Expulsi¨®n (que no fuga) de cerebros

Por m¨¢s que la ret¨®rica sea de evitar la fuga de cerebros, no me va a quedar m¨¢s remedio que volver a marcharme. Soy licenciada en econom¨ªa por una universidad espa?ola, master y doctora por la London School of Economics (una de las m¨¢s prestigiosas universidades europeas), tambi¨¦n he sido becaria Fulbright en UC Berkeley. He estado form¨¢ndome m¨¢s de seis a?os fuera de mi pa¨ªs, pagando un alto precio a nivel personal, gracias casi siempre a becas de gobiernos extranjeros, pero a la hora de querer regresar me encuentro que con la actual ley de universidades en la mano existen muy pocas formas de que una universidad p¨²blica espa?ola pueda ofrecerme un contrato.

El Ministerio de Educaci¨®n exige la homologaci¨®n de mi t¨ªtulo de doctora para poder presentarse a las pruebas de habilitaci¨®n (¨²nico camino hacia la plaza fija), y tambi¨¦n para los contratos administrativos (ayudante doctor, contratado doctor, etc¨¦tera.). Al ministerio le lleva como m¨ªnimo un a?o decidir si homologa mi t¨ªtulo al de un doctorado obtenido en una universidad espa?ola. Alternativamente, al tratarse de un t¨ªtulo europeo, puedo pedir el reconocimiento de mi t¨ªtulo para poder ejercer mi profesi¨®n. Para que se me reconozca profesionalmente debo presentar documentaci¨®n acreditativa de haber ejercido fuera de Espa?a como profesora universitaria a tiempo completo por al menos dos de los ¨²ltimos 10 a?os. Soy doctora desde hace s¨®lo un a?o ?Se espera de m¨ª que haga mi doctorado y ejerza dos a?os fuera de Espa?a para poder ejercer aqu¨ª? ?Es realista esperar que alguien regrese a Espa?a cuando se haya establecido en una universidad extranjera? ?O que me pase un a?o en blanco despu¨¦s de obtener mi doctorado mientras el ministerio decide si me homologa o no el t¨ªtulo?

La universidad espa?ola es de por s¨ª poco atractiva en t¨¦rminos de salario y prestigio internacional, por lo que encuentra dif¨ªcil atraer a investigadores de prestigio.

Como yo, doctores de las universidades m¨¢s prestigiosas del mundo se enfrentan a la gran incongruencia administrativa de que sus t¨ªtulos no son admitidos para las figuras contractuales actuales en la universidad espa?ola. Esto no se puede ya calificar de fuga de cerebros, es pura expulsi¨®n de cerebros.