Nuestros derechos

Que el Gobierno equipare la asignatura de la Religi¨®n al resto de las materias causa una enorme preocupaci¨®n por el retroceso que esto significa y sobre todo porque es ir en contra de una Constituci¨®n que proclama la aconfesionalidad del Estado espa?ol.

Cada vez m¨¢s este Gobierno de derechas nos va recordando los a?os del absolutismo de la era franquista. Pero aquella sociedad viv¨ªa con miedo y traumatizada despu¨¦s de una guerra y sin capacidad para alzar su voz. La diferencia con la sociedad actual es que, aparentemente, ahora estamos en una supuesta democracia en la que uno puede manifestarse. Sin embargo, veo con preocupaci¨®n c¨®mo el Gobierno del PP est¨¢ narcotizando de tal forma a los ciudadanos que resultamos enga?ados y admitiendo un gol tras otro sin que nadie proteste.

Tendremos religi¨®n, el esc¨¢ndalo de los pisos continuar¨¢, los j¨®venes y no j¨®venes seguir¨¢n hipotecando sus vidas para pagar una vivienda, mientras los empresarios de la construcci¨®n se enriquecen cada vez m¨¢s, el trabajo continuar¨¢ siendo precario... Pero ?alguien protesta?

Sin embargo, como en tiempos pasados, el f¨²tbol, su parafernalia y los millones emboban al infeliz ciudadano de a pie esclavizado de pies y manos.

Todo esto s¨ª merecer¨ªa un grito un¨¢nime ?Paremos la anestesia de esta sociedad y empecemos a reclamar nuestros derechos como ciudadanos!