Rubic¨®n vasco

Hace unas semanas, Jaime Mayor Oreja, aunque sin mencionar expresamente el art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n (CE), declar¨® p¨²blicamente que, en el caso de que el Estado tuviera que acabar recurriendo a medidas excepcionales para hacer entrar en raz¨®n al Gobierno vasco, ¨²nicamente a ¨¦ste podr¨ªa hacerse responsable de que dichas medidas tuvieran que ser tomadas.

No es la primera vez a lo largo del ¨²ltimo a?o en que sale a relucir, de manera expresa o impl¨ªcita, la coacci¨®n federal prevista en el art¨ªculo 155 CE como destino casi inevitable de la autonom¨ªa vasca. En varias ocasiones y desde distintas opciones pol¨ªticas se ha mencionado esa posibilidad. Cada vez que ha ocurrido esto el portavoz del Gobierno o el secretario general del Partido Popular han desmentido que se est¨¦ contemplando siquiera el estudio de medidas de esa naturaleza.

Tal vez podr¨ªa pensarse que no hay tampoco que prestarle mucha atenci¨®n a esta referencia al art¨ªculo 155 CE, si no fuera porque en esta ¨²ltima invocaci¨®n concurren dos circunstancias que no se han dado antes:

1?. Que quien ha sacado a relucir la posibilidad de recurrir a la coacci¨®n federal ha sido Jaime Mayor Oreja y que, como ha subrayado Josep Antoni Duran Lleida, lo que Mayor Oreja propone en relaci¨®n con el Pa¨ªs Vasco acaba convirti¨¦ndose en acci¨®n de gobierno. De ah¨ª que el dirigente nacionalista catal¨¢n solicitara que el Gobierno desmintiera expresamente las declaraciones de Mayor Oreja.

2?. Que, a diferencia de lo que ha ocurrido en anteriores ocasiones, en este caso no ha habido desmentido gubernamental. Ausencia de desmentido que f¨¢cilmente puede ser interpretado como la confirmaci¨®n de que se est¨¢ estudiando ya la aplicaci¨®n de medidas excepcionales para el Pa¨ªs Vasco.

Buena prueba de ello es que Jaime Mayor Oreja no s¨®lo no ha rectificado sus declaraciones anteriores, sino que ha seguido en la misma l¨ªnea, aunque en t¨¦rminos todav¨ªa m¨¢s rotundos. En EL PA?S de ayer (p¨¢gina 17) se nos informaba de que el ex ministro del Interior hab¨ªa dicho en Aranjuez que el "PNV ha dejado de ser un partido democr¨¢tico" y ped¨ªa al resto de las fuerzas pol¨ªticas que lo expresen de ese modo y "pierdan sus complejos" al referirse al nacionalismo vasco. Con el plan soberanista de Juan Jos¨¦ Ibarretxe, el Partido Nacionalista Vasco, seg¨²n Mayor Oreja, habr¨ªa dado "el primer golpe contra la Constituci¨®n tras el 23 de febrero de 1981".

?Qu¨¦ es lo que se puede hacer con un partido antidemocr¨¢tico y golpista? ?Se le puede permitir que "concurra a la formaci¨®n y manifestaci¨®n de la voluntad popular" (art. 6 CE) juntamente con los dem¨¢s partidos democr¨¢ticos? ?Qu¨¦ es m¨¢s peligroso, un partido como Batasuna que tiene v¨ªnculos con el terrorismo o un partido como el PNV que est¨¢ directamente propiciando un golpe de Estado? ?Se est¨¢ preparando el terreno para poner fuera de la ley tambi¨¦n al PNV?

En pol¨ªtica, las palabras comprometen m¨¢s que las conductas. Un Gobierno o un partido acaban quedando prisioneros de su discurso, una vez que ¨¦ste ha sido transmitido a la opini¨®n p¨²blica de manera reiterada e inequ¨ªvoca. Hay un momento en el que ya no se puede dar marcha atr¨¢s, en el que la acci¨®n pol¨ªtica s¨®lo tiene credibilidad si se adecua a lo que ha sido el discurso que la explica y justifica. Me temo que ese Rubic¨®n lo ha pasado ya el Partido Popular y el Gobierno en su pol¨ªtica respecto del Pa¨ªs Vasco y que para eso es para lo que est¨¢ preparando a la opini¨®n p¨²blica Jaime Mayor Oreja.