ELA y LAB rechazan la reforma de la formaci¨®n continua e instan al Gobierno vasco a que la asuma unilateralmente
Los sindicatos nacionalistas ELA y LAB expresaron ayer su radical desacuerdo con la regulaci¨®n de la formaci¨®n continua que va a aprobar el Gobierno central y denunciaron la "pasividad" del Ejecutivo vasco ante este asunto. Ambas centrales reclaman al lehendakari que asuma unilateralmente esta competencia.
La reforma de la formaci¨®n continua (la referida a los trabajadores ocupados) viene obligada por las irregularidades detectadas en el funcionamiento del Forcem -la fundaci¨®n estatal formada por sindicatos y patronal que gestionaba los cursos- y una sentencia del Tribunal Constitucional que reconoci¨®, ante un recurso de Catalu?a, la competencia de las comunidades sobre esta materia. La nueva f¨®rmula establece que ser¨¢n las empresas las encargadas de formar a sus trabajadores, deduciendo los gastos de la cuota que por este concepto ingresan en la Seguridad Social (el 0,35% del salario).
Este cambio deja al Forcem con la ¨²nica tarea de controlar los cursos de formaci¨®n, al tiempo que vac¨ªa de competencias a Hobetuz, la fundaci¨®n vasca creada en 1996, que entr¨® en crisis en 2000 tras no renovar el Gobierno central la aportaci¨®n anual con la que se financiaba en gran medida. El secretario de comunicaci¨®n de ELA, Germ¨¢n Kortabarria, se?al¨® que la nueva f¨®rmula supone un "grave ataque" a Hobetuz y al Acuerdo vasco de Formaci¨®n Continua y propugn¨® que la respuesta sea "proporcional a la gravedad del ataque".
Los sindicatos nacionalistas, que reivindican un "marco vasco de relaciones laborales" desvinculado del resto del Estado, sostienen que el Gobierno espa?ol "no est¨¢ legitimado para decidir el destino de las cuotas que empresas y trabajadores vascos pagan para la formaci¨®n profesional". Sin embargo, la reforma suprime la cuesti¨®n de la reivindicaci¨®n territorial de los fondos y cuotas destinados a formaci¨®n continua, ya que ¨¦stos los gestionar¨¢n las empresas. ELA y LAB extendieron sus cr¨ªticas a la patronal Confebask y a los sindicatos CC OO y UGT, que tambi¨¦n forman parte de Hobetuz, por el hecho de que sus organizaciones estatales han dado el visto bueno a la reforma.
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