'Expediente X' en Segovia

Podr¨ªa dibujar a ciegas la red nacional de carreteras, tal es su sabidur¨ªa tras la macrogira del a?o pasado. Cont¨® 241 actuaciones en cuatro meses. Siempre a lomos de su Mercedes de segunda mano. "Una horterada", reconoce el l¨ªder de La Cabra Mec¨¢nica, "pero miles de toreros y ganaderos no pueden equivocarse".

De no ser por la m¨²sica, no habr¨ªa salido del barrio, creo.

Desde luego, seguir¨ªa en mi descampado de margaritas y amapolas. Pero a los 18 o 20 a?os me sali¨® un curro con un grupo. Toc¨¢bamos versiones y nos contrataron en Segovia. Meterme en una furgoneta con mi bajo e ir para all¨¢ me pareci¨® incre¨ªble.

M¨¢s incre¨ªble fue lo que pas¨® por el camino.

S¨ª. En una gasolinera paramos a un tipo que nos pidi¨® si le pod¨ªamos llevar. Subi¨® al coche, y a mitad de viaje le pregunto: caballero, ?ad¨®nde va? Y dijo: a Tomelloso. Pues por aqu¨ª no es, dije. Se baj¨®. Durante los siguientes 15 kil¨®metros no nos adelant¨® nadie. De repente, al doblar una curva, vimos a un t¨ªo aparecer. Era ¨¦l.

Un expediente X, dir¨ªa.

No tiene explicaci¨®n, fue algo sobrenatural. El t¨ªo no pod¨ªa haber atajado por ning¨²n sitio, no hab¨ªa otra carretera.

Debe conocerse las gasolineras de carretera como su casa.

S¨ª, porque paro muchas veces y compro. Soy muy fetichista. Me molan las cintas de casete. As¨ª descubr¨ª a artistas como Emilio el Moro. Y luego est¨¢n las sillitas de montar en miniatura, las navajas de Albacete, el queso...

?Qu¨¦ hace mientras viaja solo?

Voy todo el pu?etero tiempo escuchando m¨²sica. De peque?o, yo cambiaba las letras de las canciones en los viajes. Es algo que hago desde que tengo uso de raz¨®n.

?Cu¨¢l es su gran viaje?

Me gustar¨ªa ir a Italia y Grecia. Tambi¨¦n me he aficionado mucho a la novela picaresca, y disfruto paseando por Madrid y Sevilla, visitando los lugares de esas novelas.

De peque?o hizo la vuelta a Espa?a por la costa.

Con mis padres y abuelos. Creo que no llegamos a terminarla porque se nos fastidi¨® el coche. Fue un verano, y tengo recuerdos muy vagos, im¨¢genes. El asiento de skay, las jarapas, el coche sin aire acondicionado. Viajar ten¨ªa un ritual de la hostia.