Savater se acerca al tema esencial de su obra a trav¨¦s de los desaf¨ªos de la libertad
'El valor de elegir' propone distintos caminos para entender un concepto trivializado
El gran equ¨ªvoco sobre la libertad es que se la confunde con la omnipotencia. Sin embargo, elegimos siempre en el marco de una realidad que circunscribe nuestras opciones. "Somos libres con limitaciones", dijo Fernando Savater (San Sebasti¨¢n, 1947) ayer durante la presentaci¨®n de su ¨²ltimo libro, El valor de elegir (Ariel). Un ensayo en el que, tal como escribe, Savater aborda "el n¨²cleo esencial de cuanto he escrito". De lo que se trataba, coment¨®, era de pensar "?qu¨¦ es y para qu¨¦ sirve?" la libertad, un t¨¦rmino que de tanto usarse ha perdido su sentido.
"Sin voluntad no eliges, y puedes quedarte en el gesto de protestar y patalear"
El valor de elegir forma parte de ese tipo de libros en los que Savater aborda cuestiones complejas y que, sin embargo, est¨¢n tan ¨ªntimamente vinculadas a la experiencia cotidiana que parecen tenerse ya por sabidas. As¨ª que se mete en el fregado, y va colocando una piedra detr¨¢s de otra con la voluntad de clarificar las cuestiones que tienden a enmara?ar el problema. El resultado final es indiscutible: el lector comprende el significado y los retos que plantea la libertad.
Cada vez m¨¢s, en el caso de Savater, el personaje p¨²blico se impone al hombre, al escritor y al fil¨®sofo. Era inevitable que, durante la presentaci¨®n de ayer, no se olvidara que quien ha escrito ahora sobre la libertad no tenga m¨¢s remedio que convivir con un escolta que vela por su seguridad. "No es que se elija ser libre o no serlo. No decidimos si tenemos que respirar o no, simplemente respiramos. Del mismo modo, es la propia condici¨®n humana la que te enfrenta a la libertad", coment¨®. "Y cada cual debe hacerlo en el marco de la realidad que le ha tocado vivir".
La acci¨®n, la incertidumbre y la fatalidad, el azar, la voluntad, la capacidad racional y la sombra de lo irracional, el arte de vivir, lo bueno y lo malo: Savater se ocupa en la primera parte del libro de ir "cercando" poco a poco el concepto de libertad de una manera fundamentalmente abstracta, y propone en la segunda parte "un breve repertorio de opciones libres argumentadas" para comprometer esas abstracciones "con la peripecia actual que vivimos y en la que somos". Es ah¨ª donde baja al ruido del presente y se decanta por elegir la verdad, el placer, la pol¨ªtica, la educaci¨®n c¨ªvica, la humanidad y lo contingente. Una vez m¨¢s, el fil¨®sofo Savater no se anda por las ramas.
En el gesto de elegir, afirm¨® Savater, participan el conocimiento, la imaginaci¨®n y la voluntad. "El conocimiento nos permite, dentro de sus limitaciones, descartar las opciones irreales a las que nos enfrentamos. Gracias a la imaginaci¨®n podemos ir m¨¢s all¨¢ y romper con la cadena de rutinas en la que habitamos. Sin voluntad, en fin, no eliges, y puedes quedarte encapsulado en el gesto de patalear y protestar porque el mundo no te gusta".
De lo m¨¢s general a lo m¨¢s concreto, Savater respondi¨® a cuantas preguntas se le hicieron. "No han sido mis opciones pol¨ªticas las que m¨¢s me ha costado tomar", dijo, "las decisiones m¨¢s complejas son siempre de ¨ªndole privada". "La libertad no es un tren que sale y ya no hay quien lo pare: hay que irle constantemente echando le?a para que funcione". "Frente a la zozobra y la angustia del que elige, son muchos los que prefieren cobijarse en un mont¨®n de certezas que los alivian de la incertidumbre". "La libertad no es algo de lo que se parte, es algo que se conquista". "Soy bastante impermeable a las cr¨ªticas que recibo, s¨®lo me afectan las opiniones de un n¨²mero reducido de personas".
"Si se mira al pasado, no se tarda mucho en comprender que estamos sometidos a una fatalidad, la de saber que vamos a morir, y que ese destino, hagamos lo que hagamos, no podemos evitarlo", dijo Savater. "Para algunos, la muerte es una m¨¢s de una cadena de fatalidades, y los m¨¢rgenes de maniobra son escasos. Otros, en cambio, consideran que la muerte es lo ¨²nico inevitable y que hay un mont¨®n de caminos abiertos. La libertad, en buena medida, es ir levantando barreras entre nosotros y esa fatalidad".
?Es posible hablar de progreso moral, han conseguido los hombres ser con el tiempo mejores? "No tengo ninguna duda de que la existencia de la Seguridad Social es un enorme progreso. Se han conquistado con el tiempo nuevos derechos, hay igualdad de voto, las opiniones p¨²blicas reaccionan contra los excesos de los pol¨ªticos. S¨ª, creo que ha habido un progreso en la civilizaci¨®n. Las instituciones son mejores. Las personas, quiz¨¢ no, pero digamos que, gracias a esas instituciones, nos comportamos mejor".
El arte de vivir
El fil¨®sofo Manuel Cruz fue el encargado de presentar ayer el nuevo libro de Savater. Comenz¨® por elogiar su t¨ªtulo, El valor de elegir.
Con s¨®lo unas cuantas palabras, dijo, "
consigue siempre situar al lector en el coraz¨®n del asunto que va a tratar, incluso resumirle, en inveros¨ªmil s¨ªntesis, la sustancia de todo lo que va a plantear a continuaci¨®n".
En este caso, contin¨²o Manuel Cruz, el t¨ªtulo "alude tanto a lo valioso que tiene el hecho de tomar decisiones como al coraje que se requiere para hacerlo".
Coment¨® despu¨¦s que Savater ha desarrollado en la primera parte del libro "lo que ¨¦l mismo propone denominar una
antropolog¨ªa de la libertad". "Es una aut¨¦ntica joyita", dijo, para subrayar a continuaci¨®n la capacidad de Savater para llegar a p¨²blicos muy diversos, como en su d¨ªa hiciera Ortega. "En las primeras p¨¢ginas est¨¢ todo, se presenta una reconstrucci¨®n impecable de la problem¨¢tica de la acci¨®n humana, aparecen todos los autores y problemas relevantes... y al mismo tiempo, en gran parte merced a la claridad expositiva, la soltura estil¨ªstica y el gracejo que caracterizan a Fernando Savater, se leen de un tir¨®n".
Sobre la segunda parte, Manuel Cruz coment¨® que ah¨ª est¨¢ "el abanico de sus elecciones, sus particulares opciones, las apuestas (razonables) que configuran el armaz¨®n de su plan de vida".
Habl¨® tambi¨¦n del breve ensayo que public¨® Isaiah Berlin hace ya muchos a?os y en los que divid¨ªa a ditintos autores como zorras o como erizos, a partir de una simple frase del poeta griego Arqu¨ªloco: "La zorra sabe muchas cosas; el erizo s¨®lo sabe una, pero la sabe muy bien".
" Teniendo en cuenta el espectacular despliegue de conocimientos que a lo largo de toda su obra ha hecho", explic¨® Cruz, "yo siempre hab¨ªa tendido a incluirlo en el primero. Pero, tras finalizar la lectura de El valor de elegir, he cambiado de opini¨®n (aunque con matices). Ahora pienso que, en realidad, Savater sabe una sola cosa, pero especialmente importante, porque es la ¨²nica cosa que abarca a todas las dem¨¢s: sabe vivir o, quiz¨¢ mejor dicho, sabe c¨®mo enfrentarse a la vida".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.