Aznar pedir¨¢ ma?ana a Bush en Washington que declare a Batasuna grupo terrorista

El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, pedir¨¢ ma?ana en Washington al presidente de EE UU, George W. Bush, que el Departamento de Estado incluya a Batasuna en su lista de organizaciones terroristas. El encuentro de los dos mandatarios, a la hora de la cena, marcar¨¢ el punto culminante de una breve gira norteamericana de Aznar, que tendr¨¢ como tema central la lucha antiterrorista. La reconstrucci¨®n de Irak quedar¨¢ en segundo plano, cediendo protagonismo al proceso de paz en Oriente Pr¨®ximo, que Aznar quiere impulsar en el Congreso Jud¨ªo, adem¨¢s de en la Casa Blanca.

La entrada de Batasuna en el repertorio internacional del terror que cada dos a?os publican los responsables de la pol¨ªtica exterior estadounidense carecer¨¢ de efectos pr¨¢cticos relevantes, toda vez que ETA ya figura desde 1997 en dicha lista. Batasuna no tiene actividades conocidas en EE UU y es poco probable que vaya a desarrollarlas una vez que ha sido ilegalizada en Espa?a. La medida s¨ª puede tener, no obstante, alg¨²n reflejo disuasorio sobre eventuales campa?as de los radicales en Estados como Idaho, donde los nacionalistas vascos se han mostrado muy activos, y, de rebote, en terceros pa¨ªses, especialmente de Am¨¦rica Latina.

El Gobierno pidi¨® la inclusi¨®n de Batasuna en el elenco del Departamento de Estado, junto a grupos como Al Qaeda, en cuanto el Tribunal Supremo decidi¨® ilegalizar esa organizaci¨®n, el pasado 17 de marzo, por su vinculaci¨®n a ETA. El proceso requiere, sin embargo, una tramitaci¨®n. Aznar pretende aprovechar su estancia en Washington para acelerarla y regresar a Madrid al menos con el compromiso firme de que se dar¨¢ un paso que implica consecuencias legales, como el bloqueo de fondos o la prohibici¨®n de ingreso en EE UU para las personas relacionadas con la organizaci¨®n se?alada.

Ese objetivo se plantea en el contexto de un viaje tan marcado por la coyuntura preelectoral espa?ola que para estar de vuelta en Madrid en la primera jornada de la campa?a el presidente ha tenido que renunciar a asistir a la cena del Congreso Jud¨ªo Americano, a pesar de que es la invitaci¨®n que motiv¨® esta gira.

Coincidiendo con la voluntad expresada por distintos dirigentes del PP de apartar el debate pol¨ªtico de la guerra de Irak para concentrarlo en temas dom¨¦sticos, entre ellos el terrorismo y el Pa¨ªs Vasco, el hecho es que en la agenda de este viaje de Aznar destaca la lucha antiterrorista.

Discurso en la ONU

El presidente del Gobierno abordar¨¢ ese asunto esta misma tarde en Nueva York con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, antes de pronunciar un discurso ante el Consejo de Seguridad en calidad de presidente de turno del Comit¨¦ contra el Terrorismo. Aznar explicar¨¢ a los embajadores de los 15 pa¨ªses -los mismos del Consejo- que integran esa unidad, creada despu¨¦s del 11 de septiembre de 2001, el plan espa?ol para los 18 meses que puede durar su presidencia.

Ma?ana por la ma?ana, tras desayunar en Nueva York con el equipo editorial de The Wall Street Journal, Aznar volver¨¢ a hablar de terrorismo durante el almuerzo en Washington con Tom Ridge, el zar antiterrorista designado por Bush tras el 11-S, y con John Ashcroft, el fiscal general de EE UU y ministro de Justicia.

Ridge y Aznar se conocen de la visita que el presidente espa?ol realiz¨® a la capital estadounidense en abril del a?o pasado, cuando ambos hablaron de c¨®mo intensificar los intercambios de informaci¨®n y de conceptos sobre la lucha antiterrorista. Como consecuencia de aquel encuentro, Ridge visit¨® posteriormente Espa?a. La cita de ma?ana servir¨¢ para repasar el estado de la cooperaci¨®n, que el Gobierno espa?ol ha calificado reiteradamente de "fundamental", y para examinar el tema de Batasuna. Por parte espa?ola intervendr¨¢ en esta reuni¨®n, junto al presidente, el secretario de Estado de Seguridad, Ignacio Astarloa.

Tambi¨¦n en la entrevista de Aznar con Bush, a la seis de la tarde del mi¨¦rcoles, la lucha antiterrorista ocupar¨¢ un lugar destacado. Fuentes gubernamentales espa?olas insisten en que ¨¦ste es el tema que m¨¢s ha acercado a los dos dirigentes y el que explica su alianza frente a Sadam Husein.

La reconstrucci¨®n de Irak, aunque mencionada, no ser¨¢, sin embargo, el asunto central de la entrevista. Al menos Aznar no lo pretende. El Gobierno espa?ol, indican fuentes de La Moncloa, est¨¢ plenamente satisfecho con la distribuci¨®n de tareas acordada entre los miembros de la coalici¨®n, y, en concreto, con que a Espa?a no se le adjudiquen la direcci¨®n del control de alguna zona del pa¨ªs. Por lo dem¨¢s, hay pleno acuerdo con EE UU sobre el tratamiento de este proceso en el seno de la ONU, a trav¨¦s de resoluciones parciales y sucesivas.

Aznar, que ayer recibi¨® una llamada telef¨®nica del presidente de Francia, Jacques Chirac, s¨ª piensa plantearle a Bush la necesidad de restablecer la sinton¨ªa entre EE UU y Europa, por encima de cualquier diferencia.

Pero el presidente del Gobierno quiere mirar, sobre todo, al futuro de Oriente Pr¨®ximo. Entre sus deseos se encuentra que Madrid sea sede de la nueva Conferencia de Paz prevista para finales de este a?o. En ese sentido, Aznar quiere convencer al influyente Congreso Jud¨ªo, que agrupa a casi todas las organizaciones hebreas americanas, de que apoye la Hoja de Ruta elaborada por el Cuarteto que integran EE UU, la UE, la ONU y Rusia. El jueves por la tarde pronunciar¨¢ su discurso, aunque no se quede a la cena.