Borza se equivoca, ?y qu¨¦?
El temerario ruso, segundo en los 800 metros, tras el argelino Guerni
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Yuri Borzakovski, Borza, es la esperanza de un atletismo nuevo, probablemente despreciado por muchos entrenadores, que pretenden construir razas enteras de atletas cl¨®nicos, sin dejar el menor margen al riesgo, a la utop¨ªa, a la capacidad de producir fascinaci¨®n en la gente. Borzakovski es la reedici¨®n en ruso de David Whottle, el fugaz mediofondista estadounidense que gan¨® la prueba de 800 metros en los Juegos de M¨²nich. Como Whottle, el atleta ruso se permite ceder diez metros a sus rivales en los primeros 300 metros de la carrera. Luego remonta entre el fervor de la gente, que no sabe si aplaudir m¨¢s la temeraria t¨¢ctica de Borzakovki o su formidable galope para superar adversarios. En cualquier caso, genera incertidumbre y expectaci¨®n, cosa cada vez menos habitual en estos tiempos de cl¨®nicos.
Naturalmente Borzakovski es proclive al error. A veces concede ventajas que no puede reparar. En otras, se encuentra sin las fuerzas necesarias para estar a la altura de sus concesiones. Ayer calcul¨® mal. As¨ª de simple. Se equivoc¨® en el momento de su ataque y lo pag¨® en la recta final, donde se fundi¨®. A dos metros de la l¨ªnea fue superado por el argelino Said Guerni. Detr¨¢s de ambos entr¨® una colecci¨®n de vacas sagradas: el surafricano Mulaoudzi, el dan¨¦s Wilson Kipketer, el italiano Andrea Longo, protagonistas de la prueba con m¨¢s talento global de los Mundiales.
El error de Borza no residi¨® en los metros que concedi¨® en el arranque de la carrera. No fueron muchos, ni irreparables. Entr¨® en el grupo poco antes de completar la primera de las dos vueltas, y all¨ª comenz¨® a superar a los dem¨¢s. Su equivocaci¨®n fue lanzar el ataque decisivo a casi 300 metros de la llegada. Le sobr¨® carrera y le faltaron fuerzas. Si hubiera esperado al inicio de la ¨²ltima curva, no se le habr¨ªa escapado la victoria, pero con Borza nunca se sabe lo que va a hacer. Es un estupendo enigma que no pasa inadvertido a los aficionados. Saben que es un atleta diferente y eso le hace ¨ªdolo. No como otros, como los robots que tanto abundan.

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