"Lo que ense?o es la aventura del silencio"

Pregunta. Dicen que todo lo que calla en escena lo compensa luego hablando por los codos.

Respuesta. Mi respuesta es: s¨ª.

P. ?C¨®mo sigue BIP, su personaje emblem¨¢tico?

R. Ha evolucionado, pero sigue siendo una met¨¢fora. Es como una especie de Don Quijote que lucha contra los molinos de viento de la vida.

P. Los japoneses le declararon "tesoro nacional viviente". ?Es usted como las pir¨¢mides de Egipto o como el Parten¨®n?

R. Yo soy un ser humano. Tengo carne y sangre. No soy un monumento. Y, adem¨¢s, soy mortal.

P. Dice ser el franc¨¦s m¨¢s conocido en el mundo, junto con el comandante Cousteau. ?Y Napole¨®n?

R. ?l era ante todo un militar, y no ten¨ªa nada que ver conmigo. Yo estoy mucho m¨¢s cerca de Cousteau.Habl¨¢bamos de los silencios del mar, y vino a verme expresar el silencio con el cuerpo.

P. ?Hay algo que se diga mejor con gestos que con palabras?

R. S¨ª. La palabra es necesaria tambi¨¦n, porque crea la comprensi¨®n. Al principio me preguntaban si era bailar¨ªn, y cuando dec¨ªa que hac¨ªa mimo con mi cuerpo no sab¨ªan qu¨¦ era eso. Hoy el p¨²blico entiende muy bien el silencio, y se integra en ¨¦l como en la m¨²sica o en la palabra.

P. ?Mira a los dem¨¢s, m¨¢s que escucharles?

R. Si no observara la vida, no conocer¨ªa al ser humano. Y lo que ense?o es la aventura del silencio. Las personas que no nos han visto nunca tienen miedo del silencio.

P. ?Cu¨¢nto dicen de alguien sus gestos?

R. Depende del talante de quien los haga. Es como preguntar por qu¨¦ llega a la gente un cantante. No es la voz o el sonido lo que llega. Es el m¨²sico.

P. ?Se entiende con los sordomudos?

R. S¨ª, y vienen muy a menudo. En Barcelona tuvimos cuarenta j¨®venes. Nos dijeron que igual no entend¨ªan nada y se pon¨ªan a gritar. Pero estaban hipnotizados.

P. ?Se puede mentir mediante el mimo?

R. No. Se muestra la verdad.

P. "Como Cocteau, pienso que hace falta mucho tiempo para aprender a ser joven". ?Lo ha conseguido?

R. Es exactamente mi caso. Me siento joven todav¨ªa, a pesar de todas las miserias del mundo. Incluso mientras uno envejece puede conservar su alma de ni?o.

P. ?Charles Chaplin, Buster Keaton y usted?

R. La prensa americana ha escrito que Marceau es al teatro lo que Chaplin al cine. El resto, la historia lo dir¨¢.

P. ?Con el silencio se dicen menos tonter¨ªas?

R. Se dicen s¨®lo las esenciales.

P. Afirma que en la elecci¨®n del silencio quiz¨¢ tuvieron que ver sus or¨ªgenes jud¨ªos.

R. S¨ª. Pero sea jud¨ªo o cristiano, yo soy un ser humano.

P. Su padre no volvi¨® de Auschwitz. ?Qu¨¦ recuerda de ¨¦l?

R. Una vez en Alemania me dijeron: su padre muri¨® en Auschwitz. Contest¨¦: Murieron seis millones. ?Comprende? No me refiero s¨®lo a mi sufrimiento, sino al sufrimiento de la Humanidad.

P. Cuando hizo Don Juan, de Tirso de Molina, se arruin¨®. ?Todo donju¨¢n es una ruina?

R. Me arruin¨¦ porque emple¨¦ 75 m¨²sicos. Por lo dem¨¢s, recuerde el final, cuando la estatua de piedra del Comendador le dice a Don Juan, que hab¨ªa seducido a 2.000 mujeres, que le d¨¦ la mano. La estatua, gran s¨ªmbolo, permanece, pero Don Juan muere.

P. "El artista tiene que ser pol¨ªtico".

R. Pol¨ªtico a la griega, interesado por la ciudad. Para m¨ª la pol¨ªtica no es un partido, sino una forma de revelaci¨®n de la vida social, de la miseria, de la riqueza, la felicidad, la tristeza.

P. ?Qu¨¦ es m¨¢s peligroso: el fanatismo o el integrismo?

R. El fanatismo. Uno tiene derecho a ser integrista, a creer profundamente en sus ideas. Pero el fanatismo es peligroso, porque elimina al disidente.

P. ?A qui¨¦n revelar¨¢ sus secretos?

R. Los ense?o a trav¨¦s de mi arte. Porque la familia es la familia, los ni?os crecen, y todos ellos son mortales. Pero un arte no debe serlo. Debe estar vivo.

P. ?Se ve dedic¨¢ndose a otra cosa?

R. No. He utilizado siempre mi cuerpo, con la esgrima, y mi cabeza, con el ajedrez. Y luego, la pintura y el arte del mimo.

P. ?C¨®mo le gustar¨ªa despedirse, cuando le toque?

R. En ese momento, morir¨¦ de pie. Como en el teatro. No caer¨¦.