Valvas y Balb¨¢s

Si cruzas los datos de audiencia de la tele con los del consumo dom¨¦stico de agua, llegas a la conclusi¨®n de que la gente tiende a tirar de la cadena cuando llega la publicidad, es decir, en los intermedios de la programaci¨®n. Normal: se tira de la cadena para borrar las huellas del crimen. Si la conciencia tuviera un dispositivo para descargarse y volverse a llenar, sonar¨ªa igual que la cisterna del retrete. Y gotear¨ªa tambi¨¦n, pues no hay mecanismo de cierre m¨¢s chapuza que el de la conciencia. Muchas noches te levantas para cerrar bien el grifo y cuando llegas al cuarto de ba?o resulta que lo que goteaba no era el grifo del lavabo, sino el de la conciencia. Chop, chop, chop. No hay quien duerma.

Descargar la conciencia: Si la conciencia tuviera un dispositivo para descargarse y volverse a llenar, sonar¨ªa igual que la cisterna del retrete

Esto que hacen los soci¨®logos de cruzar datos reales para obtener conclusiones fant¨¢sticas est¨¢ muy bien, porque dispara la imaginaci¨®n de los usuarios de la mente. Si a los nueve meses, por ejemplo, de la comparecencia de Balb¨¢s en la Asamblea de Madrid se hiciera la estad¨ªstica de los ni?os que no nacieron con relaci¨®n a los que s¨ª nacieron el mismo d¨ªa y mes de a?os anteriores, sabr¨ªamos a cu¨¢nta gente fue capaz de deserotizar este sujeto que en casi todas las fotos ha aparecido subi¨¦ndose la cintura de los pantalones, como si tuviera un miedo patol¨®gico a perderlos. No s¨¦ nada de encuestas, ni de estad¨ªsticas, pero tampoco hay que ser un genio para concluir que en este pa¨ªs no foll¨® nadie el d¨ªa de la comparecencia de Balb¨¢s porque nos fuimos a la cama hechos polvo, dominados por un pesimismo antropol¨®gico que te quitaba las ganas de cualquier cosa, sobre todo de aquellas que, por mucho placer que proporcionaran por un lado, conllevaran, por otro, la amenaza de la reproducci¨®n.

Y es que Jos¨¦ Luis Balb¨¢s (cada vez que escribo Balb¨¢s, el procesador de textos de mi ordenador rectifica y pone Valvas, como si supiera que estamos hablando de un tipo con cara de almeja) no intent¨® demostrar que ¨¦l estaba limpio, sino que los dem¨¢s estaban tan sucios como ¨¦l. Despu¨¦s de todo, dijo, hab¨ªa aprendido de Guerra y hab¨ªa sido fontanero con Felipe Gonz¨¢lez. En cuanto a Zapatero, le deb¨ªa el puesto. Parec¨ªa un Gil y Gil menor, un gilito, dispuesto a convencernos de que ¨¦l no era peor que el resto del mundo y que si usted y yo no tenemos sus millones ni sus influencias ni sus guardaespaldas es porque no estamos al loro. Desde luego, si la descripci¨®n que hizo de la FSM, del partido y del modo en el que ¨¦l ha venido utilizando su dedo para quitar a ¨¦ste o para poner a aqu¨¦l se acerca un poco, s¨®lo un poco, a la realidad, despu¨¦s de Simancas, y antes de las elecciones de 2004, el diluvio.

Ese d¨ªa no hubo consumo de sexo, pero se tir¨® de la cadena m¨¢s de lo normal. Hubo gente que tras la comparecencia de Valvas (ya estoy harto de corregir a mi procesador de textos, esta vez se queda en molusco) se duch¨® tres veces seguidas, pues te levantabas del sof¨¢ con una sensaci¨®n de suciedad insoportable. Crucen los datos. Y crucen las cifras de audiencia del espect¨¢culo socialista de Marbella no ya con el consumo de agua, sino con el consumo de whisky o de ginebra. A ver cu¨¢nta gente se ha dado al alcohol tras comprobar que los socialistas marbell¨ªes, tras el espect¨¢culo dado por los socialistas madrile?os, se revuelcan en las pocilgas de Gil y gru?en de satisfacci¨®n cuando se llevan una monda al hocico. Crucen tambi¨¦n los datos del impacto de estas noticias con los del n¨²mero de gente que huye de la pol¨ªtica a cien por hora para regocijo de Aznar, pues cada vez que un desencantado tira con desesperaci¨®n de la cadena, las sustancias nutrientes de estas aguas fecales van a regar los huertos del PP.

Pero no todos los datos estad¨ªsticos son malos. TVE tuvo durante el mes de julio los niveles m¨¢s bajos de audiencia de toda su historia. Es posible que esta emisora haya empezado a provocar en los espectadores un h¨¢bito de consumo de agua inverso al que provocan las dem¨¢s. Es decir, que cuando tienes sintonizada La Primera no tiras de la cadena en los intermedios de la programaci¨®n, que es lo normal, sino durante la programaci¨®n misma, lo que, de confirmarse, constituir¨ªa un progreso moral sin precedentes. Animamos desde estas p¨¢ginas a los soci¨®logos que han llevado a cabo el interesante estudio de la relaci¨®n entre los h¨¢bitos de consumo televisivo y los de consumo dom¨¦stico de agua, para que profundicen en este extremo que, de confirmarse, abrir¨ªa una luz al final del t¨²nel. Gracias.