El IFA impulsa un plan para "sacar las patentes de los cajones" y transformarlas en empresas

Convertir las patentes universitarias en empresas. Esa es la idea que ha alentado al director general del Instituto de Fomento de Andaluc¨ªa (IFA), Francisco Menc¨ªa, a poner en marcha un nuevo programa de ayudas. El IFA se ha puesto en contacto con las universidades andaluzas para proponerles que act¨²en como "compa?eros de viaje" de los grupos de investigadores que decidan crear una sociedad para explotar comercialmente sus patentes. Menc¨ªa prev¨¦ seleccionar este a?o al menos 30 proyectos y respaldar cada uno con una subvenci¨®n m¨¢xima de 100.000 euros.

La ayuda, en forma de pr¨¦stamo participativo, ser¨¢ utilizada por las fundaciones universitarias para constituir, junto a los investigadores, el capital social de la nueva empresa.

"El trabajo de muchos investigadores andaluces termina en las patentes, las universidades no saben luego qu¨¦ hacer con ellas y acaban escondidas en un caj¨®n", explica el director general del IFA, quien se muestra convencido de que "algunas tienen posibilidades comerciales". Menc¨ªa ha ocupado sus primeras semanas al frente de la agencia de desarrollo andaluz en visitar a casi todos los rectores de las universidades andaluzas para hacerles una propuesta: "Sacar de los cajones las patentes comercializables y ponerlas en el mercado".

Con esta propuesta, el IFA trata de aflojar un poco el nudo principal del sistema de I+D regional, afectado por la conocida como paradoja europea. Como la mayor parte de las econom¨ªas comunitarias, la producci¨®n de art¨ªculos y publicaciones de los investigadores andaluces es notable pero, al contrario de lo que pasa en EE UU o Jap¨®n, la aplicaci¨®n de esta investigaci¨®n b¨¢sica es muy baja. Una circunstancia que se relaciona con el hecho de que el gasto de las empresas regionales en I+D es muy inferior al que realiza el sector p¨²blico, b¨¢sicamente centrado en las universidades.

En vista de que la apuesta de las empresas por innovar sigue siendo muy d¨¦bil, el IFA se ha planteado animar a los investigadores universitarios a crear empresas a partir de sus propias innovaciones. Seg¨²n datos de la Oficina Espa?ola de Patentes y Marcas, las universidades andaluzas solicitaron 67 patentes en 2002, una cuarta parte de las peticiones que cursaron las universidades espa?olas. Desde 2000, se han triplicado las solicitudes, pero casi ninguna tiene visos de ser comercializada.

Menc¨ªa mantiene que todas las universidades andaluzas han acogido "entusiasmadas" su propuesta. En las pr¨®ximas semanas, el IFA firmar¨¢ contratos con las instituciones universitarias "en las que se han integrado agentes socioecon¨®micos", bajo la f¨®rmula de fundaciones universidad-empresa o consorcio. Ser¨¢ a esas instituciones a las que el IFA otorgar¨¢ "un pr¨¦stamo participativo al 0% de inter¨¦s y con un largo plazo de devoluci¨®n", con el tope de 100.000 euros para que aporten "hasta el 49%" del capital social de la empresa que va a explotar la patente seleccionada. El resto del capital lo pondr¨¢n "los creadores de la patente o quien ellos designen", su aportaci¨®n no tiene por qu¨¦ ser estrictamente econ¨®mica, ya que se podr¨¢n valorar sus conocimientos sobre c¨®mo explotar la patente.

"Es una inversi¨®n de riesgo, pero de un riesgo medido y no lo asume la universidad, sino nosotros", aclara Menc¨ªa. En el contrato de formaci¨®n de la empresa se fijar¨¢ un l¨ªmite temporal, "entre tres y cinco a?os", para revisar la salud del proyecto. "Si la idea empresarial ha fracasado, perdemos el pr¨¦stamo, la universidad no tiene que devolverlo", explica el director del IFA. Por el contrario, si el proyecto tiene ¨¦xito comercial, la instituci¨®n universitaria deber¨¢ vender su parte en la empresa a alg¨²n grupo privado o a los propios investigadores. Y con los ingresos devolver¨¢ el pr¨¦stamo. "Si hay plusval¨ªas, se repartir¨¢n entre el IFA y la universidad que, como poco, se quedar¨¢ con la mitad de los beneficios". Menc¨ªa es consciente de que "el porcentaje de fracasos ser¨¢ muy alto", pero tambi¨¦n cree que las que salgan adelante, por su base tecnol¨®gica, tendr¨¢n un crecimiento muy r¨¢pido y bastar¨¢n para hacer rentable la ayuda.

"Este programa est¨¢ m¨¢s cercano a la inversi¨®n en riesgo que a la cultura de la subvenci¨®n". La Universidad de C¨®rdoba ser¨¢ la primera en formalizar sus propuestas, ya que Menc¨ªa prev¨¦ firmar el contrato con su consorcio en 10 d¨ªas.