Marruecos dicta 4 penas de muerte y 37 cadenas perpetuas por los atentados de Casablanca
El tribunal de Casablanca dict¨® en la madrugada del lunes al martes cuatro penas de muerte en el juicio contra los culpables de la serie de atentados que golpearon la capital econ¨®mica de Marruecos el pasado 16 de mayo, y que se saldaron con 45 muertos, entre ellos cuatro espa?oles. Los condenados son tres terroristas suicidas que se echaron atr¨¢s en el ¨²ltimo momento y un cuarto implicado. La sentencia, que tambi¨¦n condena al resto de los integristas a duras penas de c¨¢rcel, muestra la voluntad de las autoridades marroqu¨ªes de endurecer la lucha contra radicales isl¨¢micos.
Desde el pasado 21 de julio, 87 supuestos miembros del movimiento integrista Salafia Yihadia se sentaron en el banquillo de los acusados en el marco del primer juicio por los atentados del 16 de mayo en Casablanca. Ese d¨ªa, la mayor ciudad de Marruecos fue el escenario de cinco atentados casi simult¨¢neos que causaron 45 muertos, entre ellos 12 terroristas suicidas, y un centenar de heridos. Los ataques con bombas, todos perpetrados cerca del centro de la ciudad, apuntaban al restaurante de la Casa de Espa?a, donde murieron la mayor¨ªa de las v¨ªctimas, el hotel Farah y un restaurante italiano frecuentados por extranjeros, as¨ª como al C¨ªrculo de la Alianza Israel¨ª. Entre los muertos hubo cuatro espa?oles, tres franceses y un italiano.
Desde entonces, 634 personas que pertenecen a grupos isl¨¢micos radicales han sido detenidas en el marco de la investigaci¨®n sobre los atentados. Las autoridades marroqu¨ªes apuntaron a dos peque?os grupos islamistas locales: Salafia Yihadia -un movimiento fundamentalista que recluta a sus militanets entre los j¨®venes desfavorecidos de suburbios como Sidi Moumen, en Casablanca, de donde provienen la mayor¨ªa de los terroristas suicidas- y Assirat al Mustakim
Los actos, afirma sin embargo Rabat, llevan la marca del terrorismo internacional que habr¨ªa utilizado estos grupos como autores materiales. Las duras condenas anunciadas por el tribunal de Casablanca parecen confirmar la voluntad de las autoridades marroqu¨ªes de llevar una guerra sin tregua contra el integrismo isl¨¢mico.
Estas sentencias se suman a las 10 condenas a muerte dictadas el pasado 12 de julio en un primer juicio contra integristas detenidos antes de los atentados, en el marco de una serie de asesinatos y agresiones.
M¨¢s all¨¢ de las condenas a muerte, este primer gran juicio contra el integrismo islamista en Marruecos ha sorprendido por la gran severidad de las penas dictadas contra todos los acusados. Los jueces anunciaron 37 cadenas perpetuas, 17 penas de 30 a?os de c¨¢rcel y 16 de 20 a?os. De los 87 acusados, s¨®lo dos se beneficiaron de una cierta clemencia, con 10 meses de c¨¢rcel. Entre los condenados a muerte est¨¢n los tres suicidas que renunciaron a actuar en el ¨²ltimo momento, en la noche de los atentados. Se trata de Mohamed el Omari, un guardia de noche de 23 a?os; Rachid Jalil, un soldador de 27, y Yassin Lahnech, un comerciante ambulante de 22.
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