La Corte Penal Internacional se estrena con la persecuci¨®n de los cr¨ªmenes en Congo
El tribunal s¨®lo podr¨¢ investigar 5.000 de los m¨¢s de tres millones de muertos desde 1998
La Corte Penal Internacional (CPI), el primer tribunal permanente instituido para perseguir los cr¨ªmenes de guerra, genocidio y de lesa humanidad, ya tiene su primer caso entre las manos: las matanzas de la provincia congole?a de Ituri. S¨®lo un mes despu¨¦s de tomar posesi¨®n de su cargo, el fiscal Luis Moreno Ocampo ha examinado las 499 denuncias recibidas y ha elegido este caso por ser urgente y porque las denuncias presentadas est¨¢n muy documentadas. Aunque se eval¨²an en m¨¢s de tres millones los muertos desde 1998, el tribunal s¨®lo podr¨¢ perseguir los 5.000 cr¨ªmenes cometidos en el ¨²ltimo a?o.
La situaci¨®n de la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo es tan grave que la Uni¨®n Europea, a petici¨®n de la ONU, ha enviado a esta zona, por primera vez, su Fuerza de Despliegue R¨¢pido. El alto representante para la Seguridad y la Pol¨ªtica Exterior de la UE, Javier Solana, dio por terminada ayer precisamente su visita a la zona y constat¨® que se ha logrado estabilizar, al menos, la situaci¨®n en la capital de la regi¨®n de Ituri, Bunia.
Pero los informes de ONG y de los cascos azules de Naciones Unidas desplegados en el lugar con anterioridad hablan de una cat¨¢strofe que se est¨¢ cobrando decenas de miles de v¨ªctimas ante la pasividad del sistema jur¨ªdico nacional, un requisito imprescindible para que la CPI pueda actuar en un pa¨ªs que, como el Congo, ha ratificado el acuerdo de creaci¨®n de la Corte (el llamado Estatuto de Roma).
Nacida en 1998, la CPI ech¨® a andar el 1 de julio de 2002. S¨®lo podr¨¢ juzgar los cr¨ªmenes cometidos desde entonces. La ausencia del fiscal jefe, que tom¨® posesi¨®n de su cargo hace s¨®lo un mes, imped¨ªa abrir las denuncias que iban llegando a sus oficinas en La Haya y que se redoblaron a ra¨ªz del juramento de los 18 jueces que la componen desde el 11 de marzo pasado.
Entre las 499 denuncias recibidas hay 16 contra las fuerzas aliadas que invadieron Irak, pero Moreno Ocampo explic¨® ayer en rueda de prensa que la Corte no tiene jurisdicci¨®n en ese caso porque ni Irak ni Estados Unidos ratificaron el Estatuto de Roma. Tampoco podr¨ªa tomar en cuenta las dos denuncias presentadas contra Israel o contra las matanzas en Costa de Marfil por la misma causa. La CPI s¨®lo podr¨ªa intervenir si lo pidiese el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas o si determinados cr¨ªmenes ya comprobados no fueran perseguidos en los pa¨ªses de origen de los presuntos criminales en pa¨ªses que s¨ª han ratificado.
El todav¨ªa reducido equipo de Moreno Ocampo facilit¨® ayer una primera radiograf¨ªa de las 499 denuncias recibidas en su oficina. M¨¢s de la mitad proceden de Europa (23 son espa?olas). Se da la circunstancia de que Alemania es el pa¨ªs que m¨¢s ha presentado (93), seguido de Estados Unidos (70), cuya Administraci¨®n ha puesto su empe?o en neutralizar la potestad de la CPI firmando acuerdos bilaterales con una cincuentena de pa¨ªses para evitar que ¨¦sta pueda perseguir a los estadounidenses asentados en sus suelos.
La investigaci¨®n abierta por Moreno Ocampo sobre los cr¨ªmenes en Ituri tiene una primera limitaci¨®n de recursos humanos importante. Con cuatro funcionarios y 13 ayudantes, esta investigaci¨®n cuenta con el apoyo de informes serios y detallados tanto de ONG como de Naciones Unidas. A partir de hoy, la oficina del fiscal a?adir¨¢ sus propias pesquisas y, en caso de que lo considere necesario, iniciar¨¢ la persecuci¨®n formalmente, lo que requiere el permiso expreso de la Sala de Asuntos Preliminares de la propia CPI.
Las tareas m¨¢s importantes que ahora debe afrontar la fiscal¨ªa de la CPI son las de detallar las denuncias concretas y demostrar que la justicia local no ha actuado. De forma indirecta, Moreno Ocampo se quej¨® de la inoperancia de muchas de las denuncias recibidas y explic¨® a la opini¨®n p¨²blica que ¨¦stas deben ser lo m¨¢s concretas posible y con informaci¨®n precisa acerca de la posici¨®n del gobierno de turno en la persecuci¨®n de los presuntos delitos denunciados.
Tropas europeas
Javier Solana abandon¨® anoche la zona de los Grandes Lagos camino de Nueva York. Unos 1.500 soldados europeos, componentes de la Fuerza de Despliegue R¨¢pido, han logrado, seg¨²n el alto representante, estabilizar la situaci¨®n en Bunia, pero abandonar¨¢n el lugar el 1 de septiembre pr¨®ximo, como estaba previsto.
Solana pedir¨¢ ma?ana al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que los cascos azules regresen en septiembre, pero con mayor capacidad de acci¨®n, con poder de utilizar la fuerza para mantener la paz y responder a los ataques. "La Uni¨®n Europea ha conseguido restablecer la confianza en la zona y Solana teme que ¨¦sta se pierda cuando los europeos la abandonen, lo que pondr¨ªa en riesgo tambi¨¦n todo el proceso de paz", dec¨ªa ayer desde Uganda a este peri¨®dico la portavoz de Javier Solana, Cristina Gallach.
Nuevos casos de violencia se registraron en los ¨²ltimos d¨ªas en la regi¨®n congole?a de Ituri. La agencia France Presse inform¨® ayer de la muerte de 35 personas por enfrentamientos armados ocurridos el pasado martes en Tchomia, una ciudad cercana a Bunia. Entre los fallecidos se encuentran al menos cuatro civiles. La noticia sobre los combates la aportaron las fuerzas rebeldes que dicen controlar esa localidad.
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