La deuda externa atenaza a Irak

El grado de generosidad interesada de la comunidad internacional no s¨®lo se pondr¨¢ a prueba el jueves y el viernes, en la Conferencia de Donantes para Irak que se celebrar¨¢ en Madrid. Aunque se alcanzasen sus objetivos m¨¢s optimistas -el Banco Mundial y la ONU calculan que ser¨¢n necesarios m¨¢s de 35.000 millones de d¨®lares hasta 2007 para reconstruir el pa¨ªs, sin contar los 20.000 millones destinados a mejorar la seguridad y la infraestructura del petr¨®leo que aportar¨¢ EE UU-, a¨²n quedar¨ªa sin resolver el futuro de la gigantesca deuda externa iraqu¨ª, de unos 350.000 millones de d¨®lares, que pende como una espada de Damocles sobre cualquier intento de recuperaci¨®n de la econom¨ªa.

De la cifra estimada por el semanario brit¨¢nico The Economist, 97.000 millones corresponden a deudas contra¨ªdas con gobiernos de Oriente Pr¨®ximo (55.000 millones) y pertenecientes al Club de Par¨ªs (42.000 millones); 53.000 millones son deudas comerciales, y el grueso, 200.000 millones, compensaciones de guerra, la mayor¨ªa adeudadas a Kuwait.

Renegociaci¨®n de la deuda

El Club de Par¨ªs (integrado por los principales acreedores oficiales bilaterales) anunci¨® en julio que no espera ning¨²n pago antes de finales de 2004, y es de esperar que tanto estos gobiernos como los bancos acreedores que forman el Club de Londres acaben negociando alguna clase de quita y de reestructuraci¨®n de los pagos pendientes. Adem¨¢s, la resoluci¨®n 1.483 de Naciones Unidas, aprobada en mayo pasado, concede inmunidad a los ingresos iraqu¨ªes procedentes del petr¨®leo, que se han de integrar en el Fondo de Desarrollo para Irak, una vez descontado un 5% destinado al Fondo de Compensaci¨®n para Kuwait.

Pero estas pr¨®rrogas y salvaguardas no suponen siquiera un peque?o respiro en una econom¨ªa cuyo producto interior bruto (PIB) se ha reducido a la mitad en los ¨²ltimos tres a?os -el Banco Mundial estima que el PIB de 2003 est¨¢ entre 12.000-16.000 millones de d¨®lares-, cuyas tasas de paro superan el 50% de la poblaci¨®n activa, y con una inflaci¨®n del 23% en julio. Una deuda exterior equivalente al 100% del PIB anual de un pa¨ªs ya se considera "no sostenible", seg¨²n Peter McPherson, presidente de la Universidad de Michigan. La deuda exterior de Alemania tras la I Guerra Mundial equival¨ªa a dos veces su PIB. La de Irak equivale a unas 20 veces el total de lo que produce el pa¨ªs en un a?o.

Sin embargo, la deuda iraqu¨ª, lejos de reducirse, parece aumentar con las ayudas de la Conferencia de Donantes. El pasado viernes, el Senado de Estados Unidos aprob¨® 20.000 millones de d¨®lares para la reconstrucci¨®n de Irak, pero la mitad, 10.000 millones, como pr¨¦stamo, a menos que otros pa¨ªses acreedores -como Rusia, Jap¨®n, Francia o Alemania- condonen tambi¨¦n su deuda. De los 300 millones de d¨®lares que aportar¨¢ Espa?a, 75 millones suponen un cr¨¦dito.

Uno de los argumentos esgrimidos por EE UU es la riqueza de Irak, la segunda mayor reserva petrol¨ªfera del mundo despu¨¦s de Arabia Saud¨ª. Pero para saldar la deuda iraqu¨ª habr¨ªa que destinar todos los ingresos procedentes del petr¨®leo, a un ritmo de producci¨®n de 2,5 millones de barriles diarios (ahora se producen 1,4 millones), y a un precio del crudo alto, durante m¨¢s de 12 a?os. Distintas organizaciones no gubernamentales, como Interm¨®n Oxfam y C¨¢ritas, tratar¨¢n de defender la condonaci¨®n de la deuda iraqu¨ª en la Conferencia de Donantes.

Interm¨®n Oxfam utiliza la doctrina de la deuda odiosa del Derecho Internacional para solicitar la anulaci¨®n de la deuda iraqu¨ª: la deuda es considerada odiosa si los pr¨¦stamos fueron contra¨ªdos por un r¨¦gimen que no ten¨ªa apoyo ciudadano, si el dinero de la deuda no fue usado en beneficio de la poblaci¨®n y si los acreedores actuaron con conocimiento de que el pr¨¦stamo estaba siendo usado para financiar actividades que da?an el bienestar de las personas. Por tanto, la poblaci¨®n no deber¨ªa ser considerada responsable de una deuda contra¨ªda sin su consentimiento y usada en contra de sus intereses.