Un elefante ante una hormiga

?Tour? ?Qu¨¦ Tour? La noche frente al d¨ªa. Un elefante ante una hormiga. Los t¨®picos se quedan cortos. El Tour femenino ni siquiera se llama as¨ª: no puede utilizar el nombre de su hom¨®nimo desde que hace 12 a?os su promotor decidi¨® excluir a las ciclistas -corr¨ªan antes que los hombres- para aligerar la gigantesca organizaci¨®n de un imperio sobre ruedas. El Boucle femenino, que seguramente se adjudicar¨¢ ma?ana Joane Somarriba, que ayer se distanci¨® dos segundos m¨¢s de la suiza Nicole Brandly, apenas resiste comparaci¨®n con el de la vuelta masculina. S¨®lo en algo: en sufrimiento. Caras de agotamiento, muecas de hast¨ªo. Dos horas despu¨¦s de concluir la etapa de ayer, de 128 kil¨®metros, el Bizkaia esperaba que Pierre Bouie, el director de la carrera, resolviese entre aspavientos el problema del alojamiento: un colegio de Flers, a unos 70 kil¨®metros, cerca del mont Saint Michael, sin comida, s¨¢banas y con una ¨²nica ducha.

"?Diferencias? Pon todas. Son mundos opuestos. Aqu¨ª las chicas, en organizaci¨®n, vienen con lo puesto. Esto es peor que cualquier prueba profesional en Espa?a. Y el Tour es organizaci¨®n, la gran olimpiada del ciclismo, un show, un gran negocio", explicaba ayer, en Angers, Ramontxu Gonz¨¢lez Arrieta, el marido de Joane, que corri¨® cuatro Tours, dos de ellos con Miguel Indur¨¢in, mientras los mec¨¢nicos repasaban las bicicletas frente al hotel. Las diferencias son como resolver un pasatiempo de ant¨®nimos: el Tour mueve a diario a 6.000 personas y el femenino a 300; 200 ciclistas frente a 70; 2.000 periodistas frente a seis; carreras en directo que atraen la atenci¨®n de medio planeta ante noticias breves en la televisi¨®n del diario franc¨¦s L'Equipe; 18 millones de euros de presupuesto ante 1; 300.000 euros para el ganador frente a 3.000. Una fiesta nacional que paraliza ciudades y una carrera que ameniza las tardes en pueblos que a veces no salen ni en los mapas.

Llega y se va sin dejar ni rastro. Gorr¨®n aplaudi¨® con entusiasmo a las ciclistas y acto seguido una banda de m¨²sicos empez¨® a ensayar en un polideportivo mientras el Banesto aguardaba alojamiento. Francia ignora esta carrera. Todo es distinto salvo en lo b¨¢sico: el esfuerzo de correr 1.288 kil¨®metros en dos semanas. "Los hombres har¨¢n 3.500 en tres, pero lo tienen todo en bandeja", apunta Gonz¨¢lez Arrieta. No hay nada que irrite m¨¢s a una ciclista que el argumento de que ellos corren etapas m¨¢s largas. Ni siquiera se defienden con que la naturaleza es distinta, sino que aluden a los medios. Menos masajistas, menos mec¨¢nicos. No van en autocares de lujo, con duchas y literas, y a veces tienen que cambiarse en la calle. O como ayer Joane, que, a punto de coronarse en Par¨ªs por tercera vez, tuvo que recibir el masaje, la v¨ªspera de la contrarreloj, en la caravana del equipo.

Clasificaci¨®n. 12? etapa: 1?. Zoulfia Zabirova, 3h 58m 24s. 2?. Petra Rossner, mismo tiempo. 3?. Alison Wright, m.t. 18?. Joane Somarriba, m. t. Clasificaci¨®n general: 1?. Somarriba, 33h 25m 30s. 2? Brandly, a 2m 5s. 3?. Luperini, a 3m 44s. Hoy: 13? etapa: contrarreloj en Flers (36,2 km).