Jatam¨ª, contra las cuerdas
El r¨¦gimen de los ayatol¨¢s se atrinchera contra la mayor¨ªa de la poblaci¨®n que quiere cambio y libertad
La sombra de un nuevo cambio violento se cierne sobre Ir¨¢n, cuyos 65 millones de habitantes asisten desorientados a la ebullici¨®n pol¨ªtica y social que vive el pa¨ªs. Con el 70% de la poblaci¨®n menor de 30 a?os, la antigua Persia es una de las naciones m¨¢s j¨®venes del mundo. Sin embargo, est¨¢ dirigida por un r¨¦gimen de ayatol¨¢s anclados en el pasado y atrincherados en el poder, que amarran con pu?o de hierro.
El estrangulamiento de los reformistas que llegaron al Gobierno hace siete a?os aupados por las esperanzas de buena parte de los iran¨ªes ha lanzado al pa¨ªs por la deriva de la rebeli¨®n interna que, de momento, contiene la represi¨®n que ejerce el Consejo de Guardianes de la Revoluci¨®n y, sobre todo, Hachemi Rafsanyani, ex presidente y aut¨¦ntico poder en la sombra.
"El d¨ªa menos pensado y por un motivo nimio puede saltar la chispa", dice el periodista Yan¨ª
"En Ir¨¢n la reforma del paso a paso ha sido un fracaso. Esa fase, encabezada por el presidente Mohamed Jatam¨ª, est¨¢ acabada. Ahora comienza la reforma radical. El pueblo est¨¢ cansado de la tiran¨ªa del r¨¦gimen. Quiere cambios profundos pol¨ªticos, econ¨®micos, sociales y culturales. Los d¨ªas de los ayatol¨¢s est¨¢n contados". Quien as¨ª habla es uno del centenar de diputados e intelectuales que la semana pasada realiz¨® una huelga de hambre en protesta por el mal trato que reciben los presos pol¨ªticos.
Isa Saharkiz, de 49 a?os, editor y director de la revista Ajbar e Egtesad (Noticias econ¨®micas) y ex director general de Prensa del primer Gobierno de Jatam¨ª, fue interrogado dos veces por la polic¨ªa en las ¨²ltimas semanas y durmi¨® tres d¨ªas en la siniestra c¨¢rcel de Ev¨ªn, al norte de Teher¨¢n, en la que muri¨® a golpes la fot¨®grafa canadiense Zahra Kazemi, en julio pasado. Para Said Alajvedazt¨ª, de 23 a?os, uno de los dirigentes de la revuelta estudiantil de junio pasado, ha llegado el momento de levantarse contra el r¨¦gimen. "Vamos a inflamar la pasividad de la Universidad y a obligar a los reformistas a hablar con nosotros".
Los conservadores responsabilizan al Gobierno reformista del "caos, los abusos y la mala administraci¨®n" que sufre Ir¨¢n desde que Jatam¨ª gan¨® por goleada las elecciones y dos tercios del pa¨ªs se echaron a la calle para celebrarlo. El Gobierno surgido entonces se ha convertido en reh¨¦n de la estructura no electa del Estado, es decir, del l¨ªder supremo, Al¨ª Jamenei; del Consejo de Guardianes de la Revoluci¨®n, donde se sienta la jerarqu¨ªa religiosa chi¨ª; del Consejo de Discernimiento, que act¨²a como ¨¢rbitro y que dirige Rafsanyani, y la Judicatura. Atado de pies y manos, el Ejecutivo ni tan siquiera tiene capacidad para dimitir. "Dimisi¨®n en un pa¨ªs isl¨¢mico significa dar la espalda a la misi¨®n encomendada por Al¨¢, y eso no lo har¨¢ Jatam¨ª", asegura el representante del l¨ªder supremo y antiguo jefe de la prisi¨®n de Ev¨ªn, Husein Shariatmadari.
La baj¨ªsima participaci¨®n en las municipales de febrero que no lleg¨® al 40% y en Teher¨¢n cay¨® hasta el 12%, es el s¨ªntoma m¨¢s claro de la apat¨ªa y el distanciamiento que la sociedad iran¨ª ha tomado con respecto al r¨¦gimen. Todos los analistas vaticinan que las elecciones generales, previstas para dentro de cinco meses, ofrecer¨¢n el mismo panorama y, al igual que las municipales, ser¨¢n ganadas por los conservadores.
Karim¨ª Yun¨ª, editor de la revista mensual Gozaretz, se encuentra, tras una semana en Ev¨ªn, en libertad bajo fianza de 500 millones de rials (50.000 euros) -"una fortuna que he recogido entre familiares y amigos"- por la publicaci¨®n, en abril pasado, de un art¨ªculo sobre la brecha entre el pueblo y el r¨¦gimen. Yun¨ª dice que la frustraci¨®n de los j¨®venes es tal que "el d¨ªa menos pensado y por un motivo tan nimio como un partido de f¨²tbol puede saltar la chispa".
Tal vez ajeno a lo que sucede a su alrededor, el l¨ªder supremo arengaba a los estudiantes, la semana pasada, al inicio del curso acad¨¦mico, a "construir el glorioso futuro de su patria, a trav¨¦s de su talento, su inter¨¦s cient¨ªfico, su fe y su castidad". El Consejo de la Revoluci¨®n rechazaba en agosto las propuestas del Parlamento para suscribir la Convenci¨®n de la ONU sobre los Derechos de la Mujer y para prohibir la tortura en casos de discrepancias sobre la Constituci¨®n y la Sharia (ley isl¨¢mica).
Acad¨¦micos y funcionarios que apoyaron las revueltas contra el shah en 1978 se declaran ahora frustrados porque la Revoluci¨®n Isl¨¢mica no s¨®lo no acab¨® con los aspectos negativos del r¨¦gimen anterior (falta del imperio de la ley, de los derechos humanos y de la armonizaci¨®n entre la libertad pol¨ªtica y la econ¨®mica) sino que ha tiranizado a toda la sociedad. Esto, unido a una inflaci¨®n cercana al 20% ha generalizado el descontento de la poblaci¨®n. "El cambio es inevitable. Puede retrasarse, pero est¨¢ en marcha", asegura el profesor Hermidas Bavand, ex diplom¨¢tico y primer representante del Gobierno de Jomeini ante la ONU, que en 1982 abandon¨® su cargo por divergencias con el r¨¦gimen.
Los iran¨ªes m¨¢s optimistas creen que cuando los conservadores dominen todas las esferas del Estado se producir¨¢ una mayor represi¨®n que facilitar¨¢ la uni¨®n de la oposici¨®n. "Una oposici¨®n interior fuerte y la presi¨®n exterior forzar¨¢n la desintegraci¨®n pac¨ªfica de la teocracia y la aparici¨®n de una rep¨²blica democr¨¢tica", afirma el mul¨¢ rebelde, Mohsen Kadivar.
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