Una mezquita para Granada

La Comunidad Isl¨¢mica en Espa?a, a la que pertenecen cientos de musulmanes conversos, casi todos espa?oles, que se estableci¨® en Granada en 1981, fij¨® entre sus metas la recuperaci¨®n del brillo espiritual del Al-Andalus medieval. Muchos han sido los avatares por los que ha pasado la propia comunidad, como variable ha sido la opini¨®n de los granadinos, principalmente de los vecinos del Albaic¨ªn, sobre las cada vez m¨¢s evidentes manifestaciones religiosas de los musulmanes. Pero lo que no ha cambiado es la intenci¨®n, frente a cortapisas burocr¨¢ticas u objeciones religiosas, de construir la gran mezquita de Granada sobre un solar adquirido con capital libio, a comienzos de los ochenta, junto al mirador de San Nicol¨¢s, una terraza de vistas impresionantes situada frente a la Alhambra en pleno coraz¨®n del Albaic¨ªn. Hasta ahora los musulmanes han utilizado diversos locales y pisos para sus rezos, pero han logrado por fin una mezquita de grandes dimensiones en un lugar emblem¨¢tico de la Granada medieval, algo de lo que no dispon¨ªan desde que Boabdil entreg¨® la ciudad a los Reyes Cat¨®licos en 1492.

Un im¨¢n procedente de una "reserva espiritual" marroqu¨ª asumir¨¢ la direcci¨®n religiosa

Ma?ana, 22 a?os despu¨¦s, los musulmanes orar¨¢n por primera vez en la mezquita. Entre los invitados figuran creyentes de todo el mundo, entre ellos el emir de Sharjab, Jalid bin al-Qassimi, de los Emiratos ?rabes, el principal benefactor. La cadena de televisi¨®n Al Yazira emitir¨¢ im¨¢genes de la inauguraci¨®n. "Hemos tardado 22 a?os en completar la mezquita porque hemos luchado para que fuera independiente y no perteneciera a ning¨²n grupo. Hemos recibido ofertas para construirla en cuatro d¨ªas pero, a cambio, perd¨ªamos toda capacidad de decisi¨®n sobre lo que ocurriera en ella", se?al¨® ayer Malik Abderram¨¢n Ruiz, presidente de la comunidad y de la fundaci¨®n que ha impulsado la obra en su ¨²ltima fase.

La mezquita es en realidad un centro religioso dotado de unos jardines de libre acceso por imposici¨®n del Ayuntamiento de Granada y un centro de estudios isl¨¢micos de tres plantas que incluye una sala de conferencias, una biblioteca, oficinas y, en el piso superior, la vivienda del almu¨¦dano. Los responsables de la comunidad calculan que la construcci¨®n ha supuesto un desembolso de cuatro millones de euros, dos de los cuales proceden del emirato de Sharjab. Con anterioridad, la comunidad recibi¨® aportaciones diversas, desde la inicial de Libia a otras de los gobiernos marroqu¨ª y malayo.

La direcci¨®n religiosa de la mezquita ha sido encomendada a Mohamed al Kasbi, un im¨¢n procedente de las monta?as del Sous de Marruecos, una "reserva espiritual" que representa "la forma m¨¢s pura del islam, sin corrientes y sin contaminaci¨®n", seg¨²n palabras de Abdelhasid Casti?eira, director del centro isl¨¢mico. El im¨¢n necesitar¨¢ la asistencia, como traductor, de otra persona, ya que desconoce el castellano.

La ceremonia de apertura promete ser muy ajetreada. Los miembros de la comunidad esperan la presencia de embajadores de los pa¨ªses musulmanes y de representantes de los gobiernos que han colaborado econ¨®micamente. El Gobierno espa?ol estar¨¢ representado por el ex embajador en los Emiratos ?rabes Manuel Pombo Bravo. La Casa Real espa?ola ha disculpado la presencia en la ceremonia por coincidencia de actos.

Pero el d¨ªa principal ser¨¢ el viernes, el d¨ªa sagrado de los musulmanes. Unos cuatrocientos invitados rezar¨¢n la yuma, la primera oraci¨®n del mediod¨ªa, en la flamante mezquita. "Vamos a dar la cara y a demostrar con acciones, no con palabras, que el islam es beneficioso y positivo para la sociedad, y no el alimento de la confrontaci¨®n y del odio, como nos quieren hacer creer", dijo ayer el responsable del centro isl¨¢mico.

La opini¨®n de los vecinos del Albaic¨ªn sobre la persistente presencia de musulmanes ha pasado de cierta resistencia inicial a una tolerancia basada en la inevitable convivencia. Calles como la Calderer¨ªa semejan hoy perfectamente los abigarrados barrios de T¨¢nger o Fez, saturados de turistas en busca de teter¨ªas o dulces ¨¢rabes. Un espacio cosmopolita al que ahora se incorpora el gran centro espiritual.