Editores de poes¨ªa de M¨¦xico y Espa?a buscan un destino com¨²n
25 especialistas debaten a partir de hoy en Granada la capacidad creadora de la edici¨®n
Reunidos a partir de hoy en el Carmen de la Victoria de Granada, 25 editores de poes¨ªa de M¨¦xico y Espa?a debatir¨¢n sobre un sector de la industria editorial que se rige, seg¨²n ellos, por sus propias leyes. Leyes al margen del mercado (la escasa demanda lo permite) y generalmente impuestas por el criterio y gusto po¨¦tico de cada editor. El primer encuentro hispanomexicano de editores de poes¨ªa pretende buscar lugares comunes entre mexicanos y espa?oles. "Entendemos a los editores de poes¨ªa como creadores, buscamos un intercambio de ideas", se?alaron ayer los organizadores.
"Los editores mexicanos vamos a hacer un poco de melodrama, algo que siempre caracteriza al pa¨ªs", dice Jos¨¦ Mar¨ªa Espinasa (Ediciones Sin Nombre) al intentar comparar "los n¨²meros" de la edici¨®n de poes¨ªa en M¨¦xico y los de Espa?a. "El dato de que en Espa?a se publican al a?o m¨¢s de 7.000 t¨ªtulos de poes¨ªa me impresiona. Nada que ver con M¨¦xico, aunque desconocemos las cifras ni se acercan a las espa?olas".
Dirigidos a un p¨²blico minoritario pero fiel y con un fondo editorial creado generalmente a partir de su perspectiva cr¨ªtica, para el editor de poes¨ªa el paso del tiempo suele ser lo ¨²nico rentable. "La edici¨®n de poes¨ªa es un territorio de audaces, un lugar para dignos protagonistas de una pel¨ªcula de John Ford", afirm¨® ayer el secretario de Estado de Cultura, Luis Alberto de Cuenca, en la presentaci¨®n en Madrid de Editar poes¨ªa. Encuentro hispanomexicano de poes¨ªa. Organizado por la Embajada de M¨¦xico en Espa?a, el Ministerio de Educaci¨®n y Cultura, el vicerrectorado de Extensi¨®n Universitaria de Cooperaci¨®n al Desarrollo de la Universidad de Granada y la Residencia de Estudiantes de Madrid, este encuentro pretende promover el intercambio de experiencia y de ideas de los profesionales espa?oles y mexicanos.
"Llevo 40 a?os en el mundo de la edici¨®n y creo que jam¨¢s se hab¨ªa convocado un encuentro parecido a ¨¦ste", se?al¨® ayer Jes¨²s Mun¨¢rriz, editor de Hiperi¨®n. "La edici¨®n de poes¨ªa es algo muy especial, su vida es dif¨ªcil", a?adi¨®, "pero a la larga los riesgos merecen la pena". "Un encuentro de editores de poes¨ªa es un encuentro de lectores de poes¨ªa", continu¨® Eduardo V¨¢zquez Mart¨ªn, poeta y coordinador general del Instituto de M¨¦xico en Espa?a. "El editor de poes¨ªa", a?adi¨®, "es un lector que arriesga. Un lector que no est¨¢ conforme con lo que le precede y conoce. El editor de poes¨ªa es un creador que con su gusto y su sensibilidad, con su intuici¨®n y su valor, propone un paisaje diferente. Su prioridad no es, en principio, hacer negocio". "Para nosotros, los dos ¨²ltimos a?os han sido muy dif¨ªciles", asegur¨® el mexicano V¨ªctor Manuel Mendiola (editorial El Tuc¨¢n de Virginia). "La poes¨ªa est¨¢ activa gracias a ocho o diez editoriales muy diferentes, pero que han logrado mantenerse con sus propuestas".
Los editores reunidos en Granada son los mexicanos Juan Alc¨¢ntara (revista El poeta y su trabajo), Jos¨¦ Mar¨ªa Espinasa (Ediciones Sin Nombre), Claudia Pacheco (editorial Verdehalago), David Huerta (Peri¨®dico de poes¨ªa), V¨ªctor Manuel Mendiola (editorial El Tuc¨¢n de Virginia), Le¨®n Plasencia (Filodecaballos editores), Roberto R¨¦bora (Taller Ditoria), Pedro Serrano (miembro de la revista Fractal), Fernando Sordo (editorial Aldus), Julio Trujillo (revista Letras Libres), Marcelo Uribe (ERA editores). Entre los espa?oles se encuentran, entre otros, Jos¨¦ Antonio S¨¢nchez Pasos (Publicaciones de la Universidad de Salamanca), Alfonso Alegre (Rosa C¨²bica), Manuel Borr¨¢s (Pre-Textos), Miguel ?ngel Acre (Cuadernos del Vig¨ªa) y Amalia Romero (El Bardo).
Un viaje sin vuelta
A ra¨ªz del exilio, la poes¨ªa espa?ola entr¨® imparable en M¨¦xico. "Donde figuraban Xavier Villaurrutia, Alfonso Reyes, Octavio Paz o Efra¨ªn Huerta, se sum¨® la presencia de Luis Cernuda, Pedro Garfias, Le¨®n Felipe, Manuel Altolaguirre, Jos¨¦ Bergam¨ªn... La poes¨ªa mexicana adopt¨® al exilio espa?ol, fundaron escuelas y editoriales", se?ala Eduardo V¨¢zquez Mart¨ªn. "Nos ense?aron el h¨¢bito de leer a los poetas espa?oles. La presencia de los poetas espa?oles y sus editoriales ha tenido en M¨¦xico la vigencia y la continuidad de la que ha carecido la poes¨ªa mexicana, y en general la latinoamericana, en Espa?a".
Esta simetr¨ªa ha provocado, seg¨²n los editores reunidos a partir de hoy en Granada, un inevitable empobrecimiento.
"En M¨¦xico tenemos muy presentes a los poetas del exilio. Ese viaje no se dio a la inversa", afirm¨® ayer David Huerta.
A la pregunta de si es M¨¦xico o es Espa?a el que marca hoy las pautas o las innovaciones est¨¦ticas de la nueva poes¨ªa, Huerta contesta: "En los a?os treinta, el poeta mexicano Jorge Cuesta nos explic¨® en un ensayo que hay una unidad que es lo que ¨¦l llamaba poes¨ªa en espa?ol. ?sa es la misma. El rasgo principal de la poes¨ªa espa?ola es su universalidad, su terreno com¨²n. Es dif¨ªcil saber de d¨®nde llegan hoy las innovaciones mayores, aunque no creo que la innovaci¨®n en s¨ª misma sea un valor. Innovaci¨®n y tradici¨®n deben tener un di¨¢logo continuo".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.