El encierro de 50 j¨®venes en M¨¢laga impide el desalojo de un centro social
El Ayuntamiento incumpli¨® el compromiso de adquirir el local
El encierro indefinido de unos 50 j¨®venes en un centro social de M¨¢laga y la concentraci¨®n en su apoyo de m¨¢s de un centenar de manifestantes frenaron ayer el desalojo del inmueble, que qued¨® aplazado sin fecha. El edificio, de propiedad privada, fue ocupado hace cinco a?os por una treintena de colectivos. El Ayuntamiento ha incumplido un acuerdo de 1999 para adquirir el inmueble para ceder su uso.
Tras esperar m¨¢s de dos a?os sin que se ejecutara el acuerdo, la propiedad acudi¨® a la v¨ªa judicial para que autorizara el desalojo. Ayer, era el d¨ªa previsto para el desahucio. Pero la calle Postigo de Arance, donde est¨¢ la Casa de Iniciativas, qued¨® taponada por j¨®venes y pol¨ªticos. "Nuestra dignidad contra su fuerza", rezaba una gran pancarta que los encerrados colgaron sobre la fachada.
A la concentraci¨®n acudieron cargos p¨²blicos de PSOE e IU. La edil socialista en funciones, Mar¨ªa del Carmen S¨¢nchez, arremeti¨® contra el consistorio por haber hecho "dejadez absoluta" de su compromiso y lo atribuy¨® a que los colectivos que ocupan el inmueble "no son d¨®ciles". El parlamentario de IU, Antonio Romero, tambi¨¦n atac¨® al PP: "Est¨¢ cometiendo un crimen urban¨ªstico con el centro. Hay que rehabilitarlo con viviendas y centros sociales; no se puede meter la pala para hacer viviendas de lujo".
El abogado de la propiedad, Miguel ?ngel Cubero, fue claro: "No descalificamos al movimiento okupa, pero si estos colectivos tienen derecho a un centro social, que sea con fondos p¨²blicos, no con cargo a un particular". El letrado explic¨® que los propietarios acudieron a la v¨ªa judicial, que les dio la raz¨®n, porque el Ayuntamiento ni ejecutaba el acuerdo ni lo dejaba sin efecto.
Ayer fue imposible recabar la posici¨®n del consistorio porque la concejala de Asuntos Sociales, Mariv¨ª Romero, estaba ilocalizable. Los j¨®venes aclararon que el conflicto "no es con los propietarios sino con el Ayuntamiento". Los vecinos de la zona no tienen quejas del centro social porque "los chavales no molestan a nadie".
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