Cartier-Bresson: entre Virgilio y Verlaine

El m¨¦todo de la exposici¨®n Henri Cartier-Bresson, ?de qui¨¦n se trata? se basa en un sistema de trabajo al que siempre ha sido fiel Henri Cartier-Bresson: la elaboraci¨®n de un ¨¢lbum previo con tapas duras, muy gruesas. Concretamente en el suyo -el de entonces- figuraban impresas, en su cubierta, las palabras Scrap Book, bajo ellas almacen¨® secuencias de unas doscientas fotograf¨ªas, formato 9¡Á12 cent¨ªmetros. La historia de este Book empez¨® en 1937 cuando le dieron por desaparecido en Am¨¦rica y Nancy Newhall propuso organizar una exposici¨®n monogr¨¢fica sobre su obra en el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Era s¨®lo un rumor, lo ten¨ªan preso los alemanes; despu¨¦s, a?os m¨¢s tarde, en 1947, el Scrap Book se convirti¨® en una exposici¨®n de fusi¨®n de est¨¦ticas, cuyo mestizaje toleraba la conjunci¨®n de los retratos improvisados de Matisse, Bonnard y toda una generaci¨®n de referentes culturales junto a las instant¨¢neas "de la vida" expuestas, anteriormente, en la galer¨ªa Julien Levy (Nueva York). Es el mismo gui¨®n conceptual de la actual muestra.

Cualquiera de estas instant¨¢neas bien podr¨ªa ser el punto de arranque de una novela

2003 es el a?o de la fotograf¨ªa

de Henri Cartier-Bresson, en Par¨ªs. Actualmente, se puede visitar una gran exposici¨®n que nos evoca el esp¨ªritu de aquella otra, en la Biblioteca Nacional de Francia (BNF), a la vez que una fundaci¨®n que lleva su nombre y est¨¢ dedicada a su universo fotogr¨¢fico, dibujos, pinturas, pel¨ªculas e im¨¢genes de toda suerte de naturaleza (y a otros fot¨®grafos que est¨¢n identificados con su forma de hacer). Todo ello es fruto de la formaci¨®n de un hombre que supo sintetizar la cultura de tres siglos: el XIX, XX y XXI.

Henri Cartier-Bresson, ?de qui¨¦n se trata? (HCB "de qui s'agit il, t¨ªtulo de la muestra, es el fruto del trabajo de un equipo que ha puesto en orden su obra "tratando de responder a esta pregunta -?de qui¨¦n se trata?-, clasificando fotograf¨ªas (muchas in¨¦ditas), recuerdos de su infancia y adolescencia, de la guerra y su familia, sus mejores dibujos" y los retratos realizados por aquellos con los que comparti¨® la historia, la ¨¦tica y la est¨¦tica; tambi¨¦n, sus pel¨ªculas propias y las que le hicieron, adem¨¢s de una serie de tirajes fotogr¨¢ficos de distintas ¨¦pocas inventariados con una escrupulosa precisi¨®n cronol¨®gica. A todo ello hay que a?adir el rescate de algunas de sus primeras tomas, desconocidas hasta la fecha.

Me consta, como ¨¦l cuenta, que sin la firme apuesta de su esposa, Martine Franck, fot¨®grafa de Magnum -agencia de im¨¢genes de la que fue fundador-, y la de su hija M¨¦lanie, nada de esto hubiera ocurrido: "Si mi esposa, con la complicidad de mi hija, no hubieran mostrado una voluntad y una energ¨ªa inquebrantables, no hubiera sido posible la realizaci¨®n ni de la fundaci¨®n ni del libro". Se refiere el fot¨®grafo franc¨¦s a una excelente obra editorial, publicada en Espa?a por Lunwerg, que servir¨¢ de apoyo a la presentaci¨®n de esta muestra en Caixa-Forum, Barcelona, a mediados de septiembre.

Henri Cartier-Bresson, ?de qui¨¦n se trata? es una excelente colecci¨®n de trabajos de todas sus ¨¦pocas que llena la gran galer¨ªa de la BNF, concretamente las salas del espacio Hall Est, y est¨¢ dise?ada con una perfecta puesta en sala. Hasta la fecha, todo lo que hizo, en las diferentes ¨¢reas pl¨¢sticas, se hab¨ªa ense?ado deslavazadamente; sin embargo, ahora se ha conseguido una perfecta simultaneidad de las distintas facetas creativas de su vida, posiblemente sea el elemento definitorio de la colecci¨®n y fundaci¨®n. En cierto sentido se tiene la sensaci¨®n -cuando se repasa todo este material- de estar viendo una pel¨ªcula de extra?o montaje y realizaci¨®n, pero con un congruente gui¨®n que hace, desde el cristal de lo intemporal, la visi¨®n de lo invisible en visible.

Cualquiera de estas instant¨¢neas bien podr¨ªan ser el punto de arranque de una novela (tal vez porque traigan causa de un buen texto). Por ello, se ha escrito que Cartier-Bresson siempre mantuvo una peculiar relaci¨®n con el azar, m¨¢s intensa en los momentos en los que la historia se siente vac¨ªa: as¨ª, "los ¨²ltimos momentos de China antes de Mao, los ¨²ltimos momentos de la India brit¨¢nica" (seg¨²n escribe Jean-No?l Jeanneney, presidente de la BNF, en un texto introductorio), as¨ª como los ¨²ltimos momentos de grandes personajes de la escena pol¨ªtica o literaria a quienes pudo retratar: Ghandi, Faulkner, Giacometti, Jean Genet, Ezra Pound, Jean-Paul Sartre, Ir¨¨ne y Fr¨¦d¨¦ric Joliot-Curie, Francis Bacon, Coco Chanel, Picasso...

Tras el recorrido por esta antolog¨ªa, recordamos sus palabras: "Soy un manojo de nervios que espera el momento, y esto sube, sube y estalla; es una alegr¨ªa f¨ªsica, danza, tiempo y espacio al mismo tiempo. ?S¨ª ?S¨ª! ?S¨ª! Como la conclusi¨®n del Ulises de Joyce. Ver es un todo". Todo ello es fruto de una peculiar concepci¨®n personal de una especial visi¨®n relativizadora del tiempo, propia de la filosof¨ªa zen.

Ahora, entre citas de Virgilio ("quiz¨¢ alg¨²n d¨ªa encontremos alg¨²n encanto a estos recuerdos") y Verlaine ("recuerdo, recuerdo, ?qu¨¦ quieres de m¨ª?") podemos dirigirnos a un edificio de cinco plantas, en Par¨ªs, que alberga un estallido de im¨¢genes: toda la obra pl¨¢stica de Cartier-Bresson. Esta construcci¨®n es el contrapunto de lo ef¨ªmero de una exposici¨®n. Es la herencia bella de toda una vida. S¨ªntesis de una producci¨®n que comenz¨® al final de los a?os veinte del pasado siglo, cuando el joven Henri Cartier-Bresson se integr¨® en la vida art¨ªstica de la ¨¦poca en la que particip¨® activamente (entonces se sent¨ªa atra¨ªdo por el surrealismo) y cuando conoci¨® a personajes de referencia como Max Ernst, Arag¨®n o Crevel, entre otros, desde entonces, ense?¨® a toda una generaci¨®n de fot¨®grafos contando sus vivencias en primera persona: "Hacer reportajes fotogr¨¢ficos, es decir, contar una historia en varias fotos, para m¨ª era una idea (en 1931) que nunca se me hab¨ªa ocurrido; lo fue m¨¢s tarde, observando el trabajo de mis compa?eros de oficio, estudiando las revistas ilustradas y trabajando a mi vez para ellas, cuando poco a poco aprend¨ª a hacer un reportaje".

Henri Cartier-Bresson, ?de qui¨¦n se trata? Biblioteca Nacional de Francia. Quai Fran?ois Mauriac. Par¨ªs 13 (Francia). Hasta el 27 de julio.