La escasa presencia acad¨¦mica de otras creencias

Hasta ahora, en los impresos de preinscripci¨®n de la Generalitat de Catalu?a que tienen que rellenar los padres que se denomina "datos escolares del alumno", adem¨¢s del nombre del centro, el plan de estudios y el curso, se obligaba a los progenitores a elegir entre religi¨®n o ense?anzas alternativas. Si optaban por la primera, deb¨ªan entonces escoger entre cat¨®lica, jud¨ªa, evang¨¦lica o isl¨¢mica, pero en la pr¨¢ctica no todas estas posibilidades se traduc¨ªan en clases.

Seg¨²n una documentaci¨®n enviada por el departamento de Ense?anza catal¨¢n al Ministerio de Educaci¨®n, en el curso 2001-02 hubieron 63 solicitudes de clases de religi¨®n isl¨¢mica, pero, de momento, esta asignatura no se imparte en ning¨²n centro catal¨¢n, a pesar de ser de obligatorio ofrecimiento en caso de que lo soliciten m¨¢s de 10 alumnos, como es el caso de la escuela Rub¨¦n Dar¨ªo de Barcelona, donde ha sido solicitada por 30 alumnos. Un portavoz de la asociaci¨®n Ibn Batuta recuerda que en enero de 2002 se lleg¨® a un acuerdo entre la Fundaci¨®n Hassan II y Ense?anza para que 15 profesores marroqu¨ªes impartieran clases de lengua y cultura ¨¢rabe, lo que llevar¨ªa a que "m¨¢s de 1.000 alumnos s¨®lo en Barcelona" se matricularan en esta asignatura.

Clases evang¨¦licas

Otro de los datos de Ense?anza es que en ese mismo curso 212 alumnos solicitaron clases de religi¨®n evang¨¦lica, que en este caso s¨ª se imparte. Rafael Arenc¨®n, profesor de esta asignatura en seis centros de la provincia de Tarragona, explica que "los ni?os no est¨¢n muy interesados al principio, pero poco a poco se van implicando m¨¢s y hacen m¨¢s preguntas". Con una gran mayor¨ªa de estudiantes de etnia gitana, en sus clases "los chicos aprenden a cuestionarse desde lo espiritual lo que les dicta la sociedad y a tener un apoyo moral en sus decisiones", se?ala Arenc¨®n. Seg¨²n la documentaci¨®n de Ense?anza, en el curso 2001-02 no hubo ninguna solicitud de clases de religi¨®n jud¨ªa.