Eto'o da paso a Beckham
El camerun¨¦s echa el cierre a la temporada con su maravillosa actuaci¨®n en la final de Copa - Caluroso recibimiento al Mallorca tras la conquista de su primer t¨ªtulo - Madrid espera la llegada de la gran estrella inglesa, que ma?ana ser¨¢ sometida a un reconocimiento m¨¦dico y el mi¨¦rcoles presentada a lo grande por Florentino P¨¦rez
La velocidad supers¨®nica de Eto'o fue el ¨²ltimo impacto de la temporada. Esa rapidez endemoniada se adue?¨® el s¨¢bado de la final de la Copa del Rey, sirvi¨® para abrir las vitrinas del Mallorca, que a la tercera conquist¨® el trofeo, y dej¨® con la boca abierta a hinchas, t¨¦cnicos y ojeadores. No es s¨®lo lo que corre, rasgo que ya eleva de por s¨ª al camerun¨¦s a la categor¨ªa de atleta, sino c¨®mo corre, porque cada carrera de Eto'o, de las que regal¨® unas cuantas en los ¨²ltimos actos del curso (tambi¨¦n ayer, tan s¨®lo un d¨ªa despu¨¦s, en los ¨²ltimos minutos de la final de la Copa Confederaci¨®n), est¨¢ llena de contenido. Sus galopadas tienen sorpresa, complicidad con el compa?ero y mucho sentido. Y tienen enga?o: mienten de salida al defensa, al que le dejan hacerse ilusiones, al que invitan cruelmente a llegar a tiempo al bal¨®n antes de contarle de golpe toda la verdad dej¨¢ndole en el suelo con un palmo de narices. Eto'o sabe correr, con la pelota y sin ella, con el enemigo cerca y tambi¨¦n pis¨¢ndole los talones, solo o en buena compa?¨ªa. En Elche, sin que los agresivos defensas del Recreativo supieran qu¨¦ contestarle, Eto'o tradujo en beneficios contables su poder de aceleraci¨®n. Le hicieron un penalti, el que abri¨® el tanteo, y marc¨® los otros dos goles.
Su nombre en todo lo alto de la final de la Copa del Rey, un acontecimiento incomparable en magia y emociones tambi¨¦n con un cartel bajo, puso la guinda al curso. A una temporada repleta de nombres propios: el de Ronaldo, el fichaje del a?o; el de Ra¨²l, el mejor de todos, seg¨²n los entrenadores; el de Makaay, el m¨¢ximo goleador de Europa; el de los chicos de la Real Sociedad, tan felices pese al cruel desenlace; el de Fernando Hierro, al que su mal humor pese a la bondad del balance final le cost¨® la expulsi¨®n del club de su vida; el de Del Bosque, decapitado sin avisar y en pleno ¨¦xito; el de Joan Laporta, el presidente del cambio total en el Barcelona; el de Jes¨²s Gil, que est¨¢ que se va y que se va, pero que no se ha ido...
Muchos nombres propios que han ido completando una temporada que ya se acab¨®. Muchos nombres propios que ahora deben retirarse y dejar todo el peso de los focos al apellido que viene, al tipo que acaparar¨¢ las portadas del pr¨®ximo curso y cambiar¨¢ todas las costumbres. A David Beckham, a quien ya se le espera en Madrid: ma?ana ser¨¢ sometido a un examen m¨¦dico y Florentino P¨¦rez le presentar¨¢ a lo grande el mi¨¦rcoles. Llega Beckham. Se acabaron los dem¨¢s nombres.

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