El ex jefe de Eurostat asegura que la Comisi¨®n conoc¨ªa sus auditor¨ªas
Franchet desmiente a Bruselas y da un giro en el esc¨¢ndalo de la oficina
Yves Franchet, ex director general de Eurostat destituido en mayo tras descubrirse una doble contabilidad en esa oficina estad¨ªstica europea, desminti¨® ayer a trav¨¦s de sus abogados la reiterada insistencia de la Comisi¨®n de que hasta la primavera no conoci¨® las irregularidades. "Las auditor¨ªas internas [hechas cada a?o entre 1998 y 2001] fueron enviadas a los servicios centrales de control de la [actual] Comisi¨®n Europea desde el comienzo de 2000", afirma Franchet.
Las afirmaciones suponen un giro en el esc¨¢ndalo, que salpica al menos a los comisarios Pedro Solbes, de Asuntos Econ¨®micos; Michaele Schreyer, de Presupuestos, y Neil Kinnock, de Personal. "La Comisi¨®n no ha descubierto la gesti¨®n de Eurostat en mayo de 2003", a?ade. Hasta ahora, la posici¨®n oficial del Ejecutivo comunitario ha sido doble al repetir que no tuvo conocimiento de lo que ocurr¨ªa en Eurostat hasta mayo pasado y que, si hubo irregularidades, se cometieron antes del invierno de 1999, ¨¦poca en que inici¨® su mandato la actual Comisi¨®n.
Laure Levi y Georges Vandersanden, los dos abogados belgas encargados de la defensa de Franchet, aseguran que las acusaciones difundidas hasta ahora (cuentas ocultas, contratos ficticios, caja B...) proceden precisamente de las auditor¨ªas internas que cada a?o encarg¨® ¨¦l mismo en la oficina que dirig¨ªa desde 1998 a 2001 y que despu¨¦s remit¨ªa "a los servicios centrales", es decir, seg¨²n fuentes de la propia Comisi¨®n, a la direcci¨®n de Control Financiero. "Pero no", agregan esas fuentes, "a los servicios del comisario Pedro Solbes", de quien depend¨ªa jer¨¢rquicamente Eurostat.
El env¨ªo de esas auditor¨ªas no fue seguido por la Comisi¨®n de "ning¨²n comentario ni petici¨®n de explicaciones", aseguran los abogados de Franchet. No s¨®lo eso. El ex jefe de Eurostat, siempre a trav¨¦s de los citados letrados, agrega: "Cada a?o, la Comisi¨®n aprob¨® el programa de trabajo [de Eurostat] y sus presupuestos; cada a?o rechaz¨® las peticiones de puestos de trabajo suplementarios, lo que condujo a externalizar determinadas labores; todas las licitaciones de Eurostat para trabajar con empresas externas fueron aprobadas por el servicio competente de la Comisi¨®n y Control Financiero que aprob¨® los pagos a esas empresas".
Pero no s¨®lo la Comisi¨®n estaba al tanto de lo que ocurr¨ªa en Eurostat, seg¨²n los abogados de Franchet, sino que algunas de sus pr¨¢cticas puestas ahora en entredicho tambi¨¦n eran sabidas en los institutos nacionales de estad¨ªstica de los Quince. "La externalizaci¨®n de trabajos de Eurostat se realiz¨® en estrecha asociaci¨®n con los institutos nacionales y p¨²blicos de los pa¨ªses miembros". Se refiere as¨ª Franchet, entre otros, a los contratos de Eurostat con Planistat, la empresa privada francesa que, por ejemplo, explotaba comercialmente los datos de Eurostat al menos en Espa?a, B¨¦lgica y Luxemburgo en estrecha colaboraci¨®n con los institutos de estad¨ªstica.
Franchet no niega que en el pasado, y concretamente antes de 1999, se hayan producido algunas irregularidades de gesti¨®n para paliar los escasos medios humanos y presupuestarios que ten¨ªa Eurostat, pero s¨ª hace hincapi¨¦ en que "hasta el momento no se ha aportado prueba alguna de fraude o corrupci¨®n en Eurostat" y que ninguna de las auditor¨ªas anuales realizadas y enviadas a la Comisi¨®n permite concluir que se hayan producido "desviaciones de fondos comunitarios hacia fines no relacionados con las funciones de Eurostat, ni mucho menos hacia el enriquecimiento de funcionarios".
Derecho conculcado
Pero tanto Franchet como su adjunto, Daniel Byk, igualmente destituido en mayo, afirman que su derecho fundamental a la defensa est¨¢ siendo conculcado porque ni la Comisi¨®n ni la Oficina Europea contra el Fraude (OLAF), que investiga los hechos desde 2000, les han dado la oportunidad de exponer su versi¨®n de los hechos. Por eso, se quejan de que la OLAF haya transmitido a los jueces de Par¨ªs datos sobre presuntos graves delitos cometidos en Eurostat sin que hasta ahora se les haya informado oficialmente de tales acusaciones pese a haberlo solicitado.
Como conclusi¨®n, los dos abogados afirman que sus dos clientes est¨¢n siendo tratados como "v¨ªctimas expiatorias por hechos que no han cometido" y sometidos a un "linchamiento pol¨ªtico-medi¨¢tico" por errores que en la gesti¨®n de esta crisis est¨¢n cometiendo, insin¨²an, la Comisi¨®n y la OLAF.
En estos momentos hay tres investigaciones sobre Eurostat en marcha: una auditor¨ªa, la que realiza la Comisi¨®n, y la de la OLAF.
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