Las universidades vascas se preparan para el reto de la convergencia europea

El espacio europeo de la educaci¨®n superior tiene una fecha de nacimiento, 2010, y las universidades vascas se afanan en las transformaciones necesarias para cumplir las condiciones que les permitan participar en un proceso clave en el futuro de la instituci¨®n universitaria en el continente. La UPV, la Universidad de Deusto y Mondragon Unibertsitatea aumentan curso a curso el n¨²mero de medios, reflexiones, esfuerzos y preocupaciones para no quedar descolgados de un proceso definido por el rector de la universidad p¨²blica, Manuel Montero, como "fundamental".

Docencia, calidad, investigaci¨®n y relaciones interuniversitarias son las cuatro grandes ¨¢reas sobre las que las instituciones de educaci¨®n superior deben centrar sus esfuerzos de adecuaci¨®n en pos de un modelo com¨²n. La principal dificultad que tienen que superar UPV, Deusto y Mondragon radica en el escaso margen de tiempo, siete a?os, con el que cuentan para cambios de una gran envergadura. As¨ª lo reconoce Adolfo Morais, director de Relaciones Internacionales y delegado para la Convergencia Europea en la UPV. "Llevar a cabo un proceso de reconversi¨®n semejante en tan poco tiempo no resulta tarea f¨¢cil. Pero no es inabordable. Tenemos personas y experiencia para ello", afirma.

"Llevar a cabo un proceso de reconversi¨®n semejante en siete a?os no resulta tarea f¨¢cil"

A la superaci¨®n de las estrecheces temporales no ayuda la situaci¨®n de indefinici¨®n y de adaptaci¨®n a la nueva normativa surgida con la LOU que vive la universidad espa?ola en general, y la vasca en particular. Pese a la voluntad pol¨ªtica de completar el camino hacia un espacio com¨²n, el sistema universitario aguarda expectante la publicaci¨®n, prevista para el ¨²ltimo trimestre de este a?o, de los reales decretos que desarrollen y detallen las directrices sobre la convergencia europea recogidas en la ley de 2001.

En el caso de la comunidad aut¨®noma, tambi¨¦n se est¨¢ a la espera de la aprobaci¨®n de la nueva Ley Vasca de Universidades. "Es complicado establecer acciones cuando a¨²n no sabemos con exactitud los m¨¢rgenes en los que nos debemos mover", indican Morais y Arantza Tapia, coorganizadora de un curso de verano de la UPV sobre convergencia europea.

Aun sin conocer el contenido de las disposiciones legales, no cabe duda de que los cambios m¨¢s llamativos se producir¨¢n en el campo de la docencia. La implantaci¨®n de un sistema de cr¨¦ditos basados no en las horas lectivas -modelo actual-, sino en el trabajo del alumno -criterio m¨¢s cercano al sistema anglosaj¨®n que al usado en el sur de Europa-, la nueva estructuraci¨®n de las titulaciones de pregrado -diplomatura- y grado -licenciatura- en lugar de los tres ciclos actuales y su proceso de homologaci¨®n en toda Europa, suponen un reto de primer orden para las universidades.

Deusto coordina, junto a la universidad alemana de Groningen, el proyecto Tuning, una de las iniciativas puestas en marcha por los centros europeos para aportar la reflexi¨®n de las universidades sobre una apuesta promovida desde el ¨¢mbito pol¨ªtico. La propia instituci¨®n bilba¨ªna comenz¨® en el curso 2001-2002 a impartir de forma experimental algunas de sus titulaciones, cada curso en mayor n¨²mero, bas¨¢ndose en un nuevo modelo pedag¨®gico m¨¢s pr¨®ximo al marcado para el espacio universitario europeo, tal y como destaca su vicerrector de Innovaci¨®n Pedag¨®gica, Aurelio Villa.

De igual manera lo hace Mondragon Unibertsitatea con su proyecto Mendeberri, puesto en marcha hace ahora tres a?os, con el que pretende, seg¨²n su vicerrector acad¨¦mico, Jos¨¦ Mar¨ªa Aizega, profundizar en las competencias del alumno y no s¨®lo en su conocimiento t¨¦cnico.

La UPV, que ya particip¨® en 1989 en la entonces experiencia piloto del cr¨¦dito europeo, pretende ahora sacar provecho de su labor con el programa Erasmus de intercambio de alumnos y de profesores y de su trabajo en los campos de la calidad y de la investigaci¨®n. ?stos ¨²ltimos son de importancia vital para los nuevos doctorados y posgrados que se gesten en el futuro sistema universitario europeo, un modelo con el que tambi¨¦n se pretende aumentar el atractivo para potenciales alumnos de otros continentes de la Universidad europea y fortalecer su poder y su papel frente a las estadounidenses.

Tanto la universidad p¨²blica vasca como las de Deusto y Mondragon afrontan, por tanto, una carrera contra el reloj para, si as¨ª lo acredita el organismo oficial correspondiente, poder formar parte de una Europa unida tambi¨¦n en la ense?anza superior.