Trasvase sin CiU

El Gobierno ha decidido sacar a informaci¨®n p¨²blica el informe sobre el impacto ambiental del trasvase del Ebro sin contar con el benepl¨¢cito de CiU, su principal aliado en la aprobaci¨®n del Plan Hidrol¨®gico Nacional. A la hora de iniciar la ejecuci¨®n del plan, el Gobierno ha querido imponer su criterio, sin importarle la opini¨®n de quien, en su d¨ªa, le ayud¨® a dar a su pol¨¦mica iniciativa una base parlamentaria con que enmascarar la imposici¨®n de la mayor¨ªa absoluta o "el paseo militar" que anunci¨® el ministro Arias Ca?ete a un grupo de agricultores murcianos.

La defensa del delta del Ebro constituye el obst¨¢culo que dificulta el entendimento de dos antiguos aliados en la puesta en pr¨¢ctica del plan que ha de llevar 1.050 hect¨®metros c¨²bicos de agua de ese r¨ªo a las zonas secas del Levante espa?ol, incluidos 190 hect¨®metros c¨²bicos para las necesidades del ¨¢rea metropolitana de Barcelona. CiU considera que sacar a informaci¨®n p¨²blica el informe sobre el impacto ambiental del trasvase sin decidir antes el caudal ecol¨®gico del Ebro, necesario para garantizar la protecci¨®n de su delta, rompe el inicial consenso y supone "empezar la casa por la ventana". Y en esto se acerca a los puntos de vista del PSOE, mucho m¨¢s radicales, no s¨®lo por la forma en que fue aprobado el Plan Hidrol¨®gico en el Parlamento, con rechazo total de las 400 emmiendas presentadas por los grupos de la oposici¨®n, sino por considerarlo " un plan insostenible en su dise?o y en su tramitaci¨®n". Los socialistas tambi¨¦n consideran que la previa definici¨®n del caudal ecol¨®gico del Ebro no es una cuesti¨®n balad¨ª: condiciona la viabilidad del trasvase. Si, como defiende CiU, ese caudal m¨ªnimo debe alcanzar los 135 metros c¨²bicos por segundo para garantizar la protecci¨®n del delta, en lugar de los 100 inicialmente previstos en el Plan Hidrol¨®gico, el trasvase podr¨ªa verse seriamente afectado no s¨®lo en la cantidad de agua trasvasable, sino en el coste de las infraestructuras.

El caso es que el Gobierno ha decidido seguir adelante dejando de momento en la retaguardia la aprobaci¨®n del Plan Integral de Protecci¨®n del Delta del Ebro, una cuesti¨®n que en principio deber¨ªa haber quedado resuelta antes de sacar a informaci¨®n p¨²blica el informe del impacto ambiental de los 914 kil¨®metros de conducciones -incluidos t¨²neles, acueductos y embalses- que se necesitar¨¢n para llevar el agua trasvasada a sus diversos puntos de destino entre Barcelona y Almer¨ªa. Pero con esa actitud el Gobierno no hace sino quedarse un poco m¨¢s solo en un asunto que habr¨ªa necesitado el mayor consenso en el momento de su aprobaci¨®n parlamentaria y que lo necesitar¨ªa a¨²n m¨¢s durante el largo y complicado proceso de su ejecuci¨®n. El aplazamiento de la aprobaci¨®n del Plan Integral de Proteccion del Delta por falta de acuerdo con el Gobierno de la Generalitat en la determinaci¨®n del caudal ecol¨®gico del Ebro alimentar¨¢ un nuevo foco de oposici¨®n al trasvase en Catalu?a. No es lo m¨¢s grave para el Gobierno. Lo ser¨¢ que esa situaci¨®n pueda da?ar la viabilidad y credibilidad del trasvase a los ojos de Bruselas y dificulte su deseada financiaci¨®n con fondos europeos.