"He ganado dos carreras, mucho m¨¢s que el 99% de los corredores"
Su figura se agigant¨® de golpe hace dos semanas, en el circuito de Welkom (Sur¨¢frica), en el segundo gran premio de los Campeonatos del Mundo de motociclismo. Lleg¨® el primero a la meta, delante del italiano Valentino Rossi, un sacrilegio cuando de la categor¨ªa MotoGP se trata. Aquel triunfo tuvo un brutal poso sentimental. Pocos d¨ªas antes, el japon¨¦s Daijiro Kato, su compa?ero en el equipo Honda Gresini, hab¨ªa muerto como consecuencia de las heridas sufridas en su accidente en Suzuka (Jap¨®n) en la carrera inaugural del curso. Sete Gibernau (Barcelona, 1972) no pudo encontrar mejor forma de homenajear a Kato. Hoy, en Jerez, el nieto de Francisco Bult¨®, fundador de la escuder¨ªa Bultaco, se subir¨¢ de nuevo a su m¨¢quina para intentar lo que nadie ha conseguido: moverle el trono a Rossi.
"No me corresponde el papel del anti-Rossi. Me mueve la ilusi¨®n por trabajar, nada m¨¢s"
Pregunta. ?Se puede seguir llam¨¢ndole Sete o hay que llamarle ya don Manuel?
Respuesta. Sete, Sete. Es mi nombre. Y es lo que pone en el carnet de identidad. Pero si me quiere llamar de otra manera...
P. ?No se llama Manuel?
R. Me llamaba Manuel cuando nac¨ª. Pero lo cambiamos. Cosas de familia.
P. Le ha ganado usted una carrera a Valentino Rossi, la de Sur¨¢frica, y tiene tratamiento de h¨¦roe nacional.
R. Dentro de este circo, uno se siente mejor as¨ª. Yo hago mi trabajo lo mejor posible.
P. Le han llegado los piropos a los 30 a?os de edad. Un poco tarde, quiz¨¢.
R. No lo creo. Era muy feliz cuando no ganaba y soy muy feliz ahora.
P. Pero es demasiado tiempo desde Valencia, en 2001, cuando gan¨® su primera y ¨²ltima carrera hasta la de Welkom.
R. Si en ese tiempo alguien que llevara el mismo material que yo hubiese hecho algo bueno, ser¨ªa para pens¨¢rselo. Pero, para lo que ten¨ªa entre las manos, lo hicimos m¨¢s que bien.
P. La moto como excusa. ?No es un discurso muy t¨®pico? ?Para cu¨¢ndo la culpa del piloto?
R. El a?o pasado nadie hablaba de m¨ª. Estaba detr¨¢s, no hab¨ªa entrevistas... Ahora estoy delante y gano carreras. He cambiado de moto, pero no de f¨ªsico. Mi cuerpo es el mismo; la moto, no.
P. Quedar el 16?, como en el pasado campeonato, y que conf¨ªen en uno en uno de los equipos punteros, como Honda... ?Qu¨¦ hizo para conseguirlo?
R. Yo no he forzado a nadie a confiar en m¨ª. Si lo han hecho, ser¨¢ porque algo habr¨¢n visto.
P. ?Conoce sus n¨²meros? ?Las carreras que ha corrido? ?Las que ha ganado?
R. No. Bueno; las que he ganado, s¨ª: dos.
P. Lleva 11 a?os en los Mundiales. Ha participado en 113 pruebas. S¨®lo dos victorias...
R. Mucho m¨¢s que el 99% de los pilotos.
P. No me diga que se esperaba el triunfo en Sur¨¢frica.
R. S¨ª. Hicimos una magn¨ªfica pretemporada y sab¨ªamos que est¨¢bamos preparados. Fue precioso.
P. ?Qu¨¦ le parece que Rossi declare que usted es uno de sus m¨¢ximos rivales para revalidar el t¨ªtulo?
R. Magn¨ªfico. Pero, en mi vida deportiva, he sabido subir, bajar, desaparecer, volver a ganar... Yo no he cambiado. Valentino sigue siendo la referencia. Es un fen¨®meno. Y yo tengo que luchar para ganarle.
P. ?Le molest¨® que se dijera que, en aquella carrera, Rossi no se emple¨® a fondo para que usted pudiera dedicar la victoria al desaparecido Kato?
R. No. ?Por qu¨¦ me iba a molestar?
P. El propio Rossi ha dicho que no se dej¨® ganar, que fue a tope. ?Tambi¨¦n usted lo cree as¨ª?
R. Yo no lo creo; lo s¨¦.
P. Usted fue dur¨ªsimo con la organizaci¨®n tras el accidente de Kato. Se convirti¨® en un abanderado y declar¨® que no volver¨ªa a correr all¨ª. ?Lo mantiene?
R. Por supuesto. Ning¨²n piloto va a volver a un circuito que consideremos peligroso. Pero, en ese sentido, ahora se est¨¢n haciendo las cosas bien.
P. Da la sensaci¨®n de que en Espa?a seguimos esperando que nazca un anti-Rossi. ?Le gusta el papel?
R. Yo quiero hacerlo bien, pero no pienso que me corresponda ese papel. Me mueve la ilusi¨®n por trabajar, nada m¨¢s.
P. ?Piensa que Rossi est¨¢ por encima de los dem¨¢s?
R. No.
P. Pues no deja de desesperar a todo aqu¨¦l que se le cruza.
R. Es normal, porque es un crack. Ah¨ª est¨¢n los hechos. Pero a m¨ª no me gusta mucho hablar. Me gusta actuar. Aqu¨ª, delante de usted, cualquier persona puede decir que es capaz de ganar a Rossi y quedarse tan a gusto.
P. ?Se ve consigui¨¦ndolo hoy?
R. Claro que s¨ª. Y tambi¨¦n veo al Madrid ganando al Juventus y meti¨¦ndose en la final de la Champions. Ser¨ªa fant¨¢stico, ?no le parece?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.