al juego del equipo", sostiene Del Bosque. El centrocampista madrile?o comenz¨® la temporada como punta, luego como segundo delantero y s¨®lo hab¨ªa aparecido como doble pivote en los ¨²ltimos minutos cuando de lo que se trataba era de manejar el resultado. Sobre todo ha sido una suerte de hombre n¨²mero doce para Del Bosque, bien para jugar delante -es el ¨²nico jugador de la plantilla que ha anotado en todas las competiciones oficiales-, bien para organizar el juego.
Por ¨²ltimo, McManaman. Seg¨²n apunta Del Bosque, el futbolista ingl¨¦s "hilvana muy bien el juego y garantiza la posesi¨®n del bal¨®n". El preparador ha confiado en McManaman en otros momentos decisivos. Pero en esta temporada, en la que su nombre ha asomado por las alineaciones, parec¨ªa que la oportunidad ya no iba a llegar. "No me lo esperaba, la verdad", apunta el ex del Liverpool. "Lo que quiero es jugar; me da igual d¨®nde. S¨®lo me siento ¨²til si juego", matiza. Tal vez el t¨¦cnico podr¨ªa haber apostado por Solari, pero las caracter¨ªsticas del argentino pasan m¨¢s por la conducci¨®n y el desborde que por el toque, el factor capital en la nueva f¨®rmula del Madrid.
Justo cuando el Madrid ha perdido a Ra¨²l, el preferido del entrenador, de los aficionados y de la opini¨®n p¨²blica, otros jugadores han mejorado su rendimiento. Y todo gracias a un matiz t¨¢ctico, a un revolc¨®n posicional de algunas piezas. La paradoja, no obstante, no confunde a Del Bosque, quien tiene claro que Ra¨²l nunca representa un problema. Mientras siga ausente, convaleciente a¨²n al menos durante dos semanas, el Madrid seguir¨¢ jugando bajo su nuevo traje. Cuando retorne Ra¨²l, Del Bosque ya pensar¨¢ lo que hace. Pero de algo est¨¢ seguro: "Ra¨²l jugar¨¢ de nuevo. Donde sea, pero jugar¨¢". Hasta entonces, hoy, ante el Mallorca, la ¨²ltima sociedad de seda volver¨¢ a hablar.
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