Jeb Bush busca tutor para un feto
El gobernador de Florida pretende obligar a una discapacitada violada a dar a luz
Nadie le hab¨ªa prestado atenci¨®n desde que naci¨®, hace 22 a?os, con un profundo retraso mental, autismo y epilepsia, pero ahora que un desaprensivo la ha violado dej¨¢ndola embarazada, hasta Jeb Bush, gobernador de Florida y hermano del presidente, se ha interesado por ella. Y ¨¦se es precisamente el problema. La intervenci¨®n de Bush pidiendo a la justicia que nombre un tutor legal para el feto ha enfurecido a los defensores del derecho al aborto, partidarios de que s¨®lo a la madre se le asigne tutor, que se encargar¨ªa de decidir si debe abortar.
La joven, cuya identidad permanece an¨®nima por decisi¨®n judicial, no tiene familia. Vivi¨® de ni?a, yendo de casa en casa de padres adoptivos, y en centros de acogida desde que era adolescente. En uno de esos centros, hace seis meses, alguien la viol¨® pero los trabajadores de los servicios sociales no se dieron cuenta hasta hace unas semanas, cuando ya su pre?ez era obvia.
Aparte del esc¨¢ndalo y del peloteo de responsabilidades que inmediatamente provoc¨® el descubrimiento, el caso abri¨® un dilema ¨¦tico-jur¨ªdico que ha caldeado el debate sobre el aborto. De un lado, Bush, cat¨®lico conservador, dice que se ha visto "moralmente obligado a interceder por una vida inocente", pero el nombramiento de un tutor para el feto forzar¨ªa a la madre a dar a luz. En esa batalla, el paso de los d¨ªas es crucial. Los abogados del Estado, en representaci¨®n de Bush, han estado usando t¨¢cticas dilatorias y ayer obtuvieron una victoria parcial al conseguir que el juez Robert Kirkwood posponga sin fecha su decisi¨®n.
Nadie ha pedido por el momento un aborto en nombre de la embarazada, pero tres influyentes grupos de derechos civiles han solicitado al juez que deniegue la petici¨®n de Bush. La Uni¨®n Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), la Organizaci¨®n Nacional de Mujeres y el Centro de Derechos para la Reproducci¨®n consideran que el gobernador est¨¢ actuando por razones pol¨ªticas, para congraciarse con la ultraderechista e influyente Coalici¨®n Cristiana. "Lo que est¨¢ haciendo Bush es una crueldad", afirma Howard Simon, director en Miami de ACLU.
La jurisprudencia est¨¢ de parte de esas organizaciones . En el ¨²nico precedente legal en Florida, el Tribunal Supremo del Estado sentenci¨® en 1989 que era "claramente inapropiado" nombrar un tutor para un feto. Precisamente el jueves un juez autoriz¨® en Miami un aborto en un caso similar, aplicando esa doctrina. La mujer, de 28 a?os, con una profunda discapacidad, fue tambi¨¦n violada en un centro de acogida. Y en 1991 los parlamentarios de Florida aprobaron una indemnizaci¨®n de ocho millones de d¨®lares a otra violada en un centro de acogida administrado por el Departamento de Ni?os y Familias.
Ese departamento tiene un historial penoso, que ha manchado las aspiraciones pol¨ªticas de Bush. Adem¨¢s de las violaciones, decenas de ni?os han desaparecido mientras estaban bajo su custodia y otros han muerto por maltrato. Paralelamente al actual proceso legal, la polic¨ªa ha abierto una investigaci¨®n sobre el departamento de servicios sociales a Familias, a ra¨ªz del caso de la joven de 22 a?os. Pero se han topado con un obst¨¢culo: la v¨ªctima no tiene capacidad para describir al violador ni puede autorizar que le haga la prueba del ADN al feto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.