Aclaraci¨®n al PP
En el art¨ªculo del d¨ªa 11-08-03 El Polvor¨ªn de Marbella del se?or Joaqu¨ªn Ram¨ªrez -presidente del PP en M¨¢laga y mu?idor en la pasada legislatura municipal de la ruptura del pacto anti-GIL-, en supuesta respuesta (no llega a cuestionar ning¨²n dato de los cuantiosos por m¨ª expuestos) a la tribuna que publiqu¨¦ el 07-08-03 Marbella y la amnesia del PP, se deslizan un c¨²mulo de errores, impropios de un dirigente de su talla que deber¨ªa ser perfecto conocedor de la realidad pol¨ªtica provincial.
As¨ª, me atribuye la cualificaci¨®n de alto dirigente socialista (hasta tres veces) cuando no tengo militancia partidaria alguna. Inculpa al PSOE de la moci¨®n de censura que se present¨® contra IU en Manilva, cuando resulta que la misma la encabezaron expulsados de dicho partido pol¨ªtico; igual, erre que erre, -?una mentira reiterada mil veces puede ser generadora en nuestras mentes de alguna part¨ªcula de verdad?-, asocia la locura actual de Isabel Garc¨ªa Marcos a la posici¨®n oficial del PSOE.
A continuaci¨®n manifiesta que yo "me amparo en el cargo institucional" para escribir ese art¨ªculo. ?Se puede utilizar el t¨¦rmino amparar por el motivo de ser expl¨ªcito -sin tapujos, no an¨®nimo en el pie de firma del art¨ªculo- de mi condici¨®n de delegado de Medio Ambiente de la Junta de Andaluc¨ªa. Adem¨¢s, ahora que lo pienso, creo que deb¨ª haber incluido la de miembro de la Comisi¨®n Provincial de Urbanismo, pues ambas atalayas me han proporcionado durante a?os ser testigo privilegiado y sufridor de ese idilio PP-GIL, as¨ª como de la incomprensible actitud del PP ante el monstruoso planeamiento planteado por Jes¨²s Gil en Marbella.
Lamento que lo que era un art¨ªculo de la reciente historia, meramente recordatorio en su cronolog¨ªa del idilio que siempre existi¨® entre el gilismo y el PP, lo tache el se?or Ram¨ªrez de "sectario que no se atiende a razones", cuando no entra a desmentir ni uno s¨®lo de la abrumadora bater¨ªa de hechos que aport¨¦ en la narraci¨®n del mismo.
M¨¢s que amnesia, reviso lo dicho en mi art¨ªculo citado a ra¨ªz de lo publicado por el se?or Ram¨ªrez, hablar¨ªa de la alergia y el desprecio que el PP siempre ha mostrado por la historia -no me refiero a lo de pasar de puntillas por el franquismo-, tambi¨¦n en este caso de Marbella. A fin de cuentas, para el PP lo m¨¢s relevante de la historia de Espa?a -desde la aparici¨®n del homo sapiens hasta nuestros d¨ªas- comienza en 1996, primer a?o triunfal del se?or Aznar; intimidando entonces en catal¨¢n no a¨²n con acento texano. Eso s¨ª, con per¨ªodos hist¨®ricos inexistentes para el PP -en el caso de Marbella, desde 1991 hasta el 2003-; o a nivel nacional los meses transcurridos desde que estall¨® la crisis ambiental del Prestige, l¨®gicamente haciendo salvedad del par¨¦ntesis de la ma?ana en que en Santiago de Compostela se medalle¨® al se?or Cascos por la ¨®ptima gesti¨®n que hizo de la crisis del chapapote y donde aprovech¨® Don Manuel Fraga para piropearlo como "el mejor ministro de infraestructuras que ha tenido la humanidad". A este paso est¨¢ claro que otras condecoraciones est¨¢n en marcha para el se?or Cascos: una al m¨¦rito AVE Madrid-Lleida, y otra por su generosa exclusividad con la fotocopiadora MIC, olvido y casualidad que trae de cabeza al pupilo del sucesorio se?or Rato y presidente del PP de Madrid, se?or De Tejada.
?Ser¨¢n ¨¦stos los pr¨®ximos insultos que el PP est¨¢ preparando a nuestras inteligencias?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.