Amas de llave clandestinas
El sector englobado bajo la denominaci¨®n de servicio dom¨¦stico -que agrupa un abanico de trabajos muy diversos; desde la limpieza de hogares, la atenci¨®n de personas mayores, el acompa?amiento de personas enfermas o desvalidas, el cuidado de ni?os o las labores dom¨¦sticas- es ejercido b¨¢sicamente por mujeres inmigrantes sin papeles.
Estas actividades, que incluye tambi¨¦n otras como la limpieza de oficinas, industrias, veladores de enfermos en hospitales y paseo de ancianos, dan empleo a mujeres latinoamericanas, singularmente a ecuatorianas y colombianas. "Este sector se ha revelado en un refugio para mujeres sin papeles por las caracter¨ªsticas de los lugares de trabajo, ajenos a cualquier inspecci¨®n", se?ala el experto. Las suramericanas han desplazado a las f¨¦minas de origen marroqu¨ª y argelino especialmente, seg¨²n Carlos G¨®mez, tras los acontecimientos del 11 de septiembre, a partir de cuando se constata un mayor rechazo hacia este colectivo.
El soci¨®logo advierte que la amplia demanda de trabajadoras inmigrantes para el servicio dom¨¦stico en Alicante, Valencia y Castell¨®n ha propiciado, en los ¨²ltimos tiempos, la aparici¨®n de un "lucrativo" negocio con el resurgimiento de empresas que se aprovechan del vac¨ªo legal de esta rama. El otro sector que emplea a mujeres inmigrantes, aunque en mucha menor cuant¨ªa que el dom¨¦stico, es el agr¨ªcola. Este sector ha perdido peso econ¨®mico por lo que su "abandono" por amplias capas de la sociedad se ha suplido, seg¨²n el especialista, con mano de obra femenina extranjera para determinadas zonas y cultivos. Un caso paradigm¨¢tico es la comarca de la Vega Baja: la agricultura intensiva de invernadero y tambi¨¦n, en menor medida, la recogida de c¨ªtricos, oliva, n¨ªspero, almendra y cereza es llevado a cabo por mujeres extranjeras indocumentadas. Seg¨²n este informe, los trabajos a cubierto, en el interior de naves, son realizados mayoritariamente por mujeres bajo la supervisi¨®n de hombres.
Carlos G¨®mez subraya que la temporalidad de estas labores a?ade una mayor precariedad y desarraigo. "Estas mujeres tienen unas condiciones de trabajo duras que tienen que compatibilizar con sus hogares, con unos salarios por debajo de lo estipulado y en situaciones de precariedad extrema", apostilla. "A mayores vacantes, m¨¢s demanda de trabajadores inmigrantes llevando a la baja salarios y condiciones de trabajo", comenta G¨®mez que detecta c¨®mo los trabajadores inmigrantes en esta situaci¨®n compiten entre ellos por ocupar los mismos puestos de trabajo.
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