Alarma en la banca europea

La banca europea est¨¢ batiendo todas sus marcas negativas. Las entidades alemanas viven su peor situaci¨®n desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Incluso la s¨®lida banca helv¨¦tica cosecha importantes fracasos: el Cr¨¦dit Suisse ha cerrado su peor ejercicio de los ¨²ltimos 146 a?os. Pero la situaci¨®n no es mejor en Francia, Italia u Holanda. El hundimiento de la banca de inversi¨®n y del mercado burs¨¢til, la morosidad empresarial, el estrechamiento de m¨¢rgenes y los p¨¦simos resultados de las compa?¨ªas aseguradoras se han unido en una cita fat¨ªdica.

Los analistas consideran que todav¨ªa lo peor no ha pasado. La econom¨ªa alemana est¨¢ en recesi¨®n, al igual que Holanda y Portugal. Y a esa lista negra se pueden incorporar Francia e Italia en los pr¨®ximos meses, lo que har¨ªa temblar a m¨¢s de un banquero. Una Europa estancada podr¨ªa provocar uno de los mayores horrores para los ejecutivos financieros: una bajada de los tipos de inter¨¦s para insuflar mayor dinamismo econ¨®mico, cuando esas tasas ya se encuentran al 2,5%, por debajo de la inflaci¨®n de algunos pa¨ªses como Espa?a, recortar¨ªa los m¨¢rgenes financieros hasta l¨ªmites casi insostenibles.

Con ese panorama no es de extra?ar que suenen tambores de fusiones y de compras en los mercados, pero mientras tanto los expertos analizan las razones de la crisis europea con el fin de enderezar el camino de futuro. La mayor coincidencia apunta a las grandes posiciones que tomaron algunas entidades -especialmente alemanas, holandesas y suizas- en banca de inversi¨®n, un negocio que ha sufrido como ninguno la crisis de los mercados. As¨ª, por ejemplo, el volumen de salidas a Bolsa de nuevas compa?¨ªas cay¨® un 75% en 2002. Al final del primer trimestre de 2003, el n¨²mero de colocaciones ha descendido un 61%.

?Y qu¨¦ decir de la desastrosa factura originada por los ensayos en banca por Internet? Otro agujero negro que se ha llevado por delante miles de millones de euros.

El resultado es la p¨¦rdida global de 98.100 empleos en el sector, y no s¨®lo de empleados de base, sino que esta vez se ha llevado por delante a una lista de cinco importantes presidentes de otras tantas importantes entidades.