"Las cosas que aprender¨ªamos de Federico con estas exhumaciones son menores"
Laura Garc¨ªa Lorca es una de los seis sobrinos del poeta Federico Garc¨ªa Lorca y dirige en la actualidad la Huerta de San Vicente en Granada, el lugar donde vivi¨® su t¨ªo entre 1926 y 1936. Hija de Francisco, un hermano del poeta, y de Laura de los R¨ªos, hija a su vez de Fernando de los R¨ªos, ministro de Instrucci¨®n P¨²blica en la II Rep¨²blica, Laura naci¨® en Nueva York. No visit¨® Espa?a hasta tener 12 a?os cumplidos. Semanas atr¨¢s, los sobrinos de Federico han hecho p¨²blica su negativa a que se exhumen los restos del poeta de la fosa donde, supuestamente, reposan junto a un maestro y a dos banderilleros anarquistas. Las familias del maestro y de uno de los banderilleros han iniciado ya los tr¨¢mites para buscar sus restos.
"Pedimos el edificio del Banco de Espa?a y estamos esperando una respuesta"
"El deseo de los familiares de Balad¨ª y de Galindo es leg¨ªtimo y comprensible"
Pregunta. ?Por qu¨¦ su postura de no permitir la exhumaci¨®n de los restos de su t¨ªo?
Respuesta. En primer lugar, queremos manifestar nuestro respeto y nuestra comprensi¨®n a los familiares de Di¨®scoro Galindo y Francisco Balad¨ª . Sabemos que tener un lugar significa mucho para mucha gente y ese sentimiento, yo personalmente, lo comparto y lo comprendo muy bien. S¨¦ la importancia o el consuelo que da tener un lugar concreto. Yo misma, desde luego, voy al cementerio donde est¨¢n mis padres y mis abuelos. Pero creo que en este caso se puede hacer un ajuste en cuanto a lo que significa el lugar y pensar que lo que hay ahora es una tumba, es un cementerio pero que es muy grande y est¨¢ compartido por muchos. Son muchos los que sufrieron la misma tragedia y me gustar¨ªa pensar que la figura de Federico Garc¨ªa Lorca, el m¨¢s conocido entre todos ellos, pudiera servir para proteger el lugar y darlo a conocer y conservarlo como lo que es, un cementerio
P. ?Habr¨ªa alg¨²n motivo por el que s¨ª aceptaran la exhumaci¨®n de Federico, si est¨¢ all¨ª?
R. Desde el punto de vista hist¨®rico, creo que las cosas que podr¨ªamos aprender de Federico con estas exhumaciones son menores; poco m¨¢s que saber el lugar exacto donde est¨¢n los cad¨¢veres. En cambio, la violencia es mucha. No creo que aparezca una raz¨®n muy importante que nos permita aprender m¨¢s sobre lo que sucedi¨® y por tanto, no creo que cambiemos nuestra postura.
P. ?Es una posici¨®n com¨²n y un¨¢nime de la familia?
R. En este caso s¨ª. Hemos considerado que era un asunto importante y que deb¨ªamos de hablar en nombre de todos. Tuvimos una reuni¨®n los seis sobrinos y entre todos redactamos un comunicado con nuestra postura. Todos estuvimos de acuerdo en lo que pens¨¢bamos sobre este asunto.
P. ?Cree que la b¨²squeda de los otros restos puede ser una jugada para buscar en realidad a Federico Garc¨ªa Lorca?
R. No lo s¨¦. Prefiero no especular sobre eso. S¨ª estoy segura de que el deseo de los familiares de Balad¨ª y de Galindo es leg¨ªtimo y comprensible. A partir de ah¨ª, si otros buscan otro fin, no lo s¨¦. Prefiero no especular. Nosotros tenemos que explicar nuestras razones e intentar que se comprendan y se compartan.
P. ?Qu¨¦ se sabe con certeza sobre la fosa objeto de esta discordia?
R. Puede ser una fosa s¨®lo de cuatro personas. Con exactitud no hay muchos datos m¨¢s sobre esa fosa. Puede que haya que buscar y buscar mucho.
P. ?Cree que, finalmente, se abrir¨¢n las fosas de Galindo y Galad¨ª?
R. Yo guardo la esperanza de que no, aunque no s¨¦ lo que pasar¨¢.
P. Si se abren y junto a los dos cuerpos buscados aparece uno o dos m¨¢s, ?qu¨¦ postura tomar¨¢n los sobrinos?
R. No lo sabemos todav¨ªa. No hemos llegado a ese punto. Ahora estamos en donde estamos. No s¨¦ ni lo que har¨ªamos. Podr¨ªamos no dar nuestro ADN para que no se pudieran comparar.
P. Pero la presi¨®n social va a ser muy fuerte para investigar todos y cada uno de los cuerpos que all¨ª aparezcan ...
R. Imagino que s¨ª pero me cuesta todav¨ªa ponerme en esa fase, si es que llega.
P. ?Por qu¨¦ han solicitado personarse en el expediente de estas fosas?
P. Lo que hemos hecho ha sido mandar un escrito al Ayuntamiento exigiendo estar informados de todos los pasos. No lo hemos estado hasta ahora. Nadie se ha dirigido a nosotros. Ni la Asociaci¨®n para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica ni el Ayuntamiento de Alfacar.
P. Ian Gibson opina que si aparece el cuerpo de Federico se podr¨ªa aprender m¨¢s que con 100 libros. ?Qu¨¦ le parece esa opini¨®n?
R. Me extra?a que Gibson diga eso porque ¨¦l mismo ha escrito un libro de suma importancia sobre la represi¨®n en Granada y luego una biograf¨ªa con una documentaci¨®n extens¨ªsima sobre la vida y la muerte de Federico. Entonces, no es ¨¦l quien puede decir que faltan datos por conocer, sobre todo cuando ¨¦l mismo es el que m¨¢s ha contado sobre la muerte de Federico. Yo creo que son datos que ¨¦l tiene curiosidad por conocer pero que no creo que tengan demasiada importancia para el mundo.
P. Hay un Patronato de la Huerta de San Vicente, un Patronato Garc¨ªa Lorca y una Fundaci¨®n Garc¨ªa Lorca. ?No son muchas instituciones para lo mismo?
R. Efectivamente, son muchas instituciones. Parece l¨®gico pensar que deber¨ªa haber una mayor coordinaci¨®n entre todas ellas. Nuestro deseo desde que se cre¨® la Fundaci¨®n Federico Garc¨ªa Lorca [situada actualmente en la Residencia de Estudiantes de Madrid y con el grueso de la documentaci¨®n sobre el poeta], y decidimos donarle todos los documentos,y hablo en nombre de toda la familia, fue instalar la fundaci¨®n en Granada. Por determinadas circunstancias no se pudo hacer entonces, en 1982. Parece que ¨¦ste es el momento de sacar adelante este proyecto. La Fundaci¨®n est¨¢ afianzada como tal. La Huerta est¨¢ en marcha desde hace ocho a?os y se ocupa de la cultura y de los movimientos art¨ªsticos de nuestro tiempo, adem¨¢s de la pedagog¨ªa y la ense?anza de esas disciplinas. Nuestro deseo es crear una ¨²nica instituci¨®n que se ocupe de todos los asuntos lorquianos.
P. ?D¨®nde estar¨¢ la sede en Granada de ese nuevo consorcio, ahora que el PP no parece dispuesto a ceder el edificio del Banco de Espa?a para ese fin?
R. En su d¨ªa visitamos posibles sedes y vimos que la que mejor se adecuaba a nuestras necesidades era el edificio del Banco de Espa?a. Lo hemos pedido y estamos esperando una respuesta. Esto de ahora nos sorprende pero no sabemos qu¨¦ alcance tiene de verdad.
P. ?Para cu¨¢ndo llegar¨¢ todo a Granada?
R. Por ahora s¨®lo contemplamos como fecha cuando est¨¦ preparado el edificio que hemos pedido, el del Banco de Espa?a, que queda libre a partir del 31 de diciembre de 2004. A pesar de los comentarios de los ¨²ltimos d¨ªas, espero que todo llegue a buen puerto y podamos conseguir el edificio con una cesi¨®n por un tiempo determinado para instalar el consorcio.
P. ?Quedan documentos in¨¦ditos de Federico?
R. Que nosotros sepamos, no. Nosotros no tenemos nada que no se haya hecho p¨²blico.
P. ?Aparecer¨¢ la voz alg¨²n d¨ªa?
R. Yo estoy convencida de que aparecer¨¢. Es raro que no haya aparecido ya porque le pidieron que hablara mucho y a ¨¦l le gustaba mucho hablar. Probablemente aparecer¨¢ en Argentina alg¨²n d¨ªa.
P. ?Tiene curiosidad por conocer su voz?
R. S¨ª, much¨ªsima, me llama mucho la atenci¨®n porque la voz es algo tan vivo que tengo much¨ªsimas ganas de o¨ªrlo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.