Cuatro guitarras

Gerardo N¨²?ez est¨¢ haciendo un excelente trabajo con j¨®venes guitarristas, a quienes apoya y de alguna manera traslada la experiencia obtenida en su ya larga carrera de artista consagrado. Es una obra importante, porque entre sus pupilos se encuentran unos cuantos guitarristas j¨®venes pero ya hechos, e incluso algunos con obra realizada de buena factura.

Es el caso de Jes¨²s de Rosario y de Juan Antonio Su¨¢rez Canito. Los dos, como Jos¨¦ Manuel Le¨®n, fueron los tres tocaores que N¨²?ez llam¨® junto a ¨¦l para estas actuaciones del club Calle 54. Cada uno de los j¨®venes hizo dos temas en solitario, y en ¨²ltimo lugar todos ellos, con Gerardo N¨²?ez, Cepillo al caj¨®n y Pablo Mart¨ªn Caminero al contrabajo, tocaron una larga secuencia menos flamenca que de jazz, alternando como es habitual en este g¨¦nero los solos instrumentales.

No o¨ªmos la mejor m¨²sica de estos flamencos, quiz¨¢ porque ellos mismos fueron conscientes de que las circunstancias no eran id¨®neas para profundizar en exquisiteces de un arte que no pod¨ªa llegar a un p¨²blico heterog¨¦neo y no siempre atento, pese a las advertencias de la direcci¨®n para que se guardara silencio absoluto durante el concierto. En un lugar as¨ª, con servicio constante en mesas y barra, es inevitable que no se guarde siempre el respeto deseable y tantas veces requerido. Habr¨¢ que insistir en el empe?o, porque locales as¨ª existen en otros pa¨ªses, y funcionan. Llevar m¨²sica de calidad -sea flamenco, sea jazz, sea cualquier otro g¨¦nero- a una sala de estas caracter¨ªsticas es importante.