?Viva el 'Daily Mail'!

Mientras peri¨®dicos brit¨¢nicos sensacionalistas como The Daily Mail y The Sun despotrican contra la propuesta de Constituci¨®n europea como si la hubiera redactado Napole¨®n y la hubiera ilustrado Adolf Hitler; mientras el nuevo laborismo de Tony Blair empieza a desgarrarse en luchas internas por Europa como les sucedi¨® a los viejos conservadores bajo el Gobierno de Margaret Thatcher; mientras gran parte de la naci¨®n pol¨ªtica se permite una nueva org¨ªa de pol¨¦micas ideol¨®gicas, mezquinas, mal informadas y todo lo contrario de brit¨¢nicas (por antipragm¨¢ticas y antiemp¨ªricas) sobre ese fantasma que llamamos "Europa"; en definitiva, mientras Gran Breta?a sigue tirando piedras contra su propio tejado, la verdadera Europa sigue adelante.

Para los socialistas espa?oles, federalismo significa cesi¨®n y descentralizaci¨®n. Para el 'Daily Mail', un centralismo napole¨®nico con sede en Bruselas

Tanto el proamericanismo como el gaullismo constitucional de Aznar levantaron pol¨¦micas. Durante la guerra contaba con el respaldo de menos del 20%

La verdadera Europa que se ve, por ejemplo, en Espa?a, una potencia europea din¨¢mica y cada vez m¨¢s segura de s¨ª misma. Es un pa¨ªs que va a llegar lejos

La verdadera Europa que se ve, por ejemplo, en Espa?a, una potencia europea din¨¢mica y cada vez m¨¢s segura de s¨ª misma. ?ste s¨ª que es un pa¨ªs que va a llegar lejos. D¨®nde, exactamente, es materia de controversia pol¨ªtica interna, sobre todo en v¨ªsperas de las importantes elecciones auton¨®micas y municipales que se celebran hoy. Pero la direcci¨®n general hacia la que avanza Espa?a es, en su mayor parte, totalmente compatible con lo que a la mayor¨ªa de los brit¨¢nicos les gustar¨ªa para Europa. El problema es que somos demasiado ignorantes y estamos demasiado mal informados por nuestra propia prensa para verlo.

No es que la ignorancia sobre los mecanismos de la UE sea exclusiva de Gran Breta?a. En un reciente sondeo realizado por el Real Instituto Elcano, el nuevo y activo gabinete madrile?o especializado en pol¨ªtica exterior, s¨®lo el 1% de una muestra representativa de espa?oles pensaba que el prop¨®sito de la Convenci¨®n sobre el Futuro de Europa, dirigida por Val¨¦ry Giscard d'Estaing, fuera redactar una Constituci¨®n europea. El 90% de los interrogados no hab¨ªan o¨ªdo hablar de la Convenci¨®n en absoluto. No s¨¦ qu¨¦ es peor: estar vagamente a favor de la UE pero saber muy poco sobre ella, que parece ser la situaci¨®n de la mayor¨ªa de los espa?oles, o estar vagamente en contra porque lo poco que se sabe son mentiras, que es el caso de la mayor¨ªa de los brit¨¢nicos. Ser¨ªa interesante saber en cu¨¢l de los dos lados se encuentran los m¨¢s de 100.000 brit¨¢nicos que viven en Espa?a: partidarios espa?oles ignorantes o detractores brit¨¢nicos desinformados.

Como no ha dejado de advertir The Daily Mail, Espa?a celebrar¨¢ un refer¨¦ndum sobre el tratado constitucional cuando el documento consiga salir de las fauces de la conferencia intergubernamental, la pr¨®xima primavera. Porque una de las cosas que The Daily Mail no tiene ninguna prisa en decir a sus lectores es que el texto definitivo del tratado constitucional elaborado por la Convenci¨®n contar¨¢ con las modificaciones de 25 Gobiernos nacionales, cada uno con derecho a veto, y despu¨¦s tendr¨¢ que ser ratificado por 25 naciones democr¨¢ticas, despu¨¦s de la ampliaci¨®n de la Uni¨®n Europea, el 1 de mayo de 2004. El refer¨¦ndum espa?ol, que es s¨®lo consultivo, se convocar¨¢ de forma que coincida con las elecciones europeas de junio del pr¨®ximo a?o, pero existen pocas dudas de que ganar¨¢ el s¨ª. Los principales partidos aconsejar¨¢n a los ciudadanos que voten en ese sentido, cosa que la mayor¨ªa de ellos iban a hacer de todas formas, aunque tengan escasa idea de lo que dice la Constituci¨®n.

La visi¨®n de Aznar

Ahora bien, entre el 1% de los espa?oles que s¨ª saben lo que es la Convenci¨®n existen algunas ideas penetrantes. El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, tiene una visi¨®n europea que, en muchos aspectos, es parecida a la de Tony Blair. Como me explic¨® en una larga conversaci¨®n mantenida esta semana, est¨¢ convencido de que Europa no debe definirse en oposici¨®n a Estados Unidos. Una buena relaci¨®n transatl¨¢ntica es crucial para nuestra seguridad, sobre todo frente a la amenaza terrorista que la semana pasada golpe¨® al lado mismo de Espa?a, en Marruecos. En este sentido, su visi¨®n, como la de Blair, es diametralmente opuesta al gaullismo de Chirac, que concibe una Europa dirigida por Francia, con estrechos lazos que la unan a Rusia y una relaci¨®n m¨¢s distante con EE UU. En otros aspectos, por el contrario, Aznar es una especie de gaullista, como tambi¨¦n lo es Blair. Cree firmemente que Europa, antes y despu¨¦s de la nueva Constituci¨®n, estar¨¢ formada por naciones-estado: la Europe des patries o des ¨¦tats, que dec¨ªa De Gaulle.

Tanto el proamericanismo como el gaullismo constitucional de Aznar levantan pol¨¦micas en Espa?a. Durante la guerra de Irak, contaba con el respaldo de menos del 20% de la opini¨®n p¨²blica. La mayor¨ªa de los espa?oles, todav¨ªa profundamente marcados por los recuerdos de la Guerra Civil, no quer¨ªan que sus tropas fueran a luchar a ninguna parte. Para labores de pacificaci¨®n, s¨ª, pero para luchar, no. Desde luego, no quer¨ªan que fueran a luchar al lado de Bush y Estados Unidos, un pa¨ªs al que parte de la derecha espa?ola no perdona a¨²n del todo que privara a Espa?a de los ¨²ltimos restos de su imperio, hace un siglo, y gran parte de la izquierda no perdona todav¨ªa su apoyo t¨¢cito a Franco. Aznar desea cambiar estas actitudes tan arraigadas entre los espa?oles respecto a EE UU y el uso de la mano dura, que considera esencial en un mundo redefinido por la "guerra contra el terrorismo". Durante la guerra, sus modelos fueron Churchill y Lincoln. (?Hubo alg¨²n dirigente pol¨ªtico, en el bando de los partidarios de la guerra, que no se inspirara en Churchill?).

Para los socialistas espa?oles, la vuelta a la democracia tras la dictadura de Franco y el regreso a Europa fueron dos caras de la misma moneda. Por tanto, estar en contra de que siga avanzando la integraci¨®n europea es estar contra la democracia. La izquierda, en general, es federalista. Pero el federalismo, para ellos, significa proponer, frente a la idea constitucionalmente gaullista que tiene Aznar de una naci¨®n-estado espa?ola fuerte y unida, la visi¨®n de una Espa?a federal muy descentralizada, una "naci¨®n de naciones", con enorme autonom¨ªa para las regiones hist¨®ricas como Catalu?a y un Pa¨ªs Vasco asolado por el terrorismo. El federalismo europeo ser¨ªa el marco en el que m¨¢s c¨®modamente podr¨ªa funcionar el federalismo espa?ol. En otras palabras, su federalismo es exactamente lo contrario de la pesadilla que relata The Daily Mail cuando habla del tema. Para ellos significa cesi¨®n y descentralizaci¨®n; para The Daily Mail, un centralismo napole¨®nico en un superestado con sede en Bruselas.

Estas dos concepciones espa?olas de Europa, la atlantista-gaullista de Aznar y la federalista de los socialistas, son muy diferentes. Pero ambas creen que Espa?a es un factor positivo para Europa y Europa para Espa?a. Ambas son compatibles con un pro-europe¨ªsmo brit¨¢nico de centro-derecha y centro-izquierda, respectivamente. Y la lista de compatibilidades hispanobrit¨¢nicas puede prolongarse. Espa?a desea una identidad europea m¨¢s fuerte en materia de defensa, sobre todo para las misiones de mantenimiento de la paz en los crispados bordes del continente, pero quiere que est¨¦ estrechamente coordinada con la alianza transatl¨¢ntica. Exactamente la posici¨®n brit¨¢nica. Espa?a desea una econom¨ªa europea m¨¢s s¨®lida, y considera que la clave est¨¢ en las reformas econ¨®micas liberalizadoras. Exactamente la posici¨®n brit¨¢nica.

Gibraltar, una mina

Por supuesto, tambi¨¦n hay diferencias. Gibraltar es una mina constantemente a punto de estallar en las relaciones estre Gran Breta?a y Espa?a. Me han advertido que es posible que la cuesti¨®n vuelva a saltar cuando se hable de definir las fronteras externas de la UE en el nuevo tratado constitucional. Adem¨¢s, tradicionalmente, Espa?a ha estado siempre mucho m¨¢s interesada en las grandes d¨¢divas de Bruselas, a trav¨¦s de los fondos de cohesi¨®n y estructurales y la Pol¨ªtica Agraria Com¨²n. Sin embargo, a medida que vaya enriqueci¨¦ndose, esa diferencia disminuir¨¢. El PIB per c¨¢pita de Espa?a es ya el 86% de la media de EE UU el mes de mayo; cuando la UE reciba a 10 pa¨ªses en general m¨¢s pobres, pasar¨¢ a ser el 90%. Las empresas espa?olas ya realizan inversiones importantes en el extranjero.

Sentado bajo el glorioso sol de Madrid, mientras reflexionaba sobre esta colaboraci¨®n no consumada entre un pa¨ªs soleado que sabe lo que quiere en Europa, pero no tiene poder suficiente para conseguirlo, y un pa¨ªs nuboso que tiene dicho poder, pero no sabe lo que quiere, la soluci¨®n se me ocurri¨® de repente. Uno de los din¨¢micos grupos medi¨¢ticos espa?oles deber¨ªa comprar The Daily Mail. De esa forma, Espa?a tendr¨ªa un inter¨¦s directo m¨¢s importante en Gran Breta?a, y los lectores brit¨¢nicos quiz¨¢ empezar¨ªan a enterarse de lo que ocurre de verdad en Europa.

Traducci¨®n de M. L. Rodr¨ªguez Tapia