Nicaragua investiga la adopci¨®n irregular de cinco ni?os por familias espa?olas
La Embajada en Managua detect¨® los hechos y rechaz¨® legalizar los prohijamientos
Cinco ni?os nicarag¨¹enses de entre cinco y doce a?os residen de forma irregular con tres familias espa?olas. La Embajada en Managua rechaz¨® legalizar sus adopciones, solicitadas cuando los peque?os ya estaban en Espa?a, por considerarlas fraudulentas. La Fiscal¨ªa de Menores de Badajoz estudia uno de los casos y se ha puesto en contacto con el Tribunal Superior de Justicia de Baleares, donde residen los otros cuatro ni?os, hermanos. Las familias afectadas defienden su inocencia. "Pensamos que todo era legal", afirman. Las autoridades nicarag¨¹enses investigan la presunta falsificaci¨®n de documentos y el papel "sospechoso" de una autoridad judicial local.
Las autoridades espa?olas y nicarag¨¹enses han comenzado a investigar la situaci¨®n irregular de los cinco menores, sobre la que alert¨® la Embajada de Espa?a en Managua. La legaci¨®n comenz¨® a actuar en septiembre del a?o pasado, cuando un abogado nicarag¨¹ense intent¨® legalizar la adopci¨®n de cuatro hermanos (nacidos entre 1991 y 1998). Para ello aport¨® un contrato hecho ante notario seg¨²n el cual los padres ced¨ªan la patria potestad de los cuatro hermanos a una persona residente en Baleares, seg¨²n informa la Oficina de Informaci¨®n Diplom¨¢tica (OID). Los ni?os ya se encontraban en Espa?a.
El abogado pretend¨ªa que el c¨®nsul inscribiera ese contrato notarial en el Registro Civil espa?ol. El diplom¨¢tico se neg¨®, ya que la legislaci¨®n espa?ola proh¨ªbe las cesiones de patria potestad hechas de forma privada y sin la intervenci¨®n de un juez. Adem¨¢s, en Nicaragua (uno de los pa¨ªses m¨¢s pobres de Am¨¦rica) existe una moratoria para las adopciones internacionales desde 1997. Seg¨²n su legislaci¨®n, para la adopci¨®n o el acogimiento es preciso el abandono previo del menor.
El mismo abogado
En febrero de este a?o, el mismo abogado acudi¨® de nuevo a la embajada para legalizar otra cesi¨®n de patria potestad hecha ante notario, seg¨²n la OID. Se trataba de la de una ni?a (nacida en 1997) en favor de una familia residente en Extremadura con la que ya conviv¨ªa. El c¨®nsul se neg¨® y advirti¨® de la situaci¨®n a las autoridades espa?olas y nicarag¨¹enses.
En Nicaragua, la Polic¨ªa Nacional, el Ministerio de la Familia y el Ministerio P¨²blico (Fiscal¨ªa) han tomado cartas en el asunto. Seg¨²n el Procurador especial de la Ni?ez, Carlos Emilio L¨®pez, "es evidente que hay irregularidades administrativas y legales en la forma en que los ni?os salieron del pa¨ªs". Los cinco peque?os proceden de la provincia nicarag¨¹ense de Le¨®n. Seg¨²n el Procurador, un juez local de un municipio de esa provincia "autoriz¨® la salida y decret¨® quitar la guarda y custodia de los ni?os a los padres". "Es sospechoso que esa misma autoridad judicial haya viajado a Espa?a. Presumimos serias violaciones a los derechos de la ni?ez", a?ade.
Los primeros menores llegaron a Baleares en diciembre de 1998, poco despu¨¦s de que el hurac¨¢n Mitch arrasara buena parte de Nicaragua. Se trataba de cinco ni?os (una beb¨¦, una ni?a de a?o y medio, otra de cuatro, un ni?o de siete y una ni?a de 10). Viajaban acompa?ados de su madre y de una empresaria de Baleares. Esta ¨²ltima, que pide silenciar su nombre, hab¨ªa acudido como voluntaria al pa¨ªs centroamericano tras el desastre. "Un sacerdote me pidi¨® que ayudara a la madre y a los ni?os, que estaban en una situaci¨®n terrible, y que me los trajera a Espa?a", relata. "Le ped¨ª que todo fuera legal. Yo pensaba dar empleo a la madre en mi negocio y ayudarla a sacar adelante a sus hijos", a?ade. La voluntaria ten¨ªa un documento notarial por el que los padres de los ni?os le conced¨ªan a ella "el cuidado, crianza, educaci¨®n y representaci¨®n" de los cinco menores. Al cabo de unos d¨ªas, la madre decidi¨® volver a Nicaragua con las dos ni?as mayores y se neg¨® a llevarse a los otros tres, seg¨²n el relato de la voluntaria. "Me tuve que encargar de ellos. Ven¨ªan en muy malas condiciones. Los mayores, llenos de cicatrices. Para atenderlos tuve que vender mi negocio", relata la mujer. Entonces pidi¨® al sacerdote que legalizara la cesi¨®n de la custodia de los tres peque?os. Recibi¨® ese acta notarial en 1999. Lleva el sello del Ministerio de Relaciones Exteriores, de la Corte Suprema de Nicaragua y una p¨¢gina grapada con un sello de la Embajada de Espa?a.
Segundo viaje
En 2002, la empresaria volvi¨® al pa¨ªs centroamericano para una tarea de cooperaci¨®n en el pueblo de los menores, Quezalguaque. Seg¨²n su relato, la mayor de las ni?as que hab¨ªa regresado con su madre le pidi¨® que se llevara de nuevo a Espa?a a la m¨¢s peque?a porque la cr¨ªa, de seis a?os, trabajaba de criada y sufr¨ªa abusos, afirma la voluntaria. Por indicaci¨®n de la juez local, una abogada acompa?¨® en el viaje a la peque?a, que fue acogida en Baleares por un matrimonio amigo de la empresaria, explica ¨¦sta. A?ade que esa pareja dispone de un documento de cesi¨®n similar al suyo.
Poco despu¨¦s, la juez de Quezalguaque alert¨® a la cooperante de que otra ni?a (de la ciudad de Le¨®n) se encontraba en mala situaci¨®n. Por un amigo com¨²n, la empresaria contact¨® con un matrimonio extreme?o deseoso de adoptar. La juez y un notario nicarag¨¹ense trajeron a la ni?a a Extremadura en septiembre de 2002. "Ellos nos aseguraron que todo era legal", dice la pareja que se hizo cargo de la ni?a. El documento que les otorga la custodia lleva el sello del Ministerio de Relaciones Exteriores y de la Corte Suprema.
Las familias niegan que se les haya pedido dinero a cambio de los ni?os y aseguran que actuaron de buena fe, con la creencia de que todo era legal.
En manos de los fiscales
La Fiscal¨ªa de Menores de Badajoz, alertada por la Junta de Extremadura, ha abierto un expediente de protecci¨®n para determinar la situaci¨®n de la peque?a nicarag¨¹ense que convive con un matrimonio extreme?o. Ha constatado que la menor se encuentra bien atendida, seg¨²n fuentes de la Fiscal¨ªa pacense. La pareja ya ha prestado declaraci¨®n.
En la Fiscal¨ªa de Badajoz a?aden que el encargado del caso ha enviado un escrito a la Fiscal¨ªa del Tribunal Superior de Justicia de Baleares para que averig¨¹e la situaci¨®n de los otros cuatro hermanos nicarag¨¹enses que residen en esa comunidad.
Por su parte, el padre de los cuatro ni?os, Hilario Manuel P., denunci¨® el pasado 13 de agosto ante la polic¨ªa que sus hijos y su esposa, Isabel H., hab¨ªan viajaron a Espa?a en diciembre de 1998 con dos mujeres espa?olas. A?adi¨® que, 15 d¨ªas despu¨¦s, la madre regres¨® sin los ni?os, seg¨²n el diario nicarag¨¹ense La prensa.
El padre justific¨® el retraso de cuatro a?os en denunciar lo ocurrido con el argumento de que consider¨® que sus hijos estar¨ªan mejor cuidados en el extranjero. Seg¨²n el diario, el padre y la madre tienen antecedentes con la justicia.
Aunque las autoridades espa?olas consideran que se trata de casos aislados, el c¨®nsul de Espa?a en Nicaragua, Manuel Selas, afirma: "Ignoramos si hay m¨¢s menores en esta situaci¨®n, pero sospechamos que no son los ¨²nicos casos". La legaci¨®n ha informado a Iberia y la compa?¨ªa a¨¦rea, seg¨²n Selas, ya ha rechazado diversos embarques de menores nicarag¨¹enses en los ¨²ltimos tiempos.
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