Un estudio revela que las mujeres con empleo temporal son las que tienen menos hijos

La inestabilidad en el empleo pasa factura a la natalidad. Las mujeres con trabajo temporal son las que tienen menos hijos (una media de 0,65), por debajo incluso de las paradas (0,84). As¨ª lo establece un estudio sobre la conciliaci¨®n de la vida familiar y laboral realizado por investigadores del CSIC y la Universidad Complutense. La mayor fecundidad se da entre amas de casa (1,95) y trabajadoras aut¨®nomas (1,45), lo que demuestra que la disponibilidad de tiempo y la flexibilidad de horario favorecen la natalidad, seg¨²n los autores del estudio.

Los primeros resultados del proyecto de investigaci¨®n Familia y Trabajo ?dos aspectos reconciliables o irreconciliables en la sociedad espa?ola? revelan el fuerte peso de lo laboral a la hora de tener hijos. El informe, financiado por el Plan Nacional de Investigaci¨®n, analiza la Encuesta Nacional de Fecundidad de 1999, a la que contestaron casi 8.000 mujeres en edad f¨¦rtil (de 15 a 49 a?os). En aquel sondeo del Instituto Nacional de Estad¨ªstica, casi una de cada cuatro (el 23%) asegur¨® que ten¨ªa menos hijos de los que deseaba, sobre todo por falta de recursos, y el 46% no ten¨ªa.

Los expertos examinan ahora qu¨¦ factores facilitan o impiden la descendencia deseada. Consideran que desde mediados de los a?os 70 el promedio de hijos por mujer ha bajado del 2,8 al 1,2 actual, lo que sit¨²a la fecundidad espa?ola entre las m¨¢s bajas de la UE. En ese periodo se dispar¨® la ocupaci¨®n femenina. "Adem¨¢s del empleo, el nivel educativo de las mujeres y el tipo de vivienda tienen una influencia notable", explica la directora del trabajo, Margarita Delgado, del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC). El equipo lo integran adem¨¢s los investigadores Laura Barrios (del mismo organismo) e In¨¦s Alberdi y Francisco Zamora, de la Universidad Complutense.

- M¨¢s precariedad, menos hijos. "La inestabilidad laboral se revela como factor determinante a la hora de tener hijos", se?ala Delgado. Los datos son contundentes: las que tienen un trabajo temporal son las que menos procrean. Tienen una media de 0,65 hijos, inferior incluso a las paradas, con media de 0,84 (v¨¦ase el gr¨¢fico).

- Horario flexible, una ventaja. Entre las mujeres con empleo, las que tienen m¨¢s hijos son aqu¨¦llas que trabajan como aut¨®nomas (1,45). "Ese tipo de empleo permite mayor flexibilidad de horarios. Esto facilita tener hijos porque se puede organizar mejor el tiempo para atenderlos", explica Delgado. Las mujeres con contrato fijo tienen 1,07. "Las trabajadoras por cuenta ajena son las que tienen m¨¢s dificultad para compaginar los horarios laborales con las necesidades y ritmos familiares", apunta la directora.

- Amas de casa, m¨¢s prol¨ªficas. Las mujeres que se dedican a las labores del hogar son las que tienen m¨¢s hijos, una media de 1,95. Los investigadores tambi¨¦n han estudiado el nivel de fecundidad seg¨²n la situaci¨®n laboral de los maridos o compa?eros (v¨¦ase gr¨¢fico). Concluyen que las parejas con menos hijos por t¨¦rmino medio son las de empleados temporales (0,72). Las m¨¢s prol¨ªficas son las de ama de casa y desempleado, aunque el paro puede ser una situaci¨®n sobrevenida.

"Sin embargo, es m¨¢s determinante la ocupaci¨®n de la mujer, que es la que gobierna su fecundidad", se?ala Delgado. Al margen de cu¨¢l sea la ocupaci¨®n femenina, la media total de hijos por mujer es de 1,07, seg¨²n la encuesta. Entre las mujeres con pareja se eleva hasta 1,40 y entre las que est¨¢n solas se reduce al 0,22.

- M¨¢s estudios, menos embarazos. Hay relaci¨®n directa entre el nivel de estudios y la descendencia. A mayor formaci¨®n de la mujer, m¨¢s retraso en la llegada de los hijos. La demora provoca un menor n¨²mero de v¨¢stagos, ya que el tiempo f¨¦rtil para buscar el embarazo se reduce. Las universitarias son las que m¨¢s retrasan la maternidad, sobre todo las j¨®venes. En cambio, las mujeres con estudios elementales tienen hijos m¨¢s temprano (ver gr¨¢fico). "El retraso en la edad de la maternidad es general, pero m¨¢s acusado en el caso de las universitarias", detalla Delgado.

- Ni?os y dormitorios. Los expertos han estudiado la relaci¨®n entre n¨²mero de hijos y dormitorios, tomando el grupo de mujeres entre 40 y 49 a?os. Aunque se desconoce en qu¨¦ medida influy¨® el tipo de domicilio sobre la descendencia, se constata que el 39,5% de las madres con vivienda de hasta dos dormitorios han tenido un solo hijo. Entre las que tienen m¨¢s de dos habitaciones s¨®lo el 11,2% tuvo hijo ¨²nico.

- Preferencia por las ni?as. Tras analizar el comportamiento reproductivo de las madres que han llegado a la cuarentena y por tanto pr¨¢cticamente han concluido la procreaci¨®n, los investigadores han descubierto que si el primer beb¨¦ fue ni?o, el 79,4% tuvo un segundo hijo. En cambio, si naci¨® una primog¨¦nita, las madres buscaron en menor medida un segundo hijo. Lo hizo el 76%. "Es una diferencia significativa, entre otras cosas porque es una pauta regular", se?ala Delgado. "Estos datos parecen constatar que las mujeres, que en general tienen la ¨²ltima palabra sobre su fecundidad, prefieren tener una hija. Esto podr¨ªa deberse a razones afectivas o emocionales". "Por eso hay m¨¢s hijas ¨²nicas que hijos ¨²nicos", a?ade Barrios. Sin embargo, por ley natural, en Espa?a nacen entre 105 y 107 varones por cada 100 ni?as. Por eso, si se prefiriera un hijo var¨®n, "la natalidad incluso ser¨ªa m¨¢s baja", dice Barrios.