Los grandes l¨ªderes de la izquierda de Latinoam¨¦rica dan su respaldo a Kirchner

Fidel Castro (Cuba), Luiz In¨¢zio Lula da Silva (Brasil), Hugo Ch¨¢vez (Venezuela), Lucio Guti¨¦rrez (Ecuador), Ricardo Lagos (Chile) y el argentino N¨¦stor Kirchner como anfitri¨®n. Buenos Aires fue este fin de semana la capital de la izquierda latinoamericana o lo que queda de ella. La investidura del nuevo presidente argentino congreg¨® a los l¨ªderes del continente con una visi¨®n m¨¢s cr¨ªtica hacia Estados Unidos y al modelo de desarrollo que imper¨® en la regi¨®n durante la ¨²ltima d¨¦cada. En su primer discurso como presidente, Kirchner logr¨® despertar nuevas expectativas.

En p¨²blico y en las reuniones bilaterales, todos ellos han prodigado cr¨ªticas al llamado neoliberalismo y han defendido la necesidad de estrechar los lazos de los pa¨ªses latinoamericanos. Lula da Silva lo expres¨® gr¨¢ficamente cuando dijo antes de partir que quiere construir con Argentina "un eje del bien". El presidente brasile?o asegur¨® que los dos pa¨ªses viven el mejor momento de sus relaciones, y que el v¨ªnculo entre ambos ser¨¢ clave para la regi¨®n.

El primer viaje al exterior que realizar¨¢ Kirchner ser¨¢ a Brasilia, seg¨²n confirmaron fuentes de la Canciller¨ªa argentina, para celebrar la primera reuni¨®n bilateral entre los dos principales pa¨ªses del Mercosur. Los dos presidentes quieren lograr una posici¨®n com¨²n en el seno del bloque suramericano ante las futuras negociaciones con EE UU sobre el ?rea de Libre Comercio para las Am¨¦ricas (ALCA) y con la UE. A finales de junio, los jefes de Estado de los cuatro pa¨ªses del Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay) m¨¢s el de Chile se reunir¨¢n en Brasil para adoptar las primeras medidas concretas, referidas a un plan de infraestructuras para el continente que cuenta con el aval del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). La Canciller¨ªa argentina tambi¨¦n prepara un viaje del presidente a Washington dentro de los pr¨®ximos 90 d¨ªas para entrevistarse con George W. Bush.

La sonora ovaci¨®n que dispensaron los congresistas a Castro, Ch¨¢vez y Lula no ha pasado inadvertida en los medios informativos argentinos. Los dos primeros se han paseado ostensiblemente por Buenos Aires y han reiterado su respaldo al nuevo presidente argentino, en lo que han presentado como el inicio de una nueva ¨¦poca para Latinoam¨¦rica. "Juntos venceremos", dijo el l¨ªder cubano, que tambi¨¦n recibi¨® de manos de algunos legisladores una condena por escrito por los recientes fusilamientos de opositores en la isla caribe?a.

El primer discurso de Kirchner como presidente ha despertado nuevas expectativas entre los argentinos, desesperanzados y profundamente esc¨¦pticos de la pol¨ªtica. Desde las filas de la oposici¨®n, sus palabras fueron bien valoradas, los empresarios y banqueros se muestran cautos y dicen sentirse optimistas. Alfonso Cortina, presidente de Repsol, fue uno de los pocos directivos extranjeros que viajaron a Buenos Aires para el traspaso de mando. Ayer reafirm¨® la voluntad de la empresa que dirige de mantener sus fuertes v¨ªnculos con Argentina.

El nuevo presidente fue firme, concreto, y toc¨® la fibra de muchos de sus conciudadanos, sin caer en la demagogia f¨¢cil y el populismo. De momento ha presentado una larga lista de buenos prop¨®sitos que tendr¨¢ que acompa?ar con hechos. Tiene seis meses por delante, hasta la culminaci¨®n del proceso electoral que comienza ahora en las provincias y termina en octubre con la renovaci¨®n del Congreso. Sus medidas de gobierno ser¨¢n su mejor campa?a para lograr convertir el 22% de votos que consigui¨® en la primera y ¨²nica vuelta en el 70% que le otorgaban las encuestas con vistas al segundo turno.

El presidente saliente, Eduardo Duhalde, tuvo un gran protagonismo hasta la jura de Kirchner. Le traspas¨® la banda presidencial, le entreg¨® el bast¨®n de mando y desapareci¨® discretamente. Por la tarde viaj¨® a Brasil en el avi¨®n del presidente Lula da Silva. Como final de fiesta el ya ex presidente moviliz¨® a su gente que acudi¨® a la plaza de Mayo a recibir al nuevo mandatario.