Un caso judicial sepultado entre papeles

El caso del Prestige avanza lentamente en el juzgado de Corcubi¨®n (A Coru?a), empantanado en un mar de papeles y personas que se han presentado como afectadas. Aunque no hay grandes novedades, el sumario no para de crecer. Acaba de abrirse el tomo noveno, y cada uno tiene unas 400 p¨¢ginas. El peque?o juzgado de la localidad de 2.000 habitantes, acostumbrado a tratar juicios de faltas, herencias o divorcios, sigue desbordado. Cada vez m¨¢s. Aunque en los ¨²ltimos meses, con las vacaciones, la actividad se ha frenado notablemente, nadie parece tener quejas del juez, Francisco Javier Collazo, que ha iniciado su carrera pr¨¢cticamente con este sumario. Las protestas se deben a la falta de medios.

Un dato sirve para ilustrar la escasez. Hay al menos 300 personas que han acudido al juzgado para exigir responsabilidades. Y dos organizaciones, Nunca M¨¢is e Izquierda Unida, que se han personado como acusaci¨®n particular. En teor¨ªa, tienen derecho a recibir copia de todo lo que se va incorporando al sumario. Pero s¨®lo hay una fotocopiadora en el juzgado, y el juez s¨®lo tiene a seis funcionarios a su cargo. El asunto ha llegado a la Audiencia Provincial, que ha determinado que las partes, aunque sea a su costa, tienen derecho a conocer el sumario.

Adem¨¢s, el juzgado tambi¨¦n est¨¢ a la espera de datos fundamentales. Sobre todo, las comisiones rogatorias a¨²n no respondidas. Es fundamental la que se pidi¨® a Rusia para saber qu¨¦ pas¨® durante la larga estancia del barco en el puerto de San Petersburgo, donde fue utilizado como dep¨®sito. Hay otra a Dinamarca, pa¨ªs del pr¨¢ctico que naveg¨® con el Prestige y mucho despu¨¦s de que se hundiera dijo a la prensa que "no estaba en condiciones de navegar".

Tambi¨¦n espera el juzgado una evaluaci¨®n definitiva de los da?os. Muchos ayuntamientos y comunidades no han enviado a¨²n su informe, y otros no pueden cerrarse porque el chapapote sigue llegando a las playas.

En las ¨²ltimas semanas s¨®lo ha habido dos novedades. Por una parte, la presentaci¨®n del informe pericial de Nunca M¨¢is. Esta organizaci¨®n trata de demostrar la responsabilidad del Gobierno. Por otra, la decisi¨®n del juez de autorizar que los robots de Repsol, con supervisi¨®n judicial, recojan muestras del pecio para saber por qu¨¦ se rompi¨® el barco. El Gobierno pretende inculpar a la sociedad calificadora ABS, que certific¨® el buen estado del buque.

El informe pericial de Nunca M¨¢is ha sido encargado a Felipe Louz¨¢n, capit¨¢n de la marina mercante y profesor de t¨¦cnicas de navegaci¨®n en la Universidad de A Coru?a. Trata de reforzar la idea de que el Gobierno se equivoc¨®, y por tanto es responsable. Para ello es fundamental demostrar que hab¨ªa una opci¨®n alternativa. En un informe de 50 p¨¢ginas se explica que el traslado del buque a la R¨ªa de Corcubi¨®n, al abrigo del temporal, hubiera minimizado las consecuencias del vertido. Esta r¨ªa, de calado m¨¢s que suficiente, est¨¢ a s¨®lo seis horas de navegaci¨®n de donde estaba el Prestige cuando se acerc¨® a la costa.

El informe destaca tres errores de las autoridades espa?olas. Primero, enviar un solo inspector al barco, que no detect¨® que el Prestige se romper¨ªa en alta mar; luego, imponerle el peor rumbo posible, dada la meteorolog¨ªa de esos d¨ªas; finalmente, obligarle a arrancar el motor, lo que desestabiliz¨® m¨¢s la estructura del petrolero.