Una exposici¨®n en Girona rememora las ruinas de Sarajevo tras la guerra de Bosnia

Los despojos arquitect¨®nicos pueden guardar durante a?os la memoria de la crueldad de una guerra. Las fotos de Miquel Ruiz, que hasta el 31 de agosto se exponen en el Colegio de Arquitectos de Girona, exploran ese territorio de cascotes, ventanas sin cristales, faroles ciegos y fachadas ro¨ªdas por la metralla en que se convirti¨® la ciudad de Sarajevo tras la guerra de Bosnia. "Mi intenci¨®n es que no olvidemos que hace 10 a?os se desarroll¨® una guerra en el coraz¨®n de Europa", asegura el fot¨®grafo, que por aquellos a?os aciagos fund¨® la ONG Fot¨°grafs per la Pau.

La exposici¨®n Passatge a Sarajevo, que se incluye en un ciclo dedicado a glosar la arquitectura de diversas ciudades del mundo, se estructura a partir de un juego intencionado entre grandes fotocopias repletas de grafitos rojos junto a fotos en color de formato m¨¢s reducido. Ruiz asegura que decidi¨® trasladar a las fotocopias las im¨¢genes de la destrucci¨®n para se?alar as¨ª que "la guerra no constituye la realidad del pa¨ªs". Las fotos en color, en cambio, realizadas durante un viaje a la ciudad a principios de este a?o, constituyen un signo de esperanza hacia el progreso del pa¨ªs.

Enric Matarrodona, presidente del Colegio de Periodistas de Girona, present¨® la exposici¨®n recordando el peligro de la sobreinformaci¨®n y la insistente b¨²squeda del dolor humano que aqueja a la tarea period¨ªstica. Asegur¨® que la visi¨®n de Ruiz, "una guerra sin disparos, sin sangre, casi sin personas", es otra manera de reflejar el conflicto.

La inauguraci¨®, realizada el pasado viernes, sirvi¨® tambi¨¦n como plataforma de presentaci¨®n para la tarea de las organizaciones humanitarias que prestan su apoyo en los conflictos b¨¦licos. Una de las inscripciones que pueden verse sobre las im¨¢genes de la exposici¨®n, se?alando la ventana de un edificio, reza: "Aqu¨ª est¨¢ una parte de mi vida". Est¨¢ firmada por el cirujano Fernando Fonseca, impulsor de la Asociaci¨®n Humanitaria de Solidaridad (AHS), que estuvo en Sarajevo junto al fot¨®grafo Miquel Ruiz para participar en lo que ¨¦l denomina "injerencia humanitaria". Fonseca record¨® las terribles heridas y amputaciones que afectaron a la poblaci¨®n civil durante el cruel sitio de la ciudad. El cirujano, que ha regresado recientemente de otra acci¨®n humanitaria en Bagdad, asegur¨® que en los 10 a?os transcurridos entre una y otra guerra, la tecnolog¨ªa militar se ha perfeccionado y, con ella, el da?o infligido a los civiles, que ha llegado a extremos obscenos.