"?Apedreamiento m¨²ltiple a una compa?era!"

"?Apedreamiento m¨²ltiple a una compa?era en grada 20!", tron¨® la emisora de la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta.

- "No le copio bien, ?quiere decir que le han arrojado bastantes piedras?", replic¨® el operador al guardia informante.

- "Afirmativo, varias le han impactado en el cuerpo y se ha tenido que meter en el agua, por el espig¨®n".

- "No le copio bien. ?De d¨®nde le han tirado las piedras?", insisti¨® el operador.

- "Los de los bultos, los de los bultos, que est¨¢n por la playa, est¨¢n entrando por el agua, por la playa", contest¨® el guardia.

La conversaci¨®n data del 21 de agosto, pero valdr¨ªa casi para cualquier d¨ªa, porque los guardias que custodian el per¨ªmetro fronterizo de Ceuta y los pasos de Benz¨² [grada 20 es el nombre en clave de una de las garitas de esta aduana] y El Tarajal denuncian que a diario se ven en un trance similar. "No pasa un d¨ªa sin que nos tiren piedras, nos disparen con balines o nos arrojen ruedas ardiendo, pero lo ¨²nico que se cuenta es que uno de los nuestros ha sacado el arma o, como el 20 de agosto, que un porteador pierde un ojo por un pelotazo de goma nuestro", explican fuentes de la Asociaci¨®n Unificada de Guardias Civiles (AUGC).

Lo ocurrido ese d¨ªa 20 en Benz¨² evidencia la tensi¨®n fronteriza en Ceuta, parte de cuya econom¨ªa depende de las compras de los porteadores marroqu¨ªes que entran y salen a diario, legal o ilegalmente. Ese d¨ªa, los agentes se sintieron "apabullados por una avalancha de m¨¢s de 300 personas en la frontera de Benz¨²".

La comandancia autoriz¨® a los guardias a "emplear medios", lo que en el argot interno quiere decir que se utilice material antidisturbios. Un pelotazo impact¨® de lleno en un ojo de A. E. B, de 46 a?os. "Y eso es lo que luego se cuenta, pero de nuestra falta de medios, de efectivos, de las avalanchas y de los apedreamientos diarios no habla nadie", aseguran.

La mayor¨ªa de las agresiones se producen en los pasos fronterizos, pero donde m¨¢s menudean es en el Tarajal. "Hace unos d¨ªas, un compa?ero de los GRS (Grupos Rurales de Seguridad) subi¨® corriendo al barrio para intentar ver qui¨¦nes tiraban las piedras", relata uno de los agentes fronterizos, "y cuando lleg¨® se encontr¨® como una especie de trinchera excavada desde donde nos lanzaban las piedras casi sin que los pudi¨¦ramos ver".

Los ejemplos de enfrentamientos son innumerables: el martes 19 de agosto, un veh¨ªculo Nissam que custodiaba el autob¨²s con el que se traslada a los relevos de las garitas del Tarajal recibi¨® el impacto de una rueda de tractor ardiendo; el lunes d¨ªa 25, el mismo autob¨²s recibe varios impactos de balines; al d¨ªa siguiente, una avalancha de 40 porteadores sobrepasa a una patrulla de dos agentes, pero antes, una botella impacta contra uno de ellos; el 29 de agosto les lanzaron dos latas de cerveza llenas y ocho o nueve piedras. No hubo heridos. "?Cob¨ªjense!", fue la orden que recibieron los agentes por el radiotransmisor.

"Los guardias est¨¢n hartos, cada vez viene menos gente a Ceuta voluntariamente, aunque paguen m¨¢s que en la Pen¨ªnsula, porque se est¨¢ corriendo la voz de que aqu¨ª...". Unos 80 agentes han pedido cambio de destino, seg¨²n AUGC. La Comandancia de Ceuta, con unos 500 efectivos, mantiene al corriente de los incidentes a la Delegaci¨®n del Gobierno y a su propia Direcci¨®n General. Fuentes de ¨¦sta han admitido los problemas con los que se encuentran los guardias de la frontera.

Pero los agentes consultados a?aden algo m¨¢s. Explican que se ha creado una red "impresionante" de porteadores que diariamente atraviesan la frontera "nadando por el mar, bordeando el espig¨®n que marca la frontera territorial", y c¨®mo tambi¨¦n existen grupos de "lanzadores" de mercanc¨ªas por encima de los per¨ªmetros de las vallas que bordean la frontera, especialmente por la barriada del Pr¨ªncipe Alfonso, donde las fuerzas de seguridad se sienten inseguras. Un agente relata c¨®mo el 13 de agosto ¨¦l y su compa?ero fueron intimidados directamente por un "jefecillo mafioso del barrio" para que abrieran la mano. "Nos amenaz¨® con echarnos a todo el barrio encima".

"Esto lo sabe todo el mundo aqu¨ª, pero lo que no se sabe es que el control del trasiego de mercanc¨ªas depende de si los comerciantes del Tarajal se quejan o no: si se quejan lo sabemos r¨¢pido porque recibimos una orden verbal de aflojar la presi¨®n, de bajar el pist¨®n, de dejar pasar mercanc¨ªas", explican. Ni una sola fuente oficial ha confirmado este extremo.

Los agentes, cuando ven que al otro lado de la frontera empiezan a acumularse porteadores, recurren a los "mejanis", los gendarmes de Marruecos. "Pero eso no sirve para nada en la mayor¨ªa de los casos, porque muchos de ellos est¨¢n conchabados con los porteadores y vemos c¨®mo les cobran", relata otro guardia. Y mientras, los incidentes se suceden.

- "Grada 20, baja al esping¨®n y echa a esa gente para atr¨¢s, y si les tiran piedras grandes, emplee medios por si quieren saltar", ordena el operador a trav¨¦s de la emisora.

- "?Se nos est¨¢n metiendo, se nos est¨¢n metiendo!", replica el agente desde su radio de bolsillo.

- "?Por tu derecha se cuelan!", informa otro guardia.

- "Le participo un 115 [100 quiere decir marroqu¨ªes y 15 el n¨²mero de personas que intentan cruzar] que han pasado de Marruecos y est¨¢n en la playa: intereso si puede darse una vuelta la goma [una zodiac del instituto armado]".

- "Llamo su atenci¨®n de que en ese punto est¨¢n tirando piedras, mire y cuide las c¨¢maras [de vigilancia e infrarrojas] y el vallado [del per¨ªmetro, que ha costado 10.000 millones de pesetas]", reclama la central.

- "?Nos est¨¢n tirando piedras, nos arrojan piedras!", clama un agente.

- "?Qu¨ªtense de enmedio".

Era el 27 de agosto.