"Me interesa m¨¢s la literatura europea que la norteamericana"
A finales de los a?os setenta, Rick Moody (Nueva York, 1961) era un joven aspirante a punk, era admirador incondicional del grupo The Feelies, beb¨ªa botellas de dos litros de bourbon barato (lo ha contado ¨¦l mismo), acab¨® la universidad, sigui¨® bebiendo, tuvo problemas mentales, trastornos ps¨ªquicos, e ingres¨® en un psiqui¨¢trico de Queens. Parte de esta historia aparece en D¨ªas en Garden State (Mondadori), su primera novela, escrita en los a?os ochenta, que se ha publicado recientemente en Espa?a. "Es un libro sobre los errores que he cometido en mi vida", explica el escritor en el pr¨®logo.
Moody relata de una manera desgarradora, con estilo sobrio y seco, la vida de un grupo de adolescentes de Nueva Jersey que, a la espera de un trabajo que no llega, se sumergen en un mundo de drogas, alcohol, sexo y m¨²sica.
"Escribo una novela que empieza el d¨ªa despu¨¦s de las elecciones que se atribuy¨® Bush"
El velo negro, uno de sus ¨²ltimos trabajos, que ahora publica asimismo Mondadori, tambi¨¦n es autobiogr¨¢fica. Es de una enorme ambici¨®n. En ella relata Moody qu¨¦ sucede cuando uno se derrumba, trata del conflicto generacional, explora el mundo del escritor Nathaniel Hawthorne, se embarca en una aventura en Connecticut y reflexiona, sobre todo, acerca de c¨®mo la literatura puede salvar a uno de la autodestrucci¨®n. El velo negro es una obra de madurez.
Pregunta. Tanto en D¨ªas en Garden State como en La tormenta de hielo (Debate, 2000) se centra en el conflicto generacional.
Respuesta. La
tormenta de hielo se public¨® en Estados Unidos en 1992 y en ¨¦sta como en D¨ªas en Garden State estaba centrado en el conflicto generacional desde la perspectiva de los j¨®venes. Si las escribiera ahora seguramente lo har¨ªa desde el punto de vista de los padres.
P.
D¨ªas en Garden State es terrible. ?Era usted tan autodestructivo como parece?
R. Empec¨¦ a escribirla a los 26 a?os, hace 15, y realmente refleja lo que yo pensaba en ese momento sobre la novela y sobre la vida. Hay alguna exageraci¨®n en el libro, pero realmente caminaba hacia la autodestrucci¨®n. He cambiado mucho.
P. ?Qu¨¦ ha pasado en estos 15 a?os?
R. He dejado de beber.
P. ?Por qu¨¦ beb¨ªa tanto?
R. Creo que est¨¢ en mi ADN. Mi abuela muri¨® de cirrosis, mi t¨ªo era alcoh¨®lico, mi hermana tuvo problemas de drogas. En la edad madura, me he asentado.
P. ?Le ha salvado la literatura?
R. La literatura, pero tambi¨¦n la religi¨®n.
P. ?Es creyente?
R. S¨ª, soy anglicano episcopal. Iba a la iglesia cuando era un cr¨ªo, dej¨¦ de ir durante un largo tiempo, pero volv¨ª despu¨¦s de D¨ªas en Garden State.
P. ?Es cierto que le cost¨® mucho publicarla?
R. La rechazaron 22 editoriales. Qued¨¦ verdaderamente deprimido, incluso pens¨¦ en regresar a la universidad para hacer el doctorado, pero volv¨ª a escribir.
P. Trabaj¨® en Simon & Shuster, ?qu¨¦ impresi¨®n le produjo el mundo editorial?
R. Estuve tambi¨¦n en otra editorial. Creo que los editores son unos ladrones.
P.
El velo negro hace pensar en el juego literario de W. G. Sebald.
R. Era un genio, adoro su trabajo. Le¨ª Los anillos de Saturno cuando estaba escribiendo El velo y present¨ª que estaba trabajando en su tono de voz. Sebald es grandioso. Lo m¨¢s interesante de ¨¦l es c¨®mo nos ha ense?ado que distintos g¨¦neros literarios pueden confluir en un nuevo g¨¦nero.
P. ?Le interesa la literatura europea?
R. S¨ª, mucho m¨¢s que la norteamericana, prefiero tambi¨¦n la latinoamericana. Sebald, por ejemplo, surge de la tradici¨®n de la novela europea del siglo XX, sobre todo de la del Este, de Bruno Schulz, de Milan Kundera, de Witold Gombrowich. Son autores que tienen una idea completamente opuesta al naturalismo y al realismo norteamericano.
P. ?Qu¨¦ autores estadounidenses contempor¨¢neos le interesan?
R. Don DeLillo, Foster Wallace... Creo que los autores de mi pa¨ªs que est¨¢n realmente interesados en la condici¨®n de la narraci¨®n tienen la vista puesta en la literatura europea m¨¢s que en la norteamericana. La cuesti¨®n, ahora, en Estados Unidos, es saber si hay nuevas tendencias tras el 11 de septiembre.
P. ?Las hay?
R. No creo. Deber¨¢n pasar entre cinco y diez a?os para que podamos verlo. Yo estoy escribiendo ahora una novela que empieza el d¨ªa despu¨¦s de las elecciones de 2000, en las que George Bush se atribuy¨® el cargo, y acaba el 10 de septiembre de 2001.
P. ?Trata de alguna manera de los atentados?
R. B¨¢sicamente, la idea es que nosotros sab¨ªamos lo que iba a pasar el 11 de septiembre, pero no sab¨ªamos que lo sab¨ªamos.
P. ?C¨®mo ve usted ahora la situaci¨®n?
R. Soy pacifista. Ninguna duda al respecto. S¨¦ tambi¨¦n que la terrible violencia que vivimos en Nueva York el 11 de septiembre no se vivi¨® en el resto del pa¨ªs. Creo que la guerra de Irak va a tener consecuencias muy graves a largo plazo. El mayor riesgo es el poder norteamericano sin ning¨²n tipo de control.
P. Sus libros traducidos hasta ahora al castellano son muy autobiogr¨¢ficos, ?empieza con esta novela otro tipo de ficci¨®n?
R. Espero que s¨ª. ?sta es totalmente de ficci¨®n. No tengo nada que ver con la historia ni con el personaje principal.
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