No m¨¢s parches
Espa?a no ha ido nada bien para esas 42 mujeres muertas en lo que va de a?o a manos de sus maridos o compa?eros. No va bien para miles de mujeres de toda edad y condici¨®n que viven con terror sus relaciones de pareja. No va bien, en general, para cualquiera de nosotras (mitad de la poblaci¨®n espa?ola), ya que podemos ser abordadas con comentarios humillantes por cualquier hombre, discriminadas salarialmente, acosadas en el lugar de trabajo, cuestionadas pol¨ªticamente, v¨ªctimas de delitos sexuales, etc.
Con todo eso, no entiendo las ¨²ltimas medidas propuestas por el Gobierno para proteger a las mujeres v¨ªctimas de violencia dom¨¦stica. En mi opini¨®n, est¨¢n pensadas para minimizar el impacto que est¨¢n teniendo las noticias sobre este grav¨ªsimo problema social. Son parches que una vez m¨¢s servir¨¢n de r¨¦plica -por la inadecuaci¨®n y la falta de medios- al tratamiento sesgado de los temas que afectan a las mujeres. Lo que se necesita es una ley integral contra la violencia sexista y educar en la igualdad a toda la ciudadan¨ªa.
La violencia de algunos hombres contra las mujeres requiere un abordaje integral que incluya medidas de protecci¨®n y tratamiento a las v¨ªctimas, pero que no incida, fundamental y unilateralmente, sobre ellas, como viene ocurriendo hasta ahora.
Es preciso que la mujer, la v¨ªctima, sea protegida, y el agresor, el delincuente, sea retenido, aislado, juzgado y castigado por el delito cometido. Son necesarias medidas penales que castiguen al agresor, que repercutan econ¨®micamente sobre ¨¦l y que le obliguen a abandonar el domicilio. Medidas terap¨¦uticas que lo comprometan en su tratamiento reeducativo y que se eval¨²e por profesionales el impacto que su conducta violenta est¨¢ teniendo en sus hijos/as. Es decir, que sean ellos -los agresores- internados, investigados, juzgados, cuestionados, y tratados psicol¨®gicamente, no las v¨ªctimas.
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