?Vaya plan!
Altadis tiene un plan. En beneficio propio, por supuesto. No le habr¨¢ inquietado, pero el lunes miles de personas al grito de "Carmen somos todos", se echaron a la calle en solidaridad con los trabajadores, fundamentalmente trabajadoras, que se manifestaban contra el "plan industrial" de Altadis, que en realidad es un plan "desindustrializador" teniendo en cuenta que proyecta el cierre en 2005 de la F¨¢brica de Sevilla, esa que inmortalizaran M¨¦rim¨¦e y Bizet, y una seria reducci¨®n de puestos de trabajo en la de C¨¢diz.
Argumentan los cerebros del plan que es consecuencia de la ca¨ªda de las ventas de cigarrillos negros que, curiosamente, seg¨²n denuncian los trabajadores, se van a seguir fabricando en Marruecos. No es excesivo sospechar que se har¨¢ as¨ª porque los costes de personal ser¨¢n mucho menores. El capital tambi¨¦n emigra, en busca de mayor rendimiento all¨ª donde pueda arriesgar menos. Al contrario que las personas, el capital no tiene problemas para traspasar cualquier frontera y encontrar buen recibimiento y acomodo all¨ª donde todav¨ªa hay margen para la explotaci¨®n de las personas. Altadis, con el consentimiento del Gobierno, cierra en Sevilla, y en C¨¢diz reduce personal. Como hacen las multinacionales esas cosas, sin m¨¢s alma ni m¨¢s preocupaci¨®n que ninguna. Porque lo malo de los planteamientos empresariales en t¨¦rminos exclusivamente de cuenta de resultados es que ven a las personas como elementos susceptibles de ser eliminados del cap¨ªtulo de costes. Ya s¨¦ que muchos pensar¨¢n despectivamente que esto que mantengo es filosof¨ªa de ONG. Y seguramente lo sea, lo que no quiere decir que no responda a una verdad objetiva, tan verdad como que, cuando la carrera de las privatizaciones comenz¨®, empezamos a temernos lo peor y lo peor ya ha llegado: esa pol¨ªtica, que ha sido febril y desenfrenada en los ¨²ltimos a?os, nos ha dejado sin patrimonio, nos los han vendido y, por cierto, no siempre al mejor postor, para m¨¢s agravio. Y, por si eso fuera poco, los compradores no han tenido ning¨²n inconveniente en echar a la calle a la gente que han cre¨ªdo necesaria para que sus cuentas salgan. Ah¨ª est¨¢ esa realidad ahora con el plan industrial de Altadis, que tambi¨¦n son ganas de llamar a las cosas por otro nombre del que se merecen. Un plan que dejar¨¢ a Sevilla y C¨¢diz sin 423 empleos. ?Vaya plan!
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