Vacaciones sobre el tapiz

Tiene diecisiete a?os y un futuro prometedor dentro de la gimnasia r¨ªtmica. Jennifer Colino, natural de Torrevieja, forma parte de la selecci¨®n espa?ola desde hace dos a?os y durante esta etapa sus avances han sido mete¨®ricos. El pasado 4 de julio disput¨® el Campeonato de Espa?a y logr¨® una clamorosa victoria: qued¨® primera en la competici¨®n general, primera en maza y segunda en aro, pelota y cinta. Ahora centra sus esfuerzos en alcanzar la ansiada meta de una digna clasificaci¨®n en el Mundial que se celebra el mes que viene en Budapest. "Para m¨ª un buen resultado ser¨ªa un d¨¦cimo puesto ya que de este modo podr¨ªa asegurarme mi estancia en las Olimpiadas de Atenas del 2004. Si Espa?a quedase en un quinto o un sexto lugar en este mundial, habr¨ªa dos representantes en Atenas", explica Colino.

El est¨ªmulo que supone cumplir este ambicioso reto sirve de paliativo ante el sacrificio de tener que renunciar a su per¨ªodo de descanso. Salvo tres d¨ªas ef¨ªmeros de vacaciones en su ciudad "que aprovech¨¦ para estar con mi familia y mis amigos" se encuentra dedicada en cuerpo y alma a los entrenamientos, que absorben todas sus horas ¨²tiles al d¨ªa. La jornada en el centro de alto rendimiento de Madrid es intensiva y extenuante. Las pruebas comienzan a las nueve de la ma?ana y, tras un breve par¨¦ntesis para almorzar, retoman las clases hasta las tres de la tarde. El descanso para la comida es de apenas dos horas y el entrenamiento prosigue si interrupci¨®n hasta las diez de la noche. El ¨²nico aliciente despu¨¦s de esta agotadora jornada preparatoria es tener la certidumbre de que sus posibilidades de clasificarse para las Olimpiadas no son ilusorias. "El campeonato de Espa?a fue muy importante porque sirvi¨® de preludio para el Mundial", dice Jennifer Colino. "All¨ª no podemos permitirnos el lujo de cometer ning¨²n fallo y debemos probarnos encima del tapiz para ver c¨®mo nos sentimos. Yo me sent¨ª bastante bien", confiesa.

Sus esperanzas no son infundadas. La trayectoria que ha seguido desde que se adentr¨® en este mundo la avala. Ha sido campeona en todas las categor¨ªas en las que ha competido (tambi¨¦n en la de honor) y en los ¨²ltimos mundiales ha quedado en una decimotercera y d¨¦cima clasificaci¨®n, respectivamente. Sus expectativas consisten en repetir las marcas obtenidas hasta el momento en la cita ineludible a la que ha de asistir en septiembre en Budapest. "Llegar al p¨®dium en las Olimpiadas de 2004 es m¨¢s complicado porque desde la desintegraci¨®n de la URSS hay muchas gimnastas altamente cualificadas de los pa¨ªses del Este que elevan el list¨®n", reconoce Jennifer Colino. La rutina y la dureza de los entrenamientos en pleno est¨ªo, y en la urbe calcinada por el asfalto, s¨®lo se atempera de forma espor¨¢dica. Las concentraciones y campeonatos a los que se ha desplazado a lo largo del verano son un punto de inflexi¨®n y un acicate en la din¨¢mica de trabajo. "Me gusta m¨¢s competir que entrenar -agrega Jennifer- pero me anima pensar en las competiciones. Aunque entrenamos duro, se hace ameno por las frecuentes concentraciones a las que acudimos".