Rojo,... ?o crema?
Hay quien, en un pis-pas, convierte la pol¨ªtica y la cosa p¨²blica en nada, en cosa de Zipi y Zape o de Mortadelo y Filem¨®n (sin perd¨®n). O, tambi¨¦n, que rememora con provecho los Grandes inventos de TBO (a mayor gloria de Johannes Braader, el gur¨² del dada¨ªsmo alem¨¢n).
Recuerdo a un tal Hern¨¢ndez Mancha, por poner un caso, que, vestido con traje blanco de algod¨®n neocolonial (sombrero incluido), era capaz de decir cinco nader¨ªas en medio minuto sin pesta?ear.
O a otros m¨¢s recientes, que los hay. Pongamos, Juan Jos¨¦ Ibarretxe (blanco ¨²ltimamente, y bien que lo siente uno, de todos los dardos contra la trivialidad, o ?el cinismo?). ?l es maestro en esto. Dele usted una Lehendakaritza, una televisi¨®n, tres probetas y un electorado desconcertado, y har¨¢ una Propuesta-humo capaz de tener apariencia de elefante constituyente. (Me han dicho que Javier P¨¦rez, la estrella ahora del Artium, tiene "obras de humo". Bendito sea ¨¦l que s¨®lo es capaz de enga?ar a los cr¨ªticos de arte... Y no pretendo decir que lo haga. Tan s¨®lo, que "s¨®lo puede".) Nada de eso hay, claro est¨¢. No hay elefante ni constituyente salvo en la vi?eta de TBO-Ajuria Enea. Pero cuela.
En este pugilato por la historieta como sustituto de la historia ha entrado con fuerza y recientemente Javier Rojo. Uno vive en el pa¨ªs, y lo que en ¨¦l se cueza, le va. (A ver si no...) Dicen que digo que dijo, que para Diputado General, ¨¦l. Yo no lo dije (es broma, claro); pero lo dem¨¢s es cierto. "Me toca", dicen que dijo. ?Me toca?, ?como dicen que dice un chaval en un juego de chapas? S¨ª. As¨ª de simple, sin otros matices.
Resulta propio de Zipi y Zape. O, tambi¨¦n, volviendo el histrionismo c¨ªnico del dad¨¢, a aquello de "alrededor de una bola de fuego gira fren¨¦ticamente una bala de mierda sobre la cual se venden medias de se?ora..." etc¨¦tera. ?sta ser¨ªa la venta del pirul¨ª.
Votos en ?lava: 35.733 para el Partido Socialista de Euskadi-Euskadiko Ezkerra y 47.339 para el Partido Popular; total, 83.000 a favor de una propuesta por mantener y jugar con el Estatuto -(pocos a pesar de lo razonable de la idea; pero otra cosa es analizar el por qu¨¦, ahora no toca)-. ?Habr¨ªa que sumar los seis mil de Unidad Alavesa? Frente a ello, 59.060 para el Partido Nacionalista Vasco (para la Propuesta-humo).
En fin d¨ªganme ustedes. Javier Rojo, con 35.000 votos, dice que "le toca" ser Diputado General. Ram¨®n Rabanera debe haber hecho sus c¨¢lculos (47.000 votos; un 34% m¨¢s). ?Le toca? No es cosa de hablar de Barakaldo, Santurce y Portugalete, de Andoain, Renter¨ªa o Ir¨²n, donde el socialismo gobernar¨¢ con los votos del Partido Popular. No. Lo grave es lo que viene a mostrar.
El Pa¨ªs Vasco es territorio aut¨®nomo (me refiero a su din¨¢mica pol¨ªtica). Eso s¨ª lo ha logrado ETA. El juego pol¨ªtico es a¨²n aqu¨ª ?prepol¨ªtico? (Seguimos con las paradojas.) Se busca la libertad como se busca agua en el desierto. Un Javier Rojo diciendo que "le toca", apoyado por su partido, incluido su secretario general Rodr¨ªguez Zapatero, viene a mostrar lo bajo que volamos en pol¨ªtica por estos pagos.
Lo l¨®gico -esto s¨ª- es que, tras hacer toda su campa?a diciendo que "frenar¨¢-el-plan-Ibarretxe", Rojo promoviera en ?lava -y no se apeara de ello- un gobierno de coalici¨®n PP-PSE. Es lo l¨®gico. Lo l¨®gico es que se pusieran a negociar sobre esa base.
Uno cre¨ªa excesivas las invectivas de Jon Juaristi sobre cierta izquierda incapaz de sentarse con el Partido Popular para hablar de eso precisamente, de recuperar la libertad. Pero un Partido Socialista de Euskadi que ha estado a?os gobernando con la derecha del pa¨ªs, con el Partido Nacionalista Vasco; mirando para otro lado cuando ha sido necesario, ?le har¨¢ ascos a un gobierno PP-PSE para la Diputaci¨®n alavesa? La historieta -si fuera as¨ª- habr¨ªa sustituido a la historia en bien del cinismo.
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