IU insiste en dar por buenos unos datos irregulares

La clave es Catalu?a. Si se cuentan los votos del pacto IU-ICV, como pretende la direcci¨®n, la federaci¨®n sube. Si no, se queda como estaba. Eso, pese a las movilizaciones contra la guerra, es considerado como un ¨¦xito por una direcci¨®n que hace unos meses tem¨ªa seguir bajando, como ven¨ªa haciendo desde 1999. IU gobernar¨¢ en Madrid y Asturias, pero pierde Baleares. Tambi¨¦n podr¨¢ estar en Sevilla, Guadalajara y Segovia, pero pierde Granada, Burgos y Almer¨ªa.

Los an¨¢lisis ayer en Izquierda Unida, a la espera de la reuni¨®n de la Presidencia de hoy, depend¨ªan de la referencia. Si se toman las ¨²ltimas elecciones, las generales de 2000, la federaci¨®n ha subido casi un punto en apoyo. Si se cuentan las de 1999, y excluyendo el dato de Catalu?a, que distorsiona la comparaci¨®n porque es indivisible, la repetici¨®n de resultados era m¨¢s o menos lo esperado.

Lo que ha fallado en los c¨¢lculos es que se auguraba una ca¨ªda mayor del PP, que permitiera gobernar a la coalici¨®n PSOE-IU en multitud de capitales de provincia. No ha sido as¨ª. Tambi¨¦n en las capitales de provincia los resultados son dif¨ªciles de interpretar, porque hay una de cal y otra de arena.

IU entrar¨¢ con toda probabilidad en el Gobierno de una ciudad clave, como Sevilla -aunque han perdido un concejal-, y otras dos capitales de menor importancia electoral, como Guadalajara o Segovia. Pero no entrar¨¢n en el Ayuntamiento de Zaragoza, como esperaban, desaparecen en Murcia y bajan en M¨¢laga, adem¨¢s de perder el poder que ten¨ªan con los socialistas en Granada, Burgos y Almer¨ªa.

En ciudades que no son capitales de provincia, pero tienen importancia para los partidos, la situaci¨®n tambi¨¦n es de empate. Se pierden M¨®stoles y Alcal¨¢ de Henares, pero la p¨¦rdida de votos del PSOE en Gij¨®n y Avil¨¦s, por ejemplo, les forzar¨¢ a gobernar en coalici¨®n con IU. Precisamente el resultado de Asturias, por inesperado, puede marcar la parte positiva de las elecciones.

Todas las encuestas apostaban por una mayor¨ªa absoluta del socialista Vicente ?lvarez Areces en esta comunidad. No ha sido as¨ª, y necesitar¨¢ a la federaci¨®n de izquierdas para gobernar. De esta forma, y gracias a un crecimiento de tres puntos y un diputado, IU llega al poder en una de las pocas comunidades donde conserva una s¨®lida implantaci¨®n. Es, adem¨¢s, la federaci¨®n de la que proviene su l¨ªder, Gaspar Llamazares.

Los resultados m¨¢s espectaculares se dan en el Pa¨ªs Vasco. All¨ª ya est¨¢ en el Gobierno con el PNV. Ahora puede repetir ese pacto en el Ayuntamiento de Bilbao, donde entrar¨ªa en el gobierno Julia Madrazo, hermana de Javier, el coordinador general. La federaci¨®n sube en las tres capitales de provincia, donde se reparte, junto a los nacionalistas, parte del voto de la ilegalizada Batasuna.

Hay dos pinchazos muy significativos, no tanto por sus dimensiones como por su significado. En Baleares, modelo de la izquierda plural que Gaspar Llamazares defiende para arrebatar el poder al PP, la derecha se ha recuperado. Izquierda Unida ha perdido medio punto de apoyos, ganando muy poco voto, y ha tenido buenos resultados en las elecciones municipales, pero se queda sin la joya de la corona: su Consejer¨ªa de Empleo, utilizada por Eberhard Grosske como laboratorio y ejemplo de lo que se puede hacer desde la izquierda para reducir la siniestralidad laboral.

El otro, tal vez el m¨¢s doloroso y el que era m¨¢s comentado ayer por los dirigentes m¨¢s cr¨ªticos, que se preparaban para la reuni¨®n de hoy, era el de la capital. Nadie pensaba que fuera f¨¢cil recuperar esta ciudad para la izquierda. Pero la candidatura de In¨¦s Saban¨¦s, especialmente despu¨¦s de los debates a tres bandas durante la campa?a, se daba por buena, y ha perdido un punto y medio y un concejal. ?se es el mismo resultado en general en todas las elecciones municipales en la Comunidad de Madrid.

En las auton¨®micas, sin embargo, Fausto Fern¨¢ndez ha aguantado las crisis vividas en esta federaci¨®n y repite los resultados de ?ngel P¨¦rez pero con muchos m¨¢s votos, gracias a la alta participaci¨®n. Adem¨¢s, se lleva el importante caramelo de entrar en el Gobierno de una Comunidad simb¨®lica para la izquierda.

Las mayores bajadas se dan en los lugares donde siempre tuvo poca representaci¨®n, y en Murcia. Dram¨¢tica es la ca¨ªda en Castilla y Le¨®n, con casi dos puntos menos.