Tortosa y el r¨ªo Ebro

Para completar la cr¨®nica sobre Tortosa de Arcadi Espada del d¨ªa 13 de mayo en la serie Doce ciudades, donde describe el redescubrimiento del r¨ªo por Tortosa y sus habitantes, me permito aportar algunas de las causas reales e hist¨®ricas de ese repentino descubrimiento:

1. El olvido de m¨¢s de 20 a?os de las comarcas del sur de Catalu?a por parte de los sucesivos gobiernos convergentes, tanto a nivel local como auton¨®mico. Olvido real que ha provocado que los tres sectores con posibilidades en la zona, el sector industrial, agrario y tur¨ªstico, no acaben ni de despegar ni de consolidarse.

2. La falta de inversiones significativas en infraestructuras y comunicaciones modernas y eficaces que cohesionen el territorio y ofrezcan verdaderas oportunidades atractivas de inversi¨®n.

3. La ausencia permanente en los planes de dotaci¨®n y construcci¨®n de equipamientos culturales y educativos, tanto a nivel b¨¢sico como universitario, que sirvan para potenciar y asegurar las expectativas de sus habitantes, especialmente de los m¨¢s j¨®venes.

4. El PHN, que, salt¨¢ndose todas las razones te¨®ricas y pr¨¢cticas habidas y por haber, se presenta avalado por una clase pol¨ªtica en fase de cierre que se dice defensora del territorio y de sus gentes. Ante estas razones y algunas m¨¢s, es muy l¨®gico e inevitable que Tortosa y todas las comarcas redescubran y defiendan el r¨ªo. ?Es lo ¨²nico que queda! L¨¢stima que el se?or Espada s¨®lo se haya quedado con una imagen en blanco y negro proporcionada por los Ferlosio, Bau o el admirado S. J. Arb¨® y los acontecimientos ¨²ltimos de ese "redescubrimiento".