Analg¨¦sicos

En La botica de la abuela (La 2) recomiendan el licor de manzanilla para paliar dolores digestivos. Bolas de manzanilla maceradas en un litro de an¨ªs, quince d¨ªas de reposo y ya est¨¢. Intento hacer la prueba, pero soy impaciente y me tomo m¨¢s an¨ªs de la cuenta. Resultado: los dolores digestivos aumentan, pero, en compensaci¨®n, la televisi¨®n me parece m¨¢s llevadera.

Peliculones

Antena 3 programa Torrente 2. Casi todas las caras que salen me suenan de la tele. Cristina T¨¢rrega interpreta a una prostituta a la que Torrente extorsiona. Tambi¨¦n est¨¢ Jos¨¦ Luis Moreno, acompa?ado de un mono repelente, mucho antes de disfrutar del ¨¦xito de su Aqu¨ª no hay quien viva. Y Yola Berrocal, que cumple en un fugaz papel de travestido. Santiago Segura tuvo la habilidad de contar con ellos para hacer una pel¨ªcula con la que los cr¨ªticos suelen rasgarse las vestiduras al grito de ?c¨®mo es posible que sea una de las m¨¢s taquilleras del cine espa?ol? Otro de los actores no profesionales que salen en Torrente 2 es ??igo, ex concursante del primer Gran Hermano. Dicen que ha escrito un libro (todav¨ªa no ha salido, creo) titulado Borrachos de fama, en el que, a trav¨¦s de su experiencia, reflexiona sobre los estragos de la fama. Como ven, la televisi¨®n no fomenta la lectura, pero, a tenor de la cantidad de libros que genera, promueve la escritura.

Valores

Se acusa a determinadas personas de haber ejercido la prostituci¨®n. El espect¨¢culo consiste en acorralarlas hasta que acaben confesando. Para a?adir presi¨®n a la jaur¨ªa, el periodismo rosa no tiene demasiados escr¨²pulos, y hace una interpretaci¨®n de la deontolog¨ªa que recuerda los entra?ables m¨¦todos de Harry el Sucio. "No hay nada malo en ser prostituta", se hartan de repetir, pero siguen apret¨¢ndole las tuercas a la v¨ªctima de turno. ?Cu¨¢l es la mejor manera de dar credibilidad a la acusaci¨®n? Buscar al proxeneta, entrevistarlo, darle minutos en pantalla y convertirlo en el fiscal de la supuesta acusada. Curiosamente, nunca se acusa a nadie de haber ejercido el proxenetismo, de lo que se deduce que, en la curiosa jerarqu¨ªa de profesiones que populariza la televisi¨®n, ser macarra es m¨¢s respetable que ser puta.

T¨²nica sagrada

Intento purificarme viendo al Dalai Lama en Lo + Plus. Fernando Schwartz le entrevista fuera del plat¨®. El tibetano se muestra relajado, simp¨¢tico, opina sobre la situaci¨®n de su pa¨ªs y la negativa de Aznar a recibirle y da la impresi¨®n de ser una persona muy positiva. Fernando Schwartz, sin embargo, rompe la prudente distancia entre entrevistador y entrevistado. Se muestra tan agradecido con su invitado, tan de acuerdo con todo lo que dice que, en lugar de una entrevista, el encuentro acaba pareciendo una audiencia entre un fiel y su ¨ªdolo. En La 2, en cambio, la entrevista que Rosa Salgado le hace al Dalai Lama se ci?e m¨¢s a la estructura cl¨¢sica del g¨¦nero y tiene, quiz¨¢ por eso, m¨¢s contenido.